Respuesta: Buenas...

Iniciado por
Artaza
Un Artaza, de las tierras vascas, concreta mente de Vizcaya.
Desciendo por parte de padre de una familia Navarro-Alavesa y por pate de madre Vizcaíno-Gallega, un coctel. En mi cabeza joven tengo muchas ideas (
el pueblo vasco libre), que en un futuro puede que cambien.
Me gusta la historia de España, pero en este foro me inscribí para aprender más sobre mi cultura, la vasca, ya visto que está muy curtido en este tema, a mí ver. También para ver mas puntos de vista, que los necesito.
Entiendo a toda persona que entienda mi forma de pensar, no vengo a discutir, vengo a aprender la historia de mi pueblo.
Muchos saludos

Pues bienvenido paisano, ahora que no estaría de más que te expliques un poco acerca de lo que entiendes como libre, y no te lo comento por incordiar, sino porque los vocablos libertad, libre, y otros similares, están "más usados que la pipa de un indio" y, realmente, nunca demasiado definidos y aclarados.
Así que ya sabes, ongi etorri.
"He ahí la tragedia. Europa hechura de Cristo, está desenfocada con relación a Cristo. Su problema es específicamente teológico, por más que queramos disimularlo. La llamada interna y milenaria del alma europea choca con una realidad artificial anticristiana. El europeo se siente a disgusto, se siente angustiado. Adivina y presiente en esa angustia el problema del ser o no ser.
<<He ahí la tragedia. España hechura de Cristo, está desenfocada con relación a Cristo. Su problema es específicamente teológico, por más que queramos disimularlo. La llamada interna y milenaria del alma española choca con una realidad artificial anticristiana. El español se siente a disgusto, se siente angustiado. Adivina y presiente en esa angustia el problema del ser o no ser.>>
Hemos superado el racionalismo, frío y estéril, por el tormentoso irracionalismo y han caído por tierra los tres grandes dogmas de un insobornable europeísmo: las eternas verdades del cristianismo, los valores morales del humanismo y la potencialidad histórica de la cultura europea, es decir, de la cultura, pues hoy por hoy no existe más cultura que la nuestra.
Ante tamaña destrucción quedan libres las fuerzas irracionales del instinto y del bruto deseo. El terreno está preparado para que germinen los misticismos comunitarios, los colectivismos de cualquier signo, irrefrenable tentación para el desilusionado europeo."
En la hora crepuscular de Europa José Mª Alejandro, S.J. Colec. "Historia y Filosofía de la Ciencia". ESPASA CALPE, Madrid 1958, pág., 47
Nada sin Dios
Marcadores