¡Qué horrible!

Yo en la supuesta "caridad" de la ONU no confío nada (los mismos que promueven el aborto y otras medidas contra-conceptivas, para bajar la tasa de natalidad), sólo la Iglesia puede hacer algo para ayudar a esa pobre gente.
Tiene razón O' Farrill, comida hay mucha en el mundo, el problema es la distribución. ¡No al consumismo!