Bienvenido Santus Romanix.
Te saludo desde Uruguay.
¡Mueran los salvajes, asquerosos e inmundos unitarios! ¡Vivan los federales!
Hola a todos, Me llamo Sebastian y soy de Argentina, Buenos aires. Soy un gran admirador de la historia española en si y de España en general, siento un gran amor por este país y siempre le voy a estar agradecido por darme el idioma mas hermoso del mundo y darme la religión que hoy en día llevo, de echo tengo pensando próximamente hacer un viaje a Valencia (Donde tengo familiares) y desde allí poder conocer mas sobre este glorioso país.
Espero aprender mucho aquí, saludos.
Última edición por SantusRomanix; 25/07/2011 a las 04:18
Bienvenido Santus Romanix.
Te saludo desde Uruguay.
¡Mueran los salvajes, asquerosos e inmundos unitarios! ¡Vivan los federales!
“Es ésta nuestra finalidad, nuestro gran ideal. Caminamos para la civilización católica que podrá nacer de los escombros del mundo de hoy, como de los escombros del mundo romano nació la civilización medieval. Caminamos para la conquista de este ideal, con el coraje, la perseverancia, la resolución de enfrentar y vencer todos los obstáculos, con que los Cruzados marcharon sobre Jerusalén. Porque si nuestros mayores supieron morir para reconquistar el Sepulcro de Cristo, ¿cómo no vamos a querer nosotros —hijos de la Iglesia como ellos— luchar y morir para restaurar algo que vale infinitamente más que el preciosísimo Sepulcro del Salvador, es decir, su reinado sobre las almas y sobre la sociedad, que Él creó y salvó para amarlo eternamente?”.
Plinio Corrêa de Oliveira.
Bienvenido.
"Solo Dios sabe hacer de los venenos remedio".
Francisco de Quevedo
Bienvenido.
Gracias a todos.
Bienvenido al foro compatriota Santus Romanix.
Esperamos tus aportes.
Viva el Restaurador!
Cordiales saludos.
Bienvenido Santus Romanix.
Saludos desde Chile. Qué grato contar con otro hispanoamericano que no comulga con ruedas de carreta. Y más grato aún por tratarse de un americano austral.
LAUS DEO VIRGINIQUE MATRI
Bienvenido amigo argentino. Una bonita tierra hispánica la tuya, bajo la tiranía de un estado-nación liberal.
Aquí corresponde hablar de aquella horrible y nunca bastante execrada y detestable libertad de la prensa, [...] la cual tienen algunos el atrevimiento de pedir y promover con gran clamoreo. Nos horrorizamos, Venerables Hermanos, al considerar cuánta extravagancia de doctrinas, o mejor, cuán estupenda monstruosidad de errores se difunden y siembran en todas partes por medio de innumerable muchedumbre de libros, opúsculos y escritos pequeños en verdad por razón del tamaño, pero grandes por su enormísima maldad, de los cuales vemos no sin muchas lágrimas que sale la maldición y que inunda toda la faz de la tierra.
Encíclica Mirari Vos, Gregorio XVI
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