¡Vaya! resulta que según el hereje son lo mismo las imágenes de un Cristo y dos advocaciones de la Virgen que la del Satán o la del Buda, vamos, igualito, lo mismo, lo mismo, lo mismo, representan lo mismo. Ver para creer y este individuo se dice cristiano. El asunto de las imágenes ya se ha discutido en otros hilos en diversas ocasiones y quedó suficientemente claro cuál es su función. Pero uno que se dice cristiano, pese a pertenecer a una secta protestante, herética y separada de la ÚNICA IGLESIA, mantiene su judaica iconoclastia, por supuesto ofensiva para los católicos en un sitio católico del que ya se despidió hace un tiempo. Pues nada, que aquí lo tenemos otra vez para dejar alguna de sus acostumbradas majaderías. Y, por cierto, al igual que los EEUU, también México está cada día peor.