Isabel Atayupanqui, la última descendiente del inca Pachacútec
https://www.youtube.com/watch?v=Sj1IIJ-CLTk
https://www.youtube.com/watch?v=Sj1IIJ-CLTk
Versión para imprimir
Isabel Atayupanqui, la última descendiente del inca Pachacútec
https://www.youtube.com/watch?v=Sj1IIJ-CLTk
https://www.youtube.com/watch?v=Sj1IIJ-CLTk
Francisco Inca
Francisco Jiménez es tal vez uno de los líderes rebeldes más desconocidos por la población peruana, pese a que fue un pionero en algunos aspectos de la política local.
A diferencia de otros rebeldes famosos, sus orígenes fueron modestos, pues era un plebeyo natural de Lahuaytambo (Huarochirí). Pese a vivir mucho tiempo en Los Reyes (Lima), donde trabajaba como albañil, retornó a Lahuaytambo a mediados del siglo XVIII, allí se casó con Maria Puipulibia, la hija de Juan Puipulibia. Aquella boda hizo que ascendiera en la pirámide social de la época puesto que su esposa era hija del Cacique Principal de Chaucarima y sobrina del Cacique Principal de Huarochirí.
Ya en el contexto de la rebelión, en 1750, Francisco Jiménez, junto a su esposa María Gregoria Puipulibia y Pedro de Los Santos toman el mando, organizando una pequeña milicia para capturar la Villa de Huarochiri. Una vez tomada la villa, capturan al corregidor Villa de Moros y lo ejecutan en la plaza, frente al pueblo.
Francisco Jiménez se autoproclamó “Inca del Perú” y decidió emprender una rebelión contra el “mal gobierno” del virrey José Manso de Velasco. Francisco Inca abolió la mita, los obrajes y liberó a los esclavos a cambio de que lucharan en sus filas. Esta política abolicionista hizo que muchos desposeídos se sumaran a sus filas.
Se propuso a restaurar el Tahuantinsuyo o Incario, tal cual. Recibió apoyo logístico del cacique Juan Cajahuaman. Sus partidarios eran naturales, afros, mestizos, peruleros (criollos) y españoles de la región que estaban descontentos con el gobierno virreinal borbónico.
El virrey envió un ejército de 400 hombres bajo el mando del marqués Melchor de Molina y del capitán Francisco de Carvajal para aplastar a los rebeldes. Francisco Inca fue capturado junto a su esposa María en el poblado de San Damián por los indígenas de Langa y por las tropas virreinales.
Francisco Inca sería llevado a la Ciudad de Los Reyes donde se le condenó a muerte. Luego de ser torturado, fue colgado y decapitado junto a sus cómplices y familiares, siendo sus restos esparcidos por el corregimiento para escarmiento de todo simpatizante de la rebelión.
Referencia:
.- La Revolución Social de Francisco Inca, Oscar Anchivilca Naupa (2021).
http://hispanismo.org/attachment.php...id=10463&stc=1
_______________________________________
Fuente
https://www.facebook.com/Federalperu...0307752871697/
Monumento pétreo similar a huanca en honor a Francisca Pizarro Yupanqui Inca y al mestizaje en el Castillo de Trujillo, Cáceres, Extremadura, España.
“Estos mestizos y mulatos son ya tantos y crecen más cada día y tan mal intencionados que conviene muy mucho que Vuestra Magestad envie cedula que ninguno dellos pueda traer armas porque como son hijo de indios en cometiendo el delito luego se visten como indios y se meten entre los parientes de su madre y no se pueden hallar”. (Lope García de Castro, 1570)
Referencia:
.- La España moderna, Enrique Martínez Ruiz (1992).
http://hispanismo.org/attachment.php...id=10464&stc=1
_______________________________________
Fuente
https://www.facebook.com/Federalperu...0377222864750/
La nobleza Inca en el Virreinato
Entrevista del programa Caritas in Veritate del canal Memes Católicos donde explicamos sobre el destino de los descendientes Incas durante el virreinato.
Miniatura hecha por @datejadaf
https://www.youtube.com/watch?v=vQVF2rzdnec
https://www.youtube.com/watch?v=vQVF2rzdnec
La Batalla de Paucarpampa
Los curacas huancas convocaron a sus soldados, el de Hatun Xauxa reunió a 863 guerreros, el de Hurin Huanca a 1345 guerreros y otros cientos el de Hanan Huanca. Y así, todos marcharon hacia el sureste, en dirección al Curacazgo de Tayacaja, pues por ahí venían Manco Inca y sus tropas. Los guerreros huancas llevaban en su delantera a esclavos africanos cedidos por Pizarro.
El encuentro de los cuzqueños con los huancas fue en las llanuras de Páucarpampa, pueblo ubicado en Tayacaja. Los huancas atacaron con tal ferocidad a los cuzqueños que tras la batalla se escribió que "no quedaron vivos más que tres", refiriéndose a la derrota de las tropas de Manco Inca.
Referencias:
.- Los Incas en la colonia: estudios sobre los siglos XVI, XVII y XVIII en los Andes, Franklin Pease G. Y. (2012).
.- Los incas frente a España: las guerras de la resistencia, 1531-1544, Juan José Vega (1992).
.- Años e hidalguía: encomenderos y sociedad colonial en Huánuco, Miguel León Gómez (2002).
.- Hanan Huanca: historia de Huanca Alta y de los pueblos del valle del Mantaro: desde sus orígenes hasta la república, Aquilino Castro Vásquez (1992). Ver menos
http://hispanismo.org/attachment.php...id=10465&stc=1
_______________________________________
Fuente
https://www.facebook.com/Federalperu...9123196323486/
Texcoco y la conquista de México
https://www.noticonquista.unam.mx/si...ahualpilli.jpg
Nezahualpilli, Códice Ixtlilxochitl
https://www.noticonquista.unam.mx/si...hualcoyotl.jpg
Nezahualcoyotl, Códice Ixtlilxochitl
https://www.noticonquista.unam.mx/si...hav041-web.jpg
Ayuda de Tetzcoco a los españoles y aliados. Lienzo de Tlaxcala
Según sus Cartas de relación, fue el último día de 1520 cuando Cortés y los suyos entraron a Texcoco (Tetzcoco). Dice el conquistador extremeño que la ciudad era “una de las mayores y más hermosas que hay en todas partes”. Fueron recibidos por su tlatoani para quedarse algunos días en el centro de esta ciudad, en el palacio que fue de Nezahualpilli.
Texcoco, situada en la orilla oriental del Lago de Texcoco, había sido una ciudad antigua e importante en la geopolítica del Valle de México. Era la cabeza de la provincia o reino de Acolhuacan y sujetaba varias ciudades y pueblos. Texcoco formó parte del llamado “Imperio Azteca”, apelativo moderno que ha tenido tanta popularidad hasta nuestros días. En realidad, no se trataba de un imperio sino una Triple Alianza de tres ciudades-estado, Tenochtitlan, Texcoco y Tacuba (Tlacopan). Tal forma de gobernar, con tres ciudades capitales, excan tlatoloyan en náhuatl que significaba “mando o gobierno de tres lugares”, era una idea ampliamente aceptada por los mesoamericanos antes de la conquista. De hecho, la Triple Alianza de Tenochtitlan, Texcoco y Tacuba no fue la única que existió. Había otras alianzas anteriores a ella como la de Azcapotzalco, Texcoco y Culhuacan. Incluso existen fuentes indígenas que mencionan que Tula (Tollan) formaba parte de otra alianza anterior con Otumba (Otompan) y Culhuacan.
Al principio, cuando se estableció dicha alianza entre Tenochtitlan, Texcoco y Tacuba, unos 90 años antes del arribo de los españoles, Texcoco parece haber sido más poderosa. Bajo el reinado de Nezahualcóyotl, Texcoco gozó de la época de esplendor, pero tras la muerte de éste en 1472 fue debilitándose mientras que los mexicas de Tenochtitlan fueron ejerciendo cada vez más poder. Quien sucedió al difunto tlatoani Nezahualcóyotl fue su hijo Nezahualpilli, pero a su fallecimiento en 1515, entre los hijos de Nezahualpilli, un sobrino de Motecuhzoma Xocóyotl, Cacamatzin fue puesto tlatoani de esta ciudad antigua. Esta entronización fue realizada por Motecuhzoma con la intención de disminuir el poder texcocano. De hecho, cuando Motecuhzoma recibió a Cortés en su primer encuentro en la Calzada de Iztapalapa el 8 de noviembre de 1519, Cacamatzin formó parte de los que acompañaban a Motecuhzoma. La impresión que tuvieron los conquistadores españoles sería que Motecuhzoma era el emperador y, como lo describe Bernal Díaz del Castillo, Cacamatzin era uno de los señores que lo rodeaban, junto con los de Iztapalapa, Tacuba y de Coyoacán.
Sobre la ciudad de Texcoco durante la conquista, especialmente para conocer los detalles de lo que pasaba en el interior de la casa real, no tenemos suficientes datos históricos. Conocemos, sin embargo, algunas fuentes históricas que pertenecen a la tradición acolhua, es decir, contamos con ciertas versiones que reflejan la visión texcocana. Tenemos el Códice Ramírez, cuyo “Fragmento 2” es una narración histórica anónima pero del partido de los príncipes texcocanos que actuaron en favor de los conquistadores. La Relación de Tezcoco de Juan Bautista de Pomar, que contiene mucha cantidad de información propiamente texcocana, es una de las relaciones geográficas que fueron redactadas en cada ciudad y provincia en la segunda mitad del siglo XVI contestando el cuestionario de la corona española. Las obras históricas de Fernando de Alva Ixtlilxóchitl, en particular, su Compendio histórico del Reino de Texcoco y la Historia de la nación chichimeca, relatan la historia de la conquista desde el ángulo de la familia real texcocana que, junto con los españoles y otros grupos indígenas, optaron por derribar el poder de Tenochtitlan.
Este último cronista, Fernando de Alva Ixtlilxóchitl fue castizo, es decir, hijo de un padre español y una madre mestiza. Su madre, Ana Cortés, era cacica de San Juan Teotihuacan. Este cacicazgo provenía, en el contexto histórico novohispano, de Francisco Verdugo Quetzalmamalitzin. La esposa de este último, que correspondía a la bisabuela de nuestro historiador, también de nombre Ana Cortés, descendía de la casa real de Texcoco. Esta Ana Cortés era hija de Hernando Ixtlilxóchitl, uno de los infantes de Nezahualpilli que estuvo a favor de Cortés y otros indígenas en contra de los mexicas durante la conquista de México.
Cuando los españoles de Cortés llegaron a Texcoco el 31 de diciembre de 1520, Cacamatzin ya no era tlatoani de esta ciudad, dado que había muerto durante la batalla que los españoles llamaron “Noche Triste”, del 30 de junio y del 1 de julio, que resultó en una gran derrota de la tropa de Cortés.
La versión texcocana de conquista nos dice lo siguiente acerca de la sucesión del trono acolhua. Veamos un poco de los detalles basándonos en la “Decimatercia relación” (que forma parte del Compendio histórico del Reino de Texcoco) de Fernando de Alva Ixtlilxóchitl.
Cuitláhuac, sucesor del tlatoani tenochca después de la muerte de Motecuhzoma, consultó a los principales texcocanos preguntando “a quién le venía el derecho de aquel reino”. Ellos consideraban que “le correspondía el derecho a Yoyontzin, el menor de los vástagos de Nezahualpilli”, pero por alguna razón que desconocemos decidieron entronizar a otro hijo legítimo llamado Coanacochtzin. Así, éste era el tlatoani acolhua que recibió a los de Cortés en su ciudad en diciembre de 1520.
Los problemas comenzaron a revelarse, cuando varios príncipes texcocanos –entre ellos, Tecocoltzin, Yoyontzin e Ixtlilxóchitl— quisieron aliarse con Cortés porque Coanacochtzin era “amigo de los mexicanos” y “de la parte del rey Quauhtémoc” y, además, “se había ido a México”. De esta manera, según nos narra esta obra, Texcoco se quedó sin gobernante. Por tanto, eligieron primero a Tecocoltzin y, al morir éste muy pronto, a Ahuaxpictzatzin. No obstante, Ahuaxpictzatzin sólo gobernó pocos días y luego los texcocanos alzaron a Ixtlilxóchitl como nuevo señor “por ser tan valeroso y uno de los hijos legítimos”, además de que “todos los naturales le tenían un gran respeto por la calidad de su persona” y que “por ser legítimo sus vasallos no había querido [elegirlo como gobernante] hasta ahora”.
Así, mientras que Coanacochtzin siguió en favor de Tenochtitlan, Ixtlilxóchitl –al ser bautizado se llamó Hernando Ixtlilxóchitl— se convirtió, según esta versión de la conquista, en el único jefe de los conquistadores que se igualaba con Hernán Cortés. En otros términos, esta fuente describe la caída de México-Tenochtitlan como hazaña de Cortés e Ixtlilxóchitl.
A partir de la Visión de los vencidos, propuesta por Miguel León-Portilla a mediados del siglo pasado, se ha impulsado de manera notable la revisión de las fuentes indígenas. Gracias a dicha propuesta y a las aportaciones de varios académicos durante más de medio siglo, los historiadores hemos captado la conquista con una vista mucho más amplia y objetiva que antes. Actualmente, no basta decir simplemente que existieron distintas miradas entre los indígenas vencidos; también hay versiones de los grupos indígenas que se consideraron vencedores a sí mismos.
Considerando tales avances de investigación, ahora surgen varios aspectos que debemos revisar y repreguntar. Aquí solamente quisiera señalar un punto en particular. Pensemos en la frase con la que estamos tan familiarizados: “la conquista de México por los españoles”. No hay duda de que los españoles conquistaron México-Tenochtitlan, pero como hemos visto con el caso de Texcoco –y por supuesto cabe decir lo mismo con Tlaxcala— que varios pueblos indígenas también fueron y se consideraron a sí mismos conquistadores y vencedores. Los españoles de aquella época genéricamente llamaron “indios” a los diversos grupos que encontraron en el Nuevo Mundo. Agrupar a los distintos grupos de gente bajo esta denominación y suponer como si hubieran sido uniformes (es difícil hablar de “traidores” sin esta suposición) no es más que seguir reproduciendo la concepción occidental de la era de descubrimiento y conquista. Desde luego, no será oportuno que sigamos viendo la historia únicamente a través de los ojos subjetivos de los europeos de esa época. Las revisiones, discusiones y debates que hemos tenido y aún tendremos a los 500 años nos darán una importante oportunidad para liberarnos de tales ideas “tradicionales”.
Para leer más
Alva Ixtlilxóchitl, Fernando de, Obras históricas. Ed. de Edmundo O’Gorman, México, Universidad Nacional Autónoma de México, 1985, 2 tomos.
Cortés, Hernán, Cartas de relación. Nota preliminar de Manuel Alcalá, México, Porrúa (“Sepan cuantos…, núm. 7”), 1960.
Chimalpain Cuauhtlehuanitzin, Domingo Francisco de San Antón Muñón, Memorial breve acerca de la fundación de la ciudad de Culhuacan. Ed. de Víctor M. Castillo Farreras, México, Universidad Nacional Autónoma de México, 1991.
Díaz del Castillo, Bernal, Historia verdadera de la conquista de Nueva España. Introducción y notas de Joaquín Ramírez Cabañas, México, Porrúa (“Sepan cuantos…, núm. 5”), 1960.
León-Portilla, Miguel, Visión de los vencidos. Relaciones indígenas de la conquista. México, Universidad Nacional Autónoma de México, 1959.
Navarrete Linares, Federico, ¿Quién conquistó México? México, Debate, 2019.
Para citar: Yukitaka Inoue Okubo, Texcoco y la conquista de México, México, Noticonquista, http://www.noticonquista.unam.mx/amoxtli/2445/2430. Visto el 25/10/2021
_______________________________________
Fuente
https://www.noticonquista.unam.mx/amoxtli/2445/2430
Indígenas prósperos en Nueva España“Prosperidad” no es lo que imaginamos en la vida de los indígenas durante la Colonia… “Prosperidad” no es lo que imaginamos en la vida de los indígenas durante la Colonia; pero sí ocurrió. Muchos de ellos vivieron...11 DE ENERO, 2018https://ruizhealytimes.com/wp-conten...M-150x150.jpeg[COLOR=var(--one)]RHT[/COLOR]
https://ruizhealytimes.com/wp-conten...-prosperos.jpg
“Prosperidad” no es lo que imaginamos en la vida de los indígenas durante la Colonia…
“Prosperidad” no es lo que imaginamos en la vida de los indígenas durante la Colonia; pero sí ocurrió. Muchos de ellos vivieron bien la Nueva España. A continuación presento algunos casos.
Al inicio de la Colonia, diversos caciques indígenas establecieron vínculos con funcionarios reales o evangelizadores para mantener su dominio sobre sus tierras. En respuesta, la Corona española creó una figura legal llamada “República de indios”, que otorgaba títulos de propiedad a las tierras originalmente pertenecientes a los indígenas, y las blindaba legalmente ante posibles invasiones territoriales. Eran tierras de calidad y extensión tal, que permitían el auto sustento de la república indígena y el comercio de mercancías con otras repúblicas y castas. Algunas fueron prósperas al grado de convertirse en prestamistas del clero y vecinos españoles.
Los pochteca, (la clase comerciante del imperio mexica) mantuvieron su actividad, casi sin cambios, durante las décadas posteriores a la conquista. Tenían contactos y rutas comerciales inaccesibles para los españoles, lo que los convirtió en los principales proveedores de la creciente demanda nacional e internacional del cacao, cera silvestre, algodón y grana cochinilla.
En la Relación Geográfica de las Indias, encomendada por Felipe II en 1570, se habla de la actividad económica que tenían los indios. El corregidor de Cuitzeo se refería a ellos como eficientes empresarios:
…vendían lana, carneros, gallinas y puercos, y recibían a mercaderes que llegaban con algodón desde Tierra Caliente, para trocarlo por pescado. Muchos eran arrieros y tenían caballos para llevar mercancías a las minas, donde de regreso se contrataban para transportar la plata. Así, no es extraño que hubiera indios ricos que hacían sus casas a la manera de las de España[1].
Dicha Relación geográfica también refiere que en Pátzcuaro había artesanos indios a los que describe como “ricos y aplicados”. Habla de las mantas de telar a la cintura, tan apreciadas, que incluso eran tomadas como sustituto de moneda. En Yucatán, las mantas rústicas eran un objeto suntuoso, muy bien pagado por funcionarios españoles. En Cholula, los indios producían grana cochinilla, la cual se exportaba tanto a Europa como a China y producía ingresos casi al nivel del oro y la plata.
¿Cómo despareció la prosperidad indígena?
La mayor parte de los descendientes de los pochteca, así como otras agrupaciones de comerciantes y artesanos indígenas, perecieron en sucesivas pestes ocurridas en el siglo XVII: viruela en 1520, varicela en 1530, tifoidea de 1545 a 1548 y fiebre hemorrágica de 1576 a 1581. De los que sobrevivieron, algunos se fueron a las repúblicas de indios (donde el contacto con los virus importados de España era menor); otros abandonaron la actividad productiva cuando ésta dejó de ser rentable. El testimonio de un comerciante español del siglo XVIII en Puebla, explica lo ocurrido con la grana cochinilla de Cholula:
He oído decir a los viejos que antiguamente se criaba mucha cochinilla de grana en las nopaleras que para este efecto tenían los indios, y que a la compra de este género entraba a esta ciudad mucho dinero, pero que por las extorsiones que hacían a los naturales los que en aquellos tiempos gobernaban, se convocaron y derribaron en una noche las nopaleras en cuyos sitios desde entonces plantaron magueyes que hoy se ven[2].
En cuanto a las repúblicas de indios, en algunas de ellas sus descendientes mestizos prefirieron migrar a otras poblaciones. Con ello, el número de indios restante no fue suficiente para cultivar las tierras y terminaron malbaratándolas en el mercado informal, pues la misma ley que las protegió de ser invadidas les ponía serias trabas (requerían permiso del virrey para venderlas). Las repúblicas de indios fueron finalmente extinguidas y sus tierras expropiadas por los gobiernos liberales de mediados del siglo XIX, al amparo de la Ley Lerdo (una de las Leyes de Reforma impulsadas por Juárez y su grupo). ¡Lo bueno es que el respeto al derecho ajeno es la paz!
Los libros de historia pintan a los colonos españoles como victimarios de los indígenas, quizá porque solo hablan de la suerte de los derrotados (mexicas, yaquis, etc.). Sin embargo, hubo indígenas prósperos en Nueva España y la Corona española hizo cuanto pudo para proteger sus derechos. Pregunta para la reflexión: ¿cuántos indígenas prósperos hay en el México de hoy?
https://ruizhealytimes.com/sin-categ...-nueva-espana/
La imagen del Alférez Real corresponde al archivo (executoria de nobleza) de Don Juan Nuñez de Vela, capellán de la Iglesia de Copacabana. Don Juan era un mestizo noble que descendía por parte de padre de un primo del virrey Blasco Núñez de Vela y por parte de madre de Don Felipe Carlos Sinchi Puma Inca y de Francisco Comar Inca.
"El alferazgo real de los incas, según la propia versión de los nobles incas, fue establecido en recompensa por la participación de sus ancestros en favor de la conquista y pacificación del Perú. En la Real Cedula del 9 de mayo de 1545, la propia Corona estimula a los nobles incas a elegir Alférez Real entre los que son de la estirpe de los incas".
(David Cahill, XXI)
Su antepasado Felipe fue embajador de los Incas que juraron fidelidad a la Corona, llegó hasta Valladolid y tuvo una audiencia con el rey Carlos I. Su antepasado Francisco Comar Inga fue un “indio capitán” que participó en la conquista del Cuzco y en su defensa ante las tropas de Manco Inca.
Referencias:
.- Trincheras y fronteras del arte popular peruano, Miguel Pinto Huaracha (2009).
.- El Inca colonial, Pablo Macera (2006). Ver
http://hispanismo.org/attachment.php...id=10479&stc=1
_______________________________________
Fuente
https://www.facebook.com/Federalperu...6037545632051/
El 25 de mayo de 1760 se casó en la Iglesia de Nuestra Señora de la Purificación de Surimana el cacique Don José Gabriel Túpac Amaru con Micaela Bastidas Puyucahua. Esta boda tuvo como padrinos a Don Andrés Noguera y Don Martín Oquendo.
Los testigos fueron los Diego Castro, Pedro Mendigure y Andrés Castro. La pareja recibió la bendición del sacerdote Antonio López de Sosa quien era el párroco de la iglesia.
Referencia:
.- La rebelión de Túpac Amaru, Charles Walker, (2015).
.- Ficha de Relación histórica de los sucesos de la rebelión de José Gabriel Túpac-Amaru, en las provincias del Perú, el año de 1780. Ver menos
http://hispanismo.org/attachment.php...id=10480&stc=1
_______________________________________
Fuente
https://www.facebook.com/Federalperu...5058665729939/
Cristóbal Paullu Inca
Don Cristóbal Túpac Paullu Inca fue un hijo de Huayna Cápac y de Añas Qolque. Fue proclamado y coronado como Sapa Inca por los españoles y reinó en los años 1537 y 1549 el Cuzco. Abrazó la fe católica y fue bautizado con el nombre de Cristóbal.
A fin de evitar más muertes entre la población india buscó la alternativa de la colaboración en la conquista y pacificación. Paullu posibilitó la caída del Tahuantinsuyo y la creación del Virreinato del Perú al apoyar política y militarmente a los europeos. Abdicó a su poder con la finalidad de conseguir beneficios para su familia y los Incas que se avasallaran ante el rey Carlos I. Por Cedula Real del 1 de Abril de 1544 se le reconoció como noble Inca y por Cedula Real del 9 de mayo de 1544 se le otorgó un blasón.
Falleció en 1549 y fue enterrado en la Iglesia de San Cristóbal. En el 2007, la historiadora española María del Carmen Martín Rubio, descubrió unos restos que podrían tratarse de Paullu, ya que estaba enterrado como los antiguos señores, junto con 3 mujeres, 2 niños, un perro y muchas ofrendas rituales.
Referencia:
.- Los últimos días de los incas, Kim MacQuarrie (2016).
http://hispanismo.org/attachment.php...id=10481&stc=1
_______________________________________
Fuente
https://www.facebook.com/Federalperu...45082895727516
Citlalpopocatzin, Zitlalpopocatzin o Zitlalpopoca
✓Significa “Señor del cometa que humea".
✓Gobernante del Altepetl Tlaxcalteca de Quiahuixtlan a la llegada de los españoles
✓Sucedió a lyactzin en el señorío de Quiahuiztlan.
✓Estuvo en la junta de guerra en la cual determinó Cortés tomar Tenochtitlán.
✓Solicitó permiso para construir bergantines en Tlaxcala.
✓Su padrino de Bautizo fue el primo de Hernán Cortés: Gonzalo de Sandoval y su nombre fue Bartolomé.
Texto e imágenes : Santa Mónica
http://hispanismo.org/attachment.php...id=10482&stc=1
http://hispanismo.org/attachment.php...id=10483&stc=1
http://hispanismo.org/attachment.php...id=10484&stc=1
http://hispanismo.org/attachment.php...id=10485&stc=1
http://hispanismo.org/attachment.php...id=10486&stc=1
_______________________________________
Fuente
https://www.facebook.com/quiahuixtla...93023277562232
Don Bartolomé Zitlalpopoca, señor de Quiahuiztlán. Óleo sobre tela. Museo Regional de Tlaxcala.
http://hispanismo.org/attachment.php...id=10487&stc=1
https://twitter.com/antihegemonist/s...855106/photo/1
Las nuevas visiones de la conquista. Los indígenas conquistadores y su papel histórico
Ciclo de charlas
Imparte: Dra. Raquel Güereca
En esta conferencia se reflexionará sobre la importancia de reconocer la pluralidad de respuestas indígenas ante la presencia hispana, así como la validez de esas otras experiencias, que nos lleva a aceptar que no todos los indígenas se pensaron a sí mismos como los vencidos. Se hará un recorrido por algunas fuentes que muestran diversas narrativas sobre la agencia indígena en las campañas de conquista, centrándonos en el Lienzo de Analco, que muestra la participación de grupos nahuas en la conquista de los zapotecos y mixes de la Sierra Norte de Oaxaca.
https://www.youtube.com/watch?v=d3OtXzooHGQ
https://www.youtube.com/watch?v=d3OtXzooHGQ
IDENTIDAD Y PATRIMONIO presenta: "La nobleza indígena novohispana".
La historia de la Nobleza Indígena novohispana, remonta sus antecedentes a tiempos de los antiguos señoríos prehispánicos establecidos principalmente en el centro, occidente y sureste de México, y que una vez superada la conquista obtuvieron el reconocimiento de la Corona manteniendo sus derechos señoriales, recibieron blasones y heráldicas que reconocían su función caciques-gobernadores y mecenas eclesiásticos con lo cual ratificaron sus privilegios dentro de la estamentaria sociedad virreinal.
https://www.youtube.com/watch?v=_K-kRgITHM4
https://www.youtube.com/watch?v=_K-kRgITHM4
Demandas de la nobleza tlaxcalteca en el siglo XVI el Plano d
La Colección a detalle Charla en línea con Marta Martín.
En esta plática se analizará el contexto de producción, las características formales y el trasfondo de un plano pintado en 1580 para acompañar una solicitud de amparo sobre tierras que don Leonardo Xicohténcatl, noble tlaxcalteca, elevó a la Corona. También dialogaremos acerca de este género de pinturas cartográficas coloniales y sus implicaciones espaciales.
https://www.youtube.com/watch?v=Vftp_hodweY
https://www.youtube.com/watch?v=Vftp_hodweY
La instauración del régimen real y la colaboración de la nobleza tarasca.
Por: Juan José Albarrán Trigueros
La institución del virreinato se instauró en la Nueva España con la llegada de don Antonio de Mendoza, el cual estuvo en el poder por un periodo de quince años, aproximadamente, el cual formalizó el control político de la provincia de Mechoacán a través de las relaciones de poder que sostuvo con varios personajes de la época, como fue el caso de don Antonio Huitziméngari descendiente directo del último Cazonci, que gracias a su linaje obtuvo el cargo de gobernador de los indígenas de la ciudad de Mechoacán y la provincia michoacana, antiguo señorío tarasco. Esta interacción que protagonizaron el virrey Mendoza y el gobernador Huitziméngari, fue un claro proceso de asimilación ya que la figura política del indígena noble se vio trastocada, pues para mantener sus privilegios tuvieron que servir y adecuarse a las normas españolas.
Esta interacción se gestó en la corte virreinal durante la adolescencia de Huitziméngari, ya que dicho personaje fue enviado junto con su hermano a la ciudad de México en 1535, periodo en el que residieron en la corte sirviendo como pajes, es ahí donde probablemente se inició esa relación y acercamiento entre ambos individuos. Asimismo, se puede observar esa interacción en el juicio de residencia que el visitador Tello de Sandoval hiciera a don Antonio de Mendoza, donde se encuentra una acusación contra él por haber favorecido a Huitziméngari al darle permiso de portar espada y montar caballo (Miranda, 1990; García, 2004).
Para el año de 1545, don Antonio Huitziméngari sucedió a su hermano mayor, Francisco Taríacuri, en el gobierno indígena de la provincia de Mechoacán, siendo gobernador durante diecisiete años sin interrupción, hasta su muerte en 1562. El prolongado mandato de don Antonio dio cierta estabilidad y fuerza a la organización política india de la provincia michoacana. La larga duración del gobierno de Huitziméngari es notable, pues durante ese periodo, en la Nueva España se estaba imponiendo la “gobernadóryotl”, término semináhuatl que designaba el nombramiento que daba la Corona cada año a un indio para asumir el cargo de gobernador en cada pueblo, que no necesariamente tenía que coincidir con el tlatoani, Yrecha o señor (Martínez, 2005). Sólo en algunos casos los gobernadores fueron a la vez nobles caciques, es decir, descendientes de antiguos señores, lo que indica una fusión entre el oficio de gobernador y el antiguo estatus de gran señor. En otros casos, de acuerdo a ley española, el gobernador indígena debía ser elegido cada año, sin importar su linaje, esto para evitar corrupción.
Don Antonio de Mendoza buscó la forma de favorecer al gobernador Huitziméngari ante cualquier eventualidad, como se observa en el segmento de un documento fechado en octubre de 1550:
Yo, Antonio de Mendoza, hago saber a vos quien es o fuere alcalde mayor de la ciudad de Mechuacan, que don Antonio Huitziméngari, gobernador de esa provincia me ha hecho relación que algunos principales del barrio de Tzintzuntzan no le acuden con el servicio y tributos que está tasado como gobernador (Martínez, 1998: 89).
Para el virrey fue importante respaldar a Huitziméngari y tratar de hacerlo un hombre fuerte en el territorio michoacano, todo esto con la intención de tener un mejor control sobre la provincia de Mechoacán, pues en algunos casos don Antonio Huitziméngari sirvió al virrey como ente regulador y mediador de problemas suscitados en comunidades indígenas; un ejemplo de esta situación lo encontramos en un segmento de una ordenanza inscrita el 4 de octubre de 1550:
Yo, don Antonio de Mendoza hago saber a vos el que es o fuere alcalde mayor de la ciudad de Mechuacan que don Antonio Huitziméngari, gobernador de esa provincia, me ha hecho relación que el agua que solía venir de Pátzcuaro del ermita de San Gregorio, no viene agua como solía por esta causa y por la necesidad que de ella tienen, del barrio de Zinzonza, etc. (Martínez, 1998: 89).
Para 1550, el virrey don Antonio de Mendoza dirigió al gobernador Huitziméngari mandamientos, especialmente referidos a la movilización de trabajadores indígenas para la construcción de caminos que apoyaran la orientación de la economía novohispana hacia el norte, es decir, a las minas de Zacatecas. De igual forma le mandó que edificara un camino de Zitácuaro a Acámbaro, pues en esa zona se había establecido un ingenio de azúcar (Martínez, 1998: 66).
En conclusión, la relación que mantuvieron ambos personajes consistió básicamente en dos puntos: el primero radicó en que don Antonio Huitziméngari trató de servir de la mejor manera a la corona española a través del acatamiento de ordenanzas despachadas por el virrey Mendoza, para mantener de alguna forma sus privilegios emanados de su linaje; en segundo lugar, se debe voltear a ver el proyecto comercial que el virrey tuvo en mente para la Nueva España: si esta idea se traslada a la provincia de Mechoacán, encontraremos que el virrey Mendoza necesitó de Huitziméngari para ordenar a los naturales de dicha región y así contar con la mano de obra necesaria que diera inicio a cualquier proyecto dentro de la provincia michoacana.
REFERENCIAS
García Icazbalceta, Joaquín, Documentos para la Historia de México, Tomo II, México, Porrúa, 2004.
Martínez Baracs, Rodrigo, Convivencia y Utopía, El gobierno indio y español de la ciudad de Mechuacan 1521-1580, México, Fondo de Cultura Económica, 2005.
Martínez Baracs, Rodrigo, Michoacán en el último libro de gobierno novohispano de don Antonio de Mendoza 1550, México, Colección Ahuehuete, 1998.
Miranda Godínez, Francisco, Don Vasco de Quiroga y su Colegio de San Nicolás, Michoacán, Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo, 1990.
http://hispanismo.org/attachment.php...id=10489&stc=1
http://hispanismo.org/attachment.php...id=10490&stc=1
_______________________________________
Fuente
https://www.facebook.com/mechoacanta...00549761816015
Caída de Tenochtitlan: cuál fue el rencor de los otomíes con los mexicas que los hizo aliarse con Hernán Cortés
La superioridad de la cultura mexica sobre las demás condenó la caída del imperio en el año 1521
11 de Junio de 2021
https://www.infobae.com/new-resizer/...FXV4.jpeg 420w
El dominio mexica sobre los otomíes provocó su alianza con los españoles (Foto: Twitter@Cuauhtemoc_1521)
La caída del imperio construido por los mexicas en la ciudad de Tenochtitlan es un suceso asociado, frecuentemente, a traiciones de pueblos vecinos. Sin embargo, tomarlo desde dicha perspectiva es negar la relación de poder de esa cultura sobre el resto de las que coexistieron en el terreno que, posteriormente, se convirtió en México. De hecho, el disgusto de otros asentamientos por el sometimiento mexica desembocó en alianzas que culminaron en la caída de 1521. Tal es el caso de los otomíes.
Antes y después de la llegada de los tenochcas a la Cuenca de México, el territorio mesoamericano estuvo caracterizado por la presencia multilingüe y pluriétnica de numerosos pueblos. De hecho, el grupo dominante antes de la consolidación de la Triple Alianza era el Tepaneca, que se asentó en el lugar a mediados del siglo XII.
En sus dominios, de acuerdo con Alonso Guerrero Galván, etnohistoriador de la dirección de Lingüística del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), hubo pobladores que hablaban lenguas otomianas como mazahua, matlazinca y el propio otomí. En ese sentido, el señorío otomí ubicado en el actual municipio de Jilotepec, Estado de México, guardó un profundo sentimiento de pertenencia con el grupo hegemónico de la época.
https://www.infobae.com/new-resizer/...ANLA.jpeg 420w
Los otomíes participaron en el sitio de Tenochtitlan en 1521 (Foto: Twitter@Cuauhtemoc_1521)
Con el paso del tiempo, los recién llegados comenzaron a crecer y desafiar a los pueblos contiguos. De esa forma, en el año 1428, una ofensiva comandada por el Huey Tlatoani Itzcóatl superó a los tepanecas de Azcapotzalco y se hicieron del territorio que, hasta entonces, habían consolidado como propio.
Con la finalidad de borrar su pasado errante y reescribir una historia donde tuvieran el papel protagónico, los tenochcas quemaron todos los documentos y archivos en los que otomíes respaldaron su identidad. Así, sobrepusieron la cultura nahua, descendiente de Teotihuacan y Tula, por encima de todas las demás que se adaptaron posteriormente.
De esa forma, el comienzo de su expansión también implicó la reestructuración de las relaciones de poder y dominio con el resto de los grupos culturales. Una parte de los pueblos reconoció a los nuevos dominadores. Otros tantos, como el señorío de Jilotepec, consideraron la acción como una afrenta y se negaron a la subordinación.
https://www.infobae.com/new-resizer/...JXWQ.jpeg 420w
Los aztecas dominaron a los rebeldes durante años hasta su caída (Foto: Twitter@Cuauhtemoc_1521)
El desencuentro provocó que los integrantes del nuevo hegemón emitieran prejuicios en torno a los rebeldes que prevalecieron durante siglos. “Incluso, los informantes de Sahagún, ya en el siglo XVI, siguen hablando mal de ellos, diciendo que son flojos y no se dejan gobernar”, afirmó el etnohistoriador Guerrero Galván.
Por ello, Motecuhzoma Ilhuicamina emprendió una campaña para conquistarlos. Aunque pudo consolidarla, el pueblo se sublevó en diversas ocasiones. Así, bajo el mando de Axayácatl y Ahuízotl, los pobladores de Jilotepec volvieron a ser sometidos por medio del belicismo. Las diferencias se mantuvieron hasta la caída de los dos asentamientos.
Con la llegada del ejército de Cortés a la Cuenca, el señorío de Jilotepec planeó no establecer contacto alguno con los europeos. De esa forma, cuando el ejército ibérico llegó a Jilotepec en 1521, se encontró con una ciudad abandonada. Pero su perspectiva cambió radicalmente cuando se enteraron del sitio a la ciudad de Tenochtitlan y decidieron aliarse con los conquistadores para liberarse del yugo tenochca.
https://www.infobae.com/new-resizer/...ZKEE.jpeg 420w
El disgusto por el dominio de los mexicas sobre otros pueblos desembocó en la caída de Tenochtitlan (Foto: Twitter@Cuauhtemoc_1521)
“Sin importar que Cortés, quizá por consejo de sus traductores nahuas, ordenó el asesinato de una primera comitiva de otomíes, el grupo refrendó su alianza con los españoles y participó activamente en el asedio de Tenochtitlan. El propio Hernán Cortés menciona que fueron colocados en las orillas de la laguna para interceptar a las canoas mexicas que intentaban huir del sitio”, aseguró Guerrero Galván.
Aunque su alianza con los españoles no es tan reconocida como la encaminada por los tlaxcaltecas, sí estuvo determinada por la hostil relación con los nahuas. De esa forma, alejadas del discurso nacionalista en torno a dichos sucesos históricos, las condiciones históricas en Mesoamérica, creadas por el sometimiento de una cultura sobre las demás, fueron determinantes para concretar la avanzada de los conquistadores españoles por el territorio.
_______________________________________
Fuente
https://www.infobae.com/america/mexi...hernan-cortes/
Una pequeña historia mixe de la Conquista
https://www.noticonquista.unam.mx/si...cuauhtemoc.jpg
Cuauhtemoc. Códice Florentino, Libro VIII, foja 4r
https://www.noticonquista.unam.mx/si...dice_duran.jpg
Templo Mayor de Tenochtitlan. Fray Diego Durán, Historia de las Indias…, cap. XLIII.
https://www.noticonquista.unam.mx/si...ianza_f34r.jpg
Códice Osuna,f 34r, detalle. Los pueblos de la Triple Alianza
En 1952, el Dr. Alejandro Sánchez Castro publicó una historia antigua narrada por algunos sacerdotes mixes, recopilada por el señor Juan Nepomuceno Cruz de la comunidad de Cacalotepec, en el actual Estado de Oaxaca. En su introducción, el editor señaló: “Los españoles nunca pudieron dominar a los mixes por medio de las armas; así es que esa tribu ha vivido libre de la servidumbre; este antecedente ha hecho nacer en ellos un legítimo sentimiento de dignidad y de orgullo”. El relato, que transcribo más adelante, incluye una visión mixe contemporánea sobre la guerra de los españoles en contra de los mexicas. Mientras algunas décadas antes del conflicto, según el testimonio, ellos aún declararon la guerra a la Triple Alianza, en 1521 decidieron ir a apoyar a los mexicas sitiados por los españoles y sus aliados.
En la historia, que narra las migraciones originales de los mixes, aparecen por primera vez “los hombres de Aztlán” en el año 1322, cuando los recién llegados mixes instruyen a los locales en el uso de las armas y ayudan a liberar a los tributarios de “Aztlán”. Mucho tiempo después, en 1479, el “Rey Ahuitzotli” y los suyos traspasan nuevamente el territorio mixe con oro y plata que viene de “Coatzocoalcomun”. Esta vez, los mixes forman una alianza con los de “Zapotécam” para luchar contra los mexicas y Ahuitzotli, descrito como un hombre que sometía la gente a sacrificios “y se alimentaba de sus prisioneros”. Después de dos años, los “Zapotécam” abandonan la guerra, pero los mixes continúan la lucha durante varios años con otros aliados, como los “Tarascomi” y los “Chontic” o “Chontiques”. Para el año 1502 muere el “rey” mixe Condoyac Majsk, pero su hijo Yovegami busca, al igual que sus antecesores, una unificación de fuerzas, esta vez contra “Zapotécam-Mixistéquim”, aliados anteriormente de los mixes. Mientras, Moctecuzoma busca la amistad de los mixes, un asunto que es tratado durante dos años en el Consejo mixe, para finalmente ser rechazado, con la memoria en mente de la traición de los de Zapotécam.
De manera (ya no) sorprendente, durante los años de 1520 a 1521 cambia nuevamente la situación entre los grupos. Transcribo la visión mixe sobre la guerra de los españoles en contra de los mexicas y su propia participación:
Pacayam Pax salió con rumbo a Aztlán con 230 hombres para auxiliar al rey de Aztlán, que estaba sitiado en su ciudad. A pesar de que habían tenido luchas con los de Aztlán, decían que éstos tenían razón en defender sus tierras y sus riquezas, así como ellos defendían también sus tierras conquistadas; que los blancos se adueñaban de las mujeres y de los niños y de las riquezas y quemaban y mataban a los prisioneros. Yovegami se trasladó a la región de los tarascomi para tratar con el rey Azacapu Zaharan la ayuda que debían dar a los de Aztlán y expulsar a los blancos. El rey Azacapu rechazó y se disgustó y trató de romper la alianza y la amistad que tenía con nosotros, pues el rey tarascomi decía que su Dios Cuverimi había anunciado el fin de la tierra de Aztlán. Cuando nuestro Rey regresó a Tlaxcalcin dió a conocer las gestiones, pero ya nuestros jefes del Norte con los Chontic caminaban hacía Aztlán; llegaron a Ahuet, donde recibieron la noticia de que el rey de Aztlán había caído prisionero y llevado al fuego; esto lo comunicaron algunos guerreros que habían sido testigos presenciales. Nuestro pueblo rindió tributo y homenaje al rey de Aztlán por ser valiente y por no haber entregado las riquezas y los templos de la tierra de Aztlán y de los demás pueblos. El Consejo reunió al pueblo y se hicieron cultos en honor del rey de Aztlán y se estableció para siempre una danza de plumaje con las escenas de la guerra, Cok Ech. (Danza Sagrada).
He aquí una pequeña ventana de una visión indígena del siglo pasado acerca de la conquista hace 500 años. Hasta sus ancestros eran “testigos presenciales”, de lo que parecía ser tal vez la quema de los pies de Cuauhtémoc. Al mismo tiempo, el relato de los sacerdotes mixes demuestra lo que los occidentales llamaríamos la inestabilidad de las alianzas indígenas. El enemigo de hoy era el amigo de mañana y viceversa. Los mixes rendían culto en forma de danza a un rey, cuyo antecesor dos generaciones antes sacrificaba a los abuelos mixes. La construcción temporal de una federación o alianza para combatir un enemigo era un fenómeno común en el mundo mesoamericano. Sus sociedades se caracterizaban por interacciones y rivalidades constantes entre distintos linajes. En cuánto se había logrado el objetivo, la formación se deconstruyó y pocos años después, los mismos aliados podían convertirse en enemigos. Esto explica en parte las divergencias fundamentales de los distintos grupos indígenas en sus relaciones con los europeos, y la facilidad de los españoles para encontrar en distintas ocasiones un aliado en contra de otro grupo. De esta manera, cuando los españoles invadieron el territorio mixe en el año de 1525, iban acompañados de aliados indígenas. Sin embargo, según el relato, los indígenas que apoyaban a los españoles “en esta lucha se voltearon contra los blancos; la lucha fue terrible y la victoria fue nuestra y nuestros dioses no nos abandonaron”.
Para leer más:
Historia antigua de los mixes, según sus tradiciones que recopiló D. Juan Nepomuceno Cruz. Dr. Alejandro Sánchez Castro. SEP, Dirección General de Asuntos Indígenas. 1952
Para citar: Stan Declercq, Una pequeña historia mixe de la Conquista, México, Noticonquista, http://www.noticonquista.unam.mx/amoxtli/2809/2808. Visto el 17/11/2021
_______________________________________
Fuente
https://www.noticonquista.unam.mx/amoxtli/2809/2808
San Lorenzo de Güere fue fundado hacia el año 1675 por el franciscano Fray Matías Ruiz Blanco, en el actual estado Anzoátegui, cerca de Onoto, con los indios topocuares y cumanagotos, con la intención de convertir a los nativos al cristianismo.
Estos indios que vivían en misiones, eran auto-suficientes, disponían de infraestructura administrativa, económica y cultural que funcionaba en régimen comunitario. Se les daba un sueldo por su trabajo y parte de lo cosechado para que pudieran utilizarlo en su alimentación u comercialización.
Los indígenas aprendieron a cultivar productos europeos como legumbres, hortalizas y frutas, además de productos locales como yuca, onoto y maíz; criar vacas, ovejas, cabras, cerdos, gallinas, y obtener leche, huevos, lana, carne, manteca; confeccionaban vestidos, fabricaban objetos de carpintería o de metal, hacían curtidos; pueblos que hablaban la lengua española, que tenían nociones de aritmética, de música, de teatro; que abandonaron sus hechicerías, se bautizaron y celebraban fiestas católicas.
En 1676 se une el pueblo de Tucupido con San Lorenzo, aumentando la población y conviviendo las 2 tribus. En el siglo XVIII el visitador Caulín cita que tenían 700 habitantes. El visitador Iñigo de Abad da los datos en las décadas siguientes de: 1396 almas, 3 esclavos, 7 haciendas y 749 cabezas de ganado mayor.
Después de la independencia, las misiones no recibieron apoyo. La iglesia y sus estructuras tomaron una posición secundaria en el crecimiento de pueblos y, en algunos casos, los edificios de las misiones se emplearon para otros fines como “depósitos” o abandonados. Ocasionando así perder haciendas y terrenos cultivados, dejando pasar a su suerte y al hambre a los indígenas, que se ganaban la vida armónicamente y pacíficamente junto a las órdenes religiosas.
Actualmente, San Lorenzo de Güere esta por desaparecer, su población emigra a otros lugares. La ruina de su templo (en imagen), es una reliquia importante dentro del ámbito histórico hispánico. Están emplazadas en el centro de la población, totalmente abandonadas. Es de planta circular, atípico en las construcciones de la época en la zona.
Autor: Emilio Acosta.
http://hispanismo.org/attachment.php...id=10502&stc=1
_______________________________________
Fuente
https://www.facebook.com/Venezuelapr...9669770756022/
Los Achaguas, es un pueblo indígena que habitó en la cuenca de los ríos Apure, Casanare y Meta. Fue el pueblo más numeroso de los Llanos del Orinoco, superaban los 30 mil antes de la independencia.
Comercializaban e intercambiaban mercancías utilizando su propia moneda, la quiripa, una sarta de conchas que hacían ellos mismos y usaban como divisa para el intercambio con otras tribus.
Gian Doménico Coleti en 1771, cita a los Achaguas: "Nación bárbara a la entrada de las llanuras de Casanare y Meta, en el Nuevo Reino de Granada. Manejan estos bárbaros con gran destreza las lanzas y arrojan los dardos sin fallar; son de naturaleza dócil, pero muy dados a la embriaguez”.
Con grupos de indios caribes, mantuvieron serias desventajas por no tener una tradición guerrera, buscaron la protección en las misiones jesuitas, por estos conflictos con caribes y algunos criollos. Los Achaguas fueron la base del mestizaje en los Llanos. Ellos aprendieron a montar y a cazar a caballo en las grandes haciendas jesuitas.
El padre Rivero, señala: “Es esta gente bien dispuesta, de forma gallarda y de buen talle; usan las cabelleras bien pobladas y dilatadas casi hasta la cintura, no solo las mujeres sino también los hombres”.
En el siglo XVIII existían grandes grupos entre los rios Boconó y Masparro. Fray Pedro de Alcalá redujo a 300 en un pueblo a orillas del río Santo Domingo. Muchos vivieron en las misiones jesuitas; en 1767 los jesuitas son expulsados y los capuchinos los sustituyen.
Con el inicio de la independencia las misiones, se identificaron con la causa del Rey. El resultado de la guerra fue la destrucción de las misiones y la consiguiente huida de los indígenas nuevamente a la selva, con lo cual desaparecieron la labor misionera de casi dos siglos.
Hacia el año 1900 sostuvieron una guerra con los indios piapocos cerca de la desembocadura del río Manacacías y entre 1935-1970 fueron rodeados y expulsados por los criollos.
En Venezuela han desaparecido, pero han dejado su nombre a una población de los Llanos, entre los ríos Apure y Arauca, fundado en 1774 por fray Alonso de Castro, capuchino andaluz, como Santa Bárbara de los Indios Achaguas.
Autor: Emilio Acosta.
http://hispanismo.org/attachment.php...id=10503&stc=1
_______________________________________
Fuente
https://www.facebook.com/Venezuelapr...6618474394485/