Diego de Torres Villarroel (1694-1770), escritor extravagante y de siniestra literatura
Un original escritor que, a pesar de vivir en pleno siglo de la Ilustración no tiene absolutamente nada que ver ni con ella ni con sus peluquines. Es más bien un escritor del siglo anterior, sobre todo por sus semejanzas de temas y estilo con Quevedo, su maestro.
A la fecha, cuatro obras hemos leído de Diego de Torres Villarroel:
su “Vida, ascendencia y aventuras de don Diego Torres de Villarroel”, la obra más famosa y difundida;
sus “Visiones y visitas por Madrid con Quevedo”: ficción, en que dialogan ambos, mientras pasean, sobre las miserias y vicios del Madrid de mediados del siglo XVIII, encomiando el siglo anterior, en que vivió Quevedo, que ya es decir;
el “Correo del otro mundo”: en que Aristóteles, Hipócrates, Papiniano y otros muertos de la antigüedad reconvienen por carta escrita a Torres por sus opiniones; y éste se defiende frente a ellos, tras haber pasado el terrible susto del matasellos de ultratumba y del cartero-demonio );
y “Los desahuciados del mundo y de la gloria”: es una especie de escarmiento “médico-filosófico”; un periplo de Torres con un horrendo demonio por hospitales, describiendo a varios moribundos y sus vicios y pecados, que los llevaron a aquella miseria, y por los que, además, serán enviados de patitas al infierno.
Resultan irónicos y grotescos los "virtuosos" diálogos entre Torres Villarroel (personaje con fama de vividor en la realidad), y nada menos que el diablo, haciéndose apologistas puntillosos de la moral cristiana.
Son curiosísimos también los discursos de Torres, diagnosticando conforme al vademecum de la filosofía y medicina hipocráticas de entonces: humores corporales, influencias de los astros, fermentaciones, aires, minerales, átomos, éter... etc
Es una pena que sus obras no estén recopiladas y hayan de buscarse una a una, salvo que se posea una edición incompleta póstuma de 1795, repartida en quince volúmenes, pero obviamente no disponible ni manejable.
Marcadores