El judio Zamenhof puede haber sido masón, pero eso no quita que uno pueda aprender esperanto (así como uso tranquilamente el computador que debe parte de su existencia a un homosexual y a otros de no muy loable moral).

Personalmente estoy contento de haber aprendido Esperanto, cosa que me tomó una semana (que yo sepa, es el idioma más fácil de aprender). Y debo recalcar que este aprendizaje no me ha hecho mirar con mejores ojos ni a la Revolución Francesa, ni a ninguno de los paladines de la destrucción de la Civilización Cristiana.

Ciertamente el esperanto carece de todos los matices que pueda tener una lengua como el Español, pero a efectos prácticos me ha permitido comunicarme con personas de China, y de otros lugares "exóticos".

Creo que el esperanto es una herramienta que se podría usar para difundir la Buena Doctrina, (los esperantistas siempre están buscando material para practicar, creo que aprovechar esa coyuntura es de mucha habilidad).

Además, a diferencia de las lenguas vivas, los significados de las palabras tardan mucho en cambiar debido al uso y a las localidades en dónde se encuentre, lo que también lo veo como una ventaja (considérese que una de las razones del uso del Latín en algunos Documentos oficiales de la Iglesia es esa inmovilidad del Latín).

En relación con la Iglesia y el esperanto, desde 1903 existe la revista "Espero Katolika", y en 1910 se fundó la Unión Internacional Esperantista Católica que el Papa San Pío X —quien no sospechoso de modernismo— bendijo: "El Esperanto tiene un gran porvenir" señaló (aunque en esto no aplica la infabilidad papal .

El esperanto era una de las lenguas habladas por San Maximiliano Maria Kolbe, el Beato Tito Brandsma y el papa Juan Pablo II.

Radio Vaticana tiene también una edición en Esperanto (que es escuchada, incluso, por esperantistas ateos para afinar el oído )

Existe también una Misa en Esperanto, aunque esto último no es para mí ningún motivo de alegría —como tampoco lo es que sea en cualquiera de las lenguas vernáculas.

Creo que el aprendizaje de lenguas no es excluyente, mas bien, al contrario. Aprender una, facilita luego el aprendizaje de otras. Un estudio mostraba que seminaristas que previamente sabían esperanto aprendían mucho más fácilmente latín que aquellos que partían directamente desde su lengua materna (que según recuerdo, era el francés).

Un buen consejo sería: «aprendan, interlingua, esperanto, latín, chino mandarín, inglés, jerigonza, pig latin y lo que se les venga en gana, pero en ningún caso pacten con el Liberalismo, el Modernismo o la Revolución».