Tercios:
Siento si este post ya se abrio si es así no me importa cerrar este que he abierto, no conozco todos los post que hay ya debatidos y por eso puedo caer en redundancias por error.
Lo que digo es que creo que se habló en este foro en algún lugar (lo leí por ahí, no me acuerdo bien), pero antes de que yo me registrara, pues soy bastante nuevo.

Ahora, yendo a lo que importa; creo que usted no me ha entendido o quizás me expresé mal. Cuando digo que hay que restaurar, no me refiero a que hay que viajar en una "máquina del tiempo" a las épocas precedentes a las revoluciones liberales, pues lo que pasó ya pasó, lo hecho, hecho está. Lo que digo es que hay que rearmar el Imperio en base de los mismos principios que se forjaron al viejo Imperio y no con novedades extrañas, que parecen liberales, pues los Estados Unidos de América (y que me perdonen sus ciudadanos) no son una nación, son un mejunje de culturas extrañas (anglosajones e inmigrantes de cualquier lado); no tienen una identidad muy fuerte, porque lo único que tienen en común es la democracia y el liberalismo.
Nosotros los hispanos en cambio, tenemos en común la Religión y las costumbres hispánicas; y por lo tanto lo que debemos reconstruir es el Imperio.
Pero el Imperio, no lo debemos reconstruir restaurando los virreinatos y capitanías generales, sino manteniendo los estados que ahora están constituídos, pero pasando todos ellos a ser monárquicos, así por ejemplo quedarían: Reino de Uruguay, Reino de Argentina, Reino de Brasil, Reino de Chile, etcétera. Y eso todo no debe ser federación, sino que debe conformar una Confederación, que es diferente, pues hay más autonomía entre los estados, ya que serían reinos, principados y grandes ducados autónomos que tendrían un gobierno imperial en común, pero cada uno de esos estados con su propio gobierno. En cambio, en la parte peninsular europea del Imperio, creo que lo mejor sería la federación de España con Portugal. También habría que restaurar el derecho foral de todas y cada una de las regiones y provincias del Imperio.

En cuanto a lo de los "libertadores", ¿libertadores de qué? ¿liberarnos de Dios y del rey? Algunos fueron buenos y otros no; por ejemplo Artigas y San Martín, fueron buenos (católicos y federales), pero Bolivar fue un masón.

Además, de esta manera, se esquiva todos los problemas derivados de los egos nacionales de cada país, así como los recelos y prejuicios que cada país tenemos sobre los demás, no es deshacer lo que hay para nadie sino a partir de lo que hay hacer.
Ese problema hay que superarlo con el sentimiento común del Imperio, pues España es un destino en lo universal. Así, yo por ejemplo me identifico como católico, romano, español y oriental uruguayo. Los hispanoamericanos somos también españoles en sentido amplio; no en el sentido estrictamente liberal.

Lo que me queda alguna duda sería del título que llevaría el gobernante del Imperio, ¿sería "rey" como la mayoría en la historia hispánica? o ¿directamente un Imperator totius Hispaniae? Pues el problema de tener un imperio con emperador, sería que después, ¿qué titulo le correspondería al Emperador Romano si quisiéramos restaurarlo (cosa que también deberíamos)? ¿Súper-emperador? Sería una posibilidad. Pero por algo, el Imperio Español, nunca se llamó así, sino Monarquía Hispánica Universal, justamente porque el rey de las Españas no se atrevió a llamarse Emperador (como el de Roma). El que sí fue Emperador fue Carlos de Habsburgo, el César. Tal vez, lo mejor sea primero restaurar la Monarquía Hispánica Universal, para luego, con la reconversión de toda Europa (y Asia, empezando por Rusia), volver a re-armar el Santo Imperio Romano, para que algún día llegue realmente a ser universal.