Cita Iniciado por DOBLE AGUILA Ver mensaje
Yo sin embargo tengo otra teoría; en mi opinión mientras sigan legalizados (que lo van a estar siempre) los partidos de izquierda y separatistas va a existir revanchismo y guerracivilismo a ultranza. Esto es así, porque VENDE (sólo hay que comprobar las audiencias de la Sexta-Noche). Al español progre, incluso al más moderado, le vuelve loco el tema de la guerra y del Franquismo; lo tengo más que comprobado en mi entorno cercano. Se han tragado hasta el fondo el discurso de ser luchadores por no sé que "libertad", se sienten víctimas de una historia que no les concedió la victoria (uno de los pocos fracasos militares de los revolucionarios) y además existe toda una fantasía romántica con respecto al periodo de la Transición; y de eso, por mucho que se intente razonar con ellos utilizando argumentos, es imposible. Razonan con las tripas (por no decir, con los piés).

Están obnubilados con una serie de utopías y relatos fantásticos que han digerido acríticamente. Son la gente más manipulable (por el mal) que yo he conocido; y he conocido a muchísimos de ellos de todas los colores, y categoría intelectual. El ESPÍRITU REVANCHISTA que late en su interior es fortísimo y lleno de odio.

Algunos ejemplos palpables de lo que digo:
Haces un buen análisis de la realidad psico-social de ciertos sectores "ilustraos" por la propaganda, pero no por buenos manuales de Historia. Es público y notorio que Ortega y Gasset nunca ha estado bien visto en ciertos ambientes, pero que no lo esté no significa que sus análisis estén errados, al menos todos sus análisis, y así muchos que no quieren ni oír ni hablar de él deberían tomarse la molestia de leer Las rebelión de las masas y España Invertebrada, pues ofrecen una perfecta simbiosis de lo que le pasa a este país y de como es imposible que cambie nada de nada con semejante mentalidad. Yo jamás he sido demócrata, pues la democracia no es sino la mayor de las tiranías totalitaristas aunque la gente crea otra cosa. La democracia es como una pecera-aquarium en las que los peces nadan aparentemente en libertad, pero no pueden salir de sus paredes de cristal. Para entenderlo hay que leer cómo era la sociedad griega antigua, pues es el fundamento y base de todo ello, aunque con las adaptaciones necesarias desde las ciudades-estado a las sociedades nacionales monstruosas de hoy en día. Pero el hecho de que no sea demócrata no impide que cada vez yo piense más en la absoluta conveniencia de limitar el voto de alguna forma. Considerando que el dinero no debe ser el modo (democracia censitaria), ni tampoco la condición social, no queda otra manera que ir a lo que apenas se conoce, pero se define, como epistocracia

https://www.google.es/searchq=episto...hrome&ie=UTF-8

Ayer mismo era noticia que el alcalde de Valladolid (P$O€) había acusado a una concejala de C's de no tener otro C.V. que haber sido dependienta de una tienda. La mujer muy ofendida exigió una rectificación y al no obtenerla, se largó del pleno, con el comentario añadido del elementazo que seguramente desgobierna Valladolid: "estos o los echamos o se van". La cuestión es que si aplicamos el criterio el Parlamento se nos quedaría en cuadro y no digamos algunos partidos como el propio P$O€ en el que abundan los C.V. basados en el único empleo de haber trabajado siempre en el P$O€. Por supuesto, la epistocracia, un tanto aristotélica, se fundamenta en los mejores, o sea, los más preparados de verdad, no en laq existencia de partidos, verdaderas inutilidades, nidos de parásitos, y muy costosas para nuestros bolsillos. Pero el criterio también debería ser aplicado a la Prensa y para un bien entender, no deberían publicar esos centenares de chafarderos y correveidiles que tanto abundan, sino periodistas de verdad, con formación auténtica en sus correspondientes campos, y no que hoy parlotean de una cosa y mañana de la opuesta.

Siempre he sostenido que, en efecto, ni la Prensa, ni los políticos están para educar, pero tampoco para des-educar. Naturalmente, habría que pasar una buena depurativa laboral entre el profesorado, porque los hay a los que se ha de echar de comer aparte. Corrige estos tres sectores, y la situación de los españoles daría un vuelco de ciento ochenta grados.