No voy a opinar sobre la figura de Augusto Pinochet y su acción política.
Bastante tengo con Zerolo y Z-Patera.
A pesar de los errores y aciertos -como hombre que era-, creo que entre otras cosas, no se le podrá perdonar jamás el apoyo que brindó a Inglaterra durante la Guerra de las Malvinas.
¿Sobre el asunto de los muertos, torturados y desaparecidos? También los tiene el perverso de Castro y en el día de su cumpleaños, estaba chupando cámara en la tribuna de honor, Ignacio de Ramonet, Director de "Le Monde Diplomatique", panfleto infumable de los afrancesados locales. Como bien has comentado, los muertos siempre son secundarios cuando los realizan los psicópatas de las tiranías comunistas.
De todas maneras, creo que la grandeza de una Patria y de su Caudillo se mide por dos variables. La primera, por la capacidad que tiene de aniquilar a sus adversarios a través de la palabra y la justa razón, y la segunda, pero no menos importante, por el sacrificio al que estan dispuestos a asumir millones de hombres y mujeres entregando sus vidas a esa Patria y a ese Caudillo. Y recalco lo de morir por ella.
Que Dios primero, y después la Historia, juzguen sus días y sus horas.
Q.E.P.D.
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