La situación es un desastre de forma generalizada, pero mira, las quejas al maestro armero. Nosotros hemos nacido con el juego ya muy avanzado y las posibilidades muy escasas.
Todo se parece cada vez más a una de esas partidas de ajedrez en las que una de la partes está incompresiblemente perdiendo todas las posiciones, en lo que todo parece indicar completa incompetencia del estratega. Pero muchas de esas partidas de pronto dan la vuelta y en pocos movimientos se cambian las tornas al haber una estrategia que nadie había advertido en las aparentes derrotas.
Nosotros sólo somos peones aquí, no tenemos la visión del tablero. Cada peón que aguante su posición lo más robustamente que pueda y sepa. Ya veremos que el Estratega tiene pensado para el carlismo.
Marcadores