El fin del hombre es la visión de Dios (la agresión al Maestro Canals)

Fuente: El Pensamiento Navarro, 27 de Marzo de 1971, página 5.


Y VAN…

Agresión a un profesor de la Universidad de Barcelona


BARCELONA, 26.– La Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad de Barcelona ha hecho pública la siguiente nota:

“La Facultad de Filosofía y Letras, ante la brutal agresión de que ha sido objeto uno de sus profesores, ha decidido suspender, como protesta, todas las actividades académicas durante el sábado día 27 de los corrientes (hoy) en sus dos edificios, Central y de Pedralbes. Asimismo ha convocado reunión extraordinaria de su claustro de numerarios para tomar las determinaciones pertinentes”. (Europa Press).

Fuente: El Pensamiento Navarro, 28 de Marzo de 1971, página 3.


Universidad de Barcelona

Agresión a un catedrático

Por Jaime CAPDEVILA


Ya conocen nuestros lectores el hecho ocurrido en la Universidad de Barcelona en la mañana de anteayer en que el Catedrático de Metafísica y colaborador de EL PENSAMIENTO NAVARRO, don Francisco Canals Vidal, fue agredido por un grupo de estudiantes. Puestos en comunicación con alumnos que presenciaron los acontecimientos hemos ido conociendo detalles que revelan la suma gravedad de los hechos. Procuraremos relatarlos con la máxima precisión dentro de la brevedad que nos impone los límites de una crónica.

El Catedrático don Francisco Canals Vidal, Doctor en Filosofía y en Derecho, es sobradamente conocido en los medios universitarios españoles para que necesite una presentación. Tiene publicados libros y artículos en distintas revistas. Deben destacarse su tesis doctoral en Derecho, “Los orígenes románticos del Cristianismo de izquierda”, y “En torno al diálogo católico-protestante”. Ha publicado también otros trabajos de metafísica del conocimiento, y es profundo conocedor de la Filosofía y Teología de Santo Tomás de Aquino. En política hay que destacar sus trabajos de firme carácter tradicionalista.

Los acontecimientos se produjeron durante esta semana en la Escuela de Altos Estudios Mercantiles, lugar donde se imparten las clases de los primeros cursos de Filosofía y Letras, por insuficiencia de espacio en la Universidad antigua.

El lunes, los marxistas de varias Facultades, impidieron las clases celebrando una asamblea en el aula donde el Doctor Canals explica su disciplina los lunes, miércoles y viernes.

El miércoles, antes de invadir nuevamente el aula del Doctor Canals, los comunistas conmemoraron el centenario de la “Commune” de París, primer intento de instaurar el Comunismo en Francia, con gran profusión de carteles propagandísticos y hoces y martillos. La reunión acabó con el canto de la Internacional por los pasillos de la Escuela con el puño en alto. Todo ello se realizó impunemente. A continuación celebraron una asamblea en la que los alumnos del Doctor Canals, visto el cariz comunista de los intrusos, decidieron marcharse con el firme propósito de reanudar las clases.

El viernes, mientras sus alumnos se reunían en otra aula de la Escuela para ver qué medidas se tomaban a fin de reanudar las clases, se produjeron los siguientes incidentes preparados de antemano con gran aparato:

Primero: Había huelga en las Facultades de Derecho y Económicas, lo que facilitaba la concentración marxista en el lugar de los hechos.

Segundo: Un grupo de unas cien personas se dirigió a la sala de profesores en la que se encontraba el Doctor Canals y le forzaron con empujones y zancadillas, hasta la puerta de salida de la Escuela.

Tercero: El interior del edificio estaba lleno de carteles entre los cuales queremos destacar algunos: “Canals dijo: el fin del hombre es la visión de Dios. Esto, en el siglo XI era motivo de canonización; en el siglo XX es motivo de expulsión de la Universidad”. “La Metafísica nos oprime”, etc.

El hecho ha producido honda indignación en los medios universitarios donde el Doctor Canals es muy apreciado. Continuamente se reciben en su domicilio muestras de adhesión y simpatía por parte de compañeros de cátedra y estudiantes.

Ayer por la mañana se reunió la Junta de la Facultad de Filosofía y Letras que expresó, por unanimidad, su solidaridad con el Doctor Canals, y acordó, también por unanimidad, solicitar la interrupción de la asistencia a clase hasta que puedan impartirse las enseñanzas sin ninguna clase de interferencias. Estos dos acuerdos fueron elevados a la Junta de Gobierno de la Universidad. Desconocemos, a la hora de enviar esta crónica, la actitud tomada por este organismo universitario.

De todo ello podemos deducir tres consecuencias:

Primero, los alumnos del Doctor Canals, son completamente ajenos a los hechos.

Segundo, fuerzas comunistas, con la mayor impunidad, campean a su antojo. Son un grupo que, usando técnicas de agitación radicalmente marxistas, se trasladan de una Facultad a otra en un intento de demostrar que la Universidad está en sus manos, lo que, por desgracia, va siendo cada vez más cierto.

Tercero, el odio de los marxistas hacia el Doctor Canals está motivado única y exclusivamente por su constante actitud católica y tradicionalista, y por la ortodoxia de su doctrina religiosa y política.

Éstos son los hechos que hemos querido relatar. Nuestra misión de informadores acabaría aquí porque la claridad de lo sucedido es suficiente para que el lector pueda comprender el sentido de la lucha que se está desarrollando en la Universidad de Barcelona.

Fuente: El Pensamiento Navarro, 28 de Marzo de 1971, página 3.


El por qué de la subversión


No es humano ni patriótico hacer lo que el avestruz: creer que no existe el peligro, sumergiendo la cabeza en la arena.

Humanitario y patriótico es revelar la existencia del mal; porque quien quiere ignorarlo o se opone a su revelación es por no querer o no saber curarlo, bien sea por voluntad o por sentirse incapaz de ello.

Por lo tanto, humanitario y patriótico es decir a los cuatro vientos que el Marxismo ha penetrado profundamente y extensamente, sobre todo, en las clases intelectuales; en los universitarios, sean profesores o estudiantes. Y entre ellos, resultan los más peligrosos cuantos carecen de conciencia de ser marxista, pero por su mentalidad, sus ideas y su propaganda profesan un Marxismo más o menos elemental, con toda naturalidad, cual si fuera una idea brotada directamente del sentido común; al parecer, el menos común de los sentidos. Plagian a Marx, ignorándolo, y creyéndose a sí mismos originales; así es porque han recibido multitud de ideas marxistas sin el marchamo de tales.

Y un problema se presenta: ¿Cómo y por qué ha podido el Marxismo llegar hoy ha invadir, consciente o inconscientemente, tantos cerebros universitarios y, aún peor, tantos clericales?

Yo hallo la respuesta en el sabio Werner Sombart:

“Yo no puedo compartir el parecer de los que estiman que, cuando se combate a un movimiento de política práctica, resulta superfluo el oponerle afirmaciones fundadas en razonamientos, visto que, donde hay conflicto de intereses, la voluntad ocupa el lugar de la razón –stat pro ratione voluntas. Sin duda alguna, en la vida política, los elementos irracionales son de inmensa importancia; no obstante, los elementos racionales no dejan de tener peso en ella. Éstos sirven ciertamente para fortificar las convicciones políticas, cuya potencia combativa es frecuentemente aminorada cuando ella está privada del sostén de los razonamientos.

“Inversamente, no se puede considerar a un movimiento político como vencido, en tanto no haya sido él destruido en todas sus ramificaciones, incluso en sus elementos científico-racionales. Una noción que se cree justa, y en la cual se sueña, puede ser la chispa que hará revivir el fuego que se creyó extinguido. Por lo tanto, es necesario aplastar todas las brasas que ha dejado un gran incendio. Para hablar sin metáforas: es necesario no abandonar la lucha antes de haber opuesto consideraciones racionales a una opinión adversa, sobre los mismos puntos en los cuales ella misma basa sus argumentos. Tal es el caso muy particularmente con respecto al movimiento marxista, que hace alarde siempre de su carácter científico, y que constituye un peligro en tanto él no haya sido igualmente vencido en el terreno de sus elementos racionales. Es ahí donde la ciencia puede devenir una aliada en la lucha política, y todo hombre político dotado de capacidad de juicio no rechazará nunca la ayuda que le puede aportar la ciencia”.

Retengo: “No se puede considerar a un movimiento político como vencido, en tanto que él no haya sido destruido, incluso en sus elementos científico-racionales”.

Yo creo que Sombart, que escribía en 1934, nos revela en esas palabras la primera causa del fenómeno desgraciado que presenciamos en nuestra Patria: Creímos que el Marxismo, vencido en los campos de batalla, estaba total y para siempre vencido en España.

En los treinta años que median entre el hoy y la consumación de su derrota material –ahí están los catálogos bibliográficos y las colecciones de prensa y no digamos los archivos de radio y televisión de los tres decenios– poquísimo, nada prácticamente, se ha hecho en España para destruir al Marxismo en sus elementos científico-racionales. Quiero decir, fiel al contexto de Sombart, en sus elementos pseudocientífico-racionales, o sea sofísticos; porque si auténticamente científicos y racionales fuesen, serían indestructibles.

¡Qué tremenda responsabilidad la de nuestros gobernantes e intelectuales!... En la sesión secreta del Consejo Nacional, según el comunicado oficial, algunos hablaron de “vacío” político creado. Ninguno como ese tremendo vacío dejado por la inexistencia de crítica y refutación del Marxismo.

Nada más sobre el tema. Únicamente añado que hay una lógica, una explicación, en esa subversión permanente y creciente del Comunismo en nuestra Patria: ese vacío lo ha llenado con su “ciencia” y sus “razones” el Marxismo, para el cual no es ningún obstáculo el “triunfalismo”, el “futbolismo”, el “desarrollismo”, etc., etc., que es lo único que intelectualmente se le ha opuesto en estos tres últimos decenios.

Dios quiera que, como hace más de treinta años, no se vea España en la necesidad de vencer al Comunismo a costa de torrentes de sangre de sus mejores hijos, principalmente, por no haber sabido o querido vencerlo en la batalla intelectual.

JULIO ARANA

Fuente: El Pensamiento Navarro, 28 de Marzo de 1971, página 5.


Carta de unos alumnos en defensa del catedrático despedido

BARCELONA.– Un grupo de alumnos de la Facultad de Filosofía y Letras, dieron a la publicidad una carta relacionada con la agresión de que fue objeto anoche el profesor de la misma, doctor Canals. La carta dice:


“Como aclaración a los hechos ocurridos en la cobarde agresión perpetrada ayer en la Facultad de Filosofía y Letras en la persona del profesor de Filosofía, doctor Canals, estos alumnos suyos están en la obligación de decir:

1.– Una asamblea coincidente a esa hora con la huelga en Derecho y Económicas (conmemorativa de la “comuna” comunista de París) invadió el aula donde debía dar la clase.

2.– La mayor parte de los alumnos que asisten a esa clase, en número de unos cincuenta, que el lunes y el miércoles habían manifestado su disconformidad ante otras intromisiones que impidieron dar la clase, decidieron este día reunirse en otra aula, visto el cariz comunista de los acontecimientos.

3.– Los que estuvieron en la asamblea, que luego perpetraron la agresión –unos 60 de los cerca de 300 asambleístas– no eran de la clase, ni aun de la Facultad.

4.– La asamblea revolucionaria se ha desarrollado, en sus distintas fases (marxista, anarquista…), en hechos claramente explícitos: el miércoles se manifestaron unos 200 en Pedralbes al canto de la Internacional, puño en alto y con gritos marxistas. Todas las paredes están señaladas de hoces y martillos y de lemas comunistas, con sugerencias a la acción revolucionaria. Los comunistas agresores del doctor Canals pusieron el siguiente cartel: “Canals dice que el fin del hombre es la visión de Dios. Esto en el siglo XI era motivo de santificación. En nuestros días merece la expulsión de la Universidad”.

Es evidente que al doctor Canals sólo se le ataca por declararse católico y antimarxista, como los mismos panfletos comunistas que corren profusamente por nuestra Universidad lo afirman. El partido comunista en sus múltiples variantes, es el actual dominador de la Universidad merced a la pasividad de quienes debieran impedirlo y no lo hacen. Ésa es la trágica realidad”.


Firman la carta un grupo de alumnos. (Cifra).

Fuente: El Pensamiento Navarro, 30 de Marzo de 1971, página 4.


UNIVERSIDAD DE BARCELONA

POR DECISIÓN MINISTERIAL NO SE HA CERRADO LA UNIVERSIDAD


BARCELONA.– El Ministerio de Educación y Ciencia ha remitido a la Junta de Gobierno de la Universidad de Barcelona el siguiente comunicado:

“De orden del señor Ministro cúmpleme transmitir a V. M. E. que deberán continuar las actividades docentes en esa Universidad a pesar de los desagradables sucesos que todos lamentamos y que han llevado a vuestra Junta de Gobierno a solicitar la suspensión de las mismas”.

Dicha nota se ha producido como respuesta a otra anterior de la misma Junta de Gobierno a la superioridad, proponiendo la suspensión de actividades a partir de la fecha de hoy, lunes.

(Europa Press).

Fuente: El Pensamiento Navarro, 30 de Marzo de 1971, página 5.


CRÓNICA DE BARCELONA

Situación en la Universidad

(De nuestro corresponsal JAIME CAPDEVILA, por teléfono).


Un grupo de universitarios barceloneses ha remitido a las agencias de Prensa y diarios locales la siguiente nota ante la situación existente en dicha Universidad:


Sr. Director:

Los abajo firmantes, alumnos de la Universidad de Barcelona, deseamos informar de los siguientes hechos:

1.– El sábado 27, en reunión de Junta de Facultad de Filosofía y Letras, se acordó:

1.º Adhesión unánime al Dr. Canals y reconocimiento de su valía docente.

2.º Suspender las clases hasta que se garantizara la libertad de cátedra (coaccionada por los grupos comunistas).

3.º Elevar el acuerdo a la Junta de Gobierno de la Universidad de esta decisión de cerrar todas las Facultades.

2.– El Rectorado, al habla con Madrid, convirtió la decisión de cierre en simple petición.

3.– Una Agencia informativa dio una nota a toda la Prensa en la que se silenciaba la protesta de los profesores universitarios barceloneses, concretada en la suspensión de clases en la Universidad. En la misma nota, la Agencia aventuraba que hoy, lunes, estaría la Universidad abierta.

4.– La Universidad sigue abierta “a pesar de los desagradables sucesos que todos lamentamos”.

Los profesores han recibido la nota del Ministerio de Educación y Ciencia con perplejidad y alarma ante las posibles consecuencias de tal decisión.

Mañana, martes, está anunciada una asamblea comunista en los locales de Filosofía y Letras de Pedralbes. Con tal de mantener la Universidad abierta, el Rectorado está dispuesto, según han manifestado Autoridades Académicas de la Facultad de Filosofía y Letras, a hacer entrar a la Policía Armada para disolver la Asamblea.

Es imprevisible lo que pueda ocurrirle a todo aquél que vaya mañana a la Universidad al verse envuelto en la represión de dicha Asamblea.

En las presentes circunstancias es materialmente imposible asistir a clase.

Firmado:

Carlos Mas de Xavars, José María Artola, Gabriel Muñoz, Javier Toledano, José Mayor, Antonio Pérez-Mosso, José Luis Ganuza y José Manuel Zubicoa.

Fuente: El Pensamiento Navarro, 31 de Marzo de 1971, página 4.



CRÓNICA DE BILBAO

EL MARXISMO NO QUIERE A DIOS EN LA UNIVERSIDAD


Ha causado gran indignación la noticia publicada por “La Gaceta del Norte” el día 28-III-71, de la agresión al profesor Canals Vidal, de Barcelona.

Con ese acto cobarde, los comunistas han mostrado una vez más su verdadera cara.

Canals es un trabajador de la enseñanza. Es un modesto padre que lucha por sacar adelante a su numerosa familia. No tiene acciones de sociedades anónimas. No tiene asiento en ningún consejo de administración. Ni su conciencia ni su posición social le permiten explotar a ningún trabajador. Por ese lado no vemos nada que haya podido concitar contra él las iras de quienes se titulan defensores de los humildes.

Canals, a fuer de católico, es enemigo del totalitarismo en todas sus formas. Canals jamás vistió uniformes. Ni adoptó posturas marciales. Ni saludó con arreglo a ningún patrón. Ni ha creído en ningún mesías de circunstancias. Canals jamás fue fascista.

Canals ha dicho, y lo repetirá mientras viva, que el fin último del hombre es la visión de Dios.

Y es esto, la proclamación de esta verdad, la mayor de todas las verdades, la que ha concitado contra él las iras del marxismo, por segunda vez.

Y es que el comunismo no es más que la rebelión del hombre contra Dios. La defensa de los trabajadores, la lucha por la libertad, no son más que nubes de humo para ocultar sus verdaderos fines.

A los jóvenes comunistas no les molestan los catedráticos que presiden consejos de administración, que perciben dividendos que pueden proceder del sudor de los humildes. No les molestan los catedráticos a quienes por su presente, o por su pasado que quieren ocultar, se les puede calificar de fascistas. A ésos incluso les alaban. Les molesta el que proclama lo único que ellos no pueden admitir: que el fin último del hombre es la visión de Dios.

Porque según ellos el mejor empleo que se puede dar al hombre es hacerle producir, cuanto más mejor, y al morir convertir su cuerpo en abono para el campo.

Es una prueba de que, pese a lo que digan ciertos papanatas, el comunismo es el mismo que hace cincuenta años. Cuando nuestro Rey Don Jaime decía de él que era un robo y un crimen y que ningún gobierno que se estimase en algo debía establecer relaciones con los bolcheviques.

En las tertulias carlistas de Bilbao no se hablaba el domingo de otra cosa. Son muchos los correligionarios y aun ajenos al Carlismo que han manifestado su intención de enviar telegramas de protesta a la Universidad de Barcelona por tan vandálico acto.

IGNACIO DE ORDUÑA