Aquí os expongo esto desde la web temática de su ayuntamiento; pero no dejo pues de decir lo que es Historia; Palma del Río, tierras que en el siglo XIX los liberales que han destrozado España robaron al histórico Reino de Sevilla.




Localización y Descripción

Palma del Río es una ciudad andaluza situada al Oeste de la provincia de Córdoba, en la Vega del Guadalquivir, y en el límite con la de Sevilla. Se encuentra a 53 kilómetros de la capital y tiene una altitud de 54 metros sobre el nivel del mar. La carretera principal es la N-431, que comunica las dos capitales, dejando a nuestra ciudad casi en el centro de ambas.


Palma es un balcón sobre Sevilla, y eso se percibe tanto en el acento de sus habitantes como en los rasgos de su arquitectura, tan proclive al ladrillo, la azulejería y el color ocre. Esta capital agraria de la feraz Vega y cuna de toreros, que se embriaga con el azahar de sus naranjales, tiene el privilegio geográfico de asistir al abrazo que se dan, muy cerca de ella, el Genil y el Guadalquivir, los dos grandes ríos andaluces.


Historia
Tras la conquista romana, el auge económico que experimentó el Valle del Guadalquivir, sobre todo a partir del siglo I D.C., fue espectacular. En las riberas del Guadalquivir y del Genil han aparecido restos de numerosos alfares, embarcaderos, grandes explotaciones agrícolas, restos cerámicos, etc.

Tras la caída del reino visigodo, en el año 711, se produce la invasión musulmana. La zona de Palma del Río quedó encuadrada dentro de la Cora de Córdoba. En sus tierras, se asentó una tribu procedente de Túnez, los Al-Sadif, lugar de donde este pueblo cogió el nombre.

En el año 855, aparece por primera vez documentada la existencia de Palma como núcleo urbano de muy reducidas dimensiones; recibe el nombre de Balma. Paulatinamente este núcleo de población fue desarrollándose.

En el siglo XI sería construida la Alcazaba o castillo, de cuya existencia quedan los restos de los torreones que la componían. En el siglo XII se construyó la Muralla, para defender al pueblo de las cada vez más frecuentes incursiones cristianas.

En 1241, las tropas cristianas al mando de Don Alfonso, Infante de Molina, por orden de su hermano Fernando III, conquistaron Palma; no obstante, un número alto de sus antiguos habitantes continuó viviendo aquí.

Desde el tiempo de la conquista, perteneció Palma a la Orden del Templo, la cual habiendo sido extinguida en 1312, se incorpora a la corona. En 1342 el pueblo pasa a ser señorío de los Bocanegra , familia procedente de Génova, merced hecha por el rey Alfonso XI a Micer Egidio Bocanegra, Almirante de Castilla, en reconocimiento por los servicios militares prestados.

A mediados del siglo XIV se establece en Palma del Río una aljama mudéjar, con moros procedentes de la localidad castellana de Gumiel, que gozará de una Carta de Privilegio y que a mediados y finales del siglo XV acabará siendo la más numerosa de las comunidades de Andalucía, al contar con unas 120 familias, frente a las 40 ó 45 de Córdoba y Sevilla, y la menor de La Algaba.

En 1473 se produce una emigración de conversos judíos cordobeses a Palma del Río, tras los asaltos producidos en Córdoba. Palma contaba a principios y mediados del siglo XV con una importante población de judíos y conversos hasta su expulsión en 1492.

En 1483 fue atacada por los musulmanes, siendo estos vencidos por los habitantes de Palma , mandados por Don Luis Portocarrero, Señor de Palma. Los musulmanes, para franquear la entrada de la ciudad, prendieron fuego a una puerta, que desde entonces se denominó del Arquito Quemado.

En 1507 el Señorío pasa a ser Condado, siendo el primer Conde de Palma Luis Portocarrero. Por estas fechas se abandonó el castillo como residencia habitual y se construyó, dentro del recinto amurallado, el Palacio de los Condes.

En 1675 Palma del Río tenía 2.500 vecinos. Un siglo más tarde, en 1774, no llegaba apenas a los 1.000 vecinos. En 1840 el pueblo contaba con 625 casas, 41 calles, una plaza mayor y 4 plazuelas, y unos 5.000 habitantes, muchos de los cuales habitaban en el diseminado.

Con fecha 31 de Enero de 1888, la reina regente María Cristina de Habsburgo-Lorena, concede el título de Ciudad a Palma del Río.


Gastronomía
Debido a su situación geográfica, entre medios tan distintos entre sí, la gastronomía en nuestra ciudad se presenta en las formas más variadas. Las plantaciones de espárragos, alcachofas, zanahorias, lechugas y verduras de todo tipo; los frutales abanderados por la naranja como distintivo de calidad, y la extensa campiña con la perdiz, la paloma y el conejo, hacen que Palma del Río cuente con un abanico inmenso de posibilidades en el capítulo gastronómico. Son platos típicos el gazpacho de habas secas, el lomo relleno, el revuelto de espárragos trigueros y de postre, los merengues y los mil platos que pueden ser elaborados con la naranja como protagonista.


Artesanía
Encontramos en Palma del Río toda una serie de labores que se han ido desarrollando a la largo de los años y que hoy caracterizan a este pueblo de antiguas tradiciones. Tradicionalmente ha sido un pueblo de barros donde la alfarería jugó un importante papel en la economía local. Actualmente, la cerámica es un exponente esencial, ya que emplea un barro de excepcionales características específicamente palmeño, que los artesanos transforman en lebrillos, cántaros, tejas, etc. Los cambios de usos y el desarrollo industrial del plástico y otros materiales hicieron que las cantarerías locales fueran sucumbiendo a las directrices del desarrollo. La forja y la carpintería artística son un ejemplo más, que junto a la imaginería y los bordados de oro y plata identifican la tradición y el buen hacer artesanal palmeño. En los últimos tiempos, gracias al empuje de los jóvenes artesanos, guiados por los maestros de antes, comienzan a renacer tradiciones perdidas, pudiendo encontrarse excelentes forjadores que con su arte convierten el duro hierro en filigrana; maestros de la carpintería artística y la ebanistería; escultores imagineros; bordadores de oro y plata, etc.


Agenda de Eventos y Fiestas


Candelaria (2 de Febrero)

Es una fiesta que mantiene la tradición de encender hogueras nocturnas en barrios como Rafael Alberti y La Soledad, en torno a las cuales juegan y saltan los jóvenes.





Carnaval (variable)

Los días de Carnaval, el pueblo entero sale a la calle, y proliferan las máscaras en Palma, sobre todo en el céntrico eje de las calles Feria, Portada, Plaza de la Constitución y Plaza de España.



Semana Santa (variable)

Ocho procesiones desfilan en la Semana Santa de Palma del Río, a medio camino entre las de Sevilla y Córdoba. Las procesiones se abren el Domingo de Ramos con la Hermandad de la Entrada Triunfal de Jesús en Jerusalén. El lunes hace el via crucis la Hermandad del Cristo de las Aguas.

El martes desfilan Jesús Orando en el Huerto, Jesús Cautivo y la Virgen de Palma y Esperanza, cuyos momentos más vistosos son , sin duda, la entrada y salida de su templo, San Francisco. El miércoles salen la Virgen de la Concepción y el Cristo de la Salud.

El Jueves Santo desfilan el Cristo de la Expiración y la Virgen de los Dolores, cuyas salida y entrada son muy emotivas, especialmente el paso de la Virgen, que los costaleros han de sacar arrodillados.

La Hermandad más antigua de las que procesionan Palma es la de Jesús Nazareno, que data de principios del siglo XVII, y cuya imagen popular despierta gran devoción. Acompañada de la Virgen de la Piedad y San Juan Evangelista sale a las cinco en punto de la mañana del viernes de la capilla del Hospital de San Sebastián, para recogerse con la salida del sol.

En la noche del viernes desfilan el Santo Sepulcro y la Virgen de los Dolores. Finalizan las procesiones con la salida a primeras horas de la mañana del domingo, de la Hermandad del Santísimo Cristo Resucitado y María Stma. de la Aurora.



Feria de Mayo (fin de semana más próximo al día 20)

Esta es la primera gran feria palmeña del año, coincidente en su origen con las vísperas de la recolección. Las casetas con sus atracciones musicales y bailes populares, constituyen el principal motivo de animación.



Feria de Agosto (fin de semana más próximo al día 24)

La Feria de Agosto tiene sus raíces en el siglo XV, y más concretamente en 1451, en que Juan II concedió a Martín Fernández Portocarrero una feria libre y perpetua que durase quince días desde la Asunción de la Virgen, privilegio que sería ratificado más tarde por los Reyes Católicos.



Romería de la Virgen de Belén (primer domingo de Septiembre)
La víspera de la romería tiene lugar en el santuario de la patrona el pregón anunciador, que congrega a numerosos devotos. Tras el pregón se celebra una fiesta en la que suelen actuar conjuntos folklóricos.

Por la tarde, la imagen de la Virgen de Belén es trasladada a la Parroquia de la Asunción, acompañándola parejas a caballo ataviados con trajes regionales y carrozas adornadas.



Velá de la Virgen (segundo fin de semana de Septiembre)
En torno a la festividad de la Virgen tiene lugar una "velá", que tiene por eje festivo las avenidas de Córdoba y de la Diputación y la Plaza de Andalucía.

La patrona es sacada en procesión, que finaliza con el tradicional toro de fuego y el espectáculo de fuegos artificiales.



Feria del Teatro en el Sur (primera quincena de Julio)
La Feria del Teatro en el Sur se configura como un mercado de las artes escénicas único en Andalucía. Este evento convoca a un público cada vez más numeroso, que se acerca a vivir durantes esos días el ambiente festivo que ocasiona la presencia de la gente del teatro en la ciudad, en nuestras calles y plazas, y los diferentes recintos en los que se realizan los estrenos de las compañías más importantes de Andalucía.



Semana Cultural Flamenca (última semana de febrero o primera de marzo)
Protagonizada por los más representativos cantaores y guitarristas flamencos de la actualidad, esta Semana Cultural Flamenca rinde homenaje cada año a lo mejor del panorama flamenco, y se configura como referente de gran importancia para los amantes de esta cultura.