Mi admiración y adhesión al Caudillo, desde hace unos veinte años mas o menos (fecha de mi 'conversión' al franquismo) no solamente a algunos les pueda parecer irracional, sino que también para mi es inquebrantable. Es lo que tenemos los conversos... Como se suele decir popularmente, "no hay peor inquisidor que el converso".
Asumo vuestras críticas con afecto
Un abrazo en Cristo, N.S.
Marcadores