En portada y en un editorial, El País ridiculizaba el plan de la ministra Carme Chacón y de Rodríguez Zapatero para regalar a los jóvenes parte del pago del alquiler de un piso. La víspera, Sogecable había sufrido en Bolsa tras perder batallas decisivas en la guerra del fútbol contra Mediapro, la nueva aliada de ZP.

La relación entre ese hecho y el castigo editorial era evidente, aunque no expresa. Luego, el periódico en Internet de elconfidencial.com, titulado El gran divorcio, daría sus explicaciones del enorme acontecimiento: "El pasado martes el consejero delegado de Prisa, Juan Luis Cebrián, dio una orden taxativa: retirar el editorial y la información escritos en El País sobre el nuevo Plan de Vivienda (...) y reemplazarlos por otros artículos especialmente críticos contra el Gobierno. La decisión fue adoptada (...) después de una jornada bursátil con cuantiosas pérdidas para Sogecable, sólo recuperadas por un falso anuncio de acuerdo sobre la guerra del fútbol". Y agregaba que el editorial "supone un hecho histórico: la ruptura con el presidente del Gobierno socialista de un grupo de comunicación de izquierdas que logró su poder, precisamente, bajo la protección y dependencia del PSOE". El Mundo puntualizaba: "Es sintomático que este grupo empresarial, preso de una concepción monopolista del mercado fraguada al calor de los gobiernos de González y Aznar, quiera resolver sus problemas a base de embestidas editoriales en busca, quizás, de antiguos privilegios". Y ayer Chacón se lamentaba amargamente en carta a El País de sus "inexactitudes".

En los medios de izquierdas se informaba con circunspección este suceso casi impensable en vida de Jesús de Polanco. Ignacio Escobar, director in péctore de El Público, el nuevo diario promovido por los socios de Mediapro, que aparecerá el próximo miércoles, dedicaba al asunto un sonoro titular en su blog, www.escobar.net ('El País' declara la guerra a Zapatero), pero, curiosamente, ni menciona lo del fútbol, donde tan directamente está implicada su nueva empresa. Por su parte, el socialista Luis Solana gemía, en clave electoral, en elplural.com: "Se trata de defender una isla de libertad frente a la amenaza de la reacción. ¿Puedo pedir al Grupo Prisa que no nos deje solos al final de una legislatura complicada y ante una legislatura llena de esperanza?". Tampoco menciona el fútbol el presidente de la Asociación de la Prensa de Madrid, Fernando González Urbaneja, en 20 Minutos, pero sí que lanza un vaticinio: "El País contra los socialistas puede ser un fenómeno curioso que perjudique a ambos en beneficio de nadie. (...) Como [Zapatero] gane contra El País, a pesar de El País, estaremos ante un caso interesante que dará que pensar".

En libertaddigital.com, Víctor Gago se muestra escéptico tras el homenaje a Polanco: "No habrá festín ni sacrificio ni rechinar de dientes, porque Roures, con su tele verde sin antenas y su periódico amarillo a 50 céntimos -en el mercado, nada cuyo precio sea la mitad puede valer el doble- no puede conseguir que Zapatero sea reelegido y, en cambio, Cebrián aún puede impedirlo con el más oxidado de sus cañones Berta. Por eso había ocho ministros, ocho, comulgando en la misa laica de este jueves en el Círculo de Bellas Artes". Epitafio de Pedro G. Cuartango en El Mundo: "Lamentándolo mucho por los magníficos profesionales que trabajan en aquella casa, yo disfruto con ese espectáculo de fuego y cenizas".

por Víctor de la Serna

Los entresijos del asunto aquí:
http://www.elpais.com/articulo/socie...pepisoc_13/Tes