Recordemos que cuando los politicastros de la Transición legalizaron y ondearon por primera vez ese trapo pseudobritánico en la Delegación del Gobierno de Gipúzcoa, el Teniente Coronel Tejero, que se había distinguido innumerables veces en la lucha y desintegración de comandos etarras, y que había perdido poco antes a uno de sus guardias precisamente por retirar una ikurriña con trampa explosiva, preguntó con sorna al Gobernador Civil "qué clase de honores militares debía rendirle"; lo que le costó un arresto domiciliario.Y y como se ponen tan chuletas. Cabe recordarles que Primo de Rivera y Francisco Franco prohibieron ese trapo trasformado de noble y grande historia. Si hiciesen lo mismo quienes deberían, otro gallo cantaría. Ikurriña con su aspa roja sobre fondo blanco, que el fondo blanco, también es "historia" y de la de hace siglos. Todo lo que no tiene fundamento histórico en la verdad, fuera. Lo pintas en tu casa. Las instituciones fieles a la historia común de la Patria.
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