Gracias por las bienvenidas.

En cuanto al asunto de la tecnica, no me referia tanto a la tecnica en si - pues siempre ha habido tecnica, de otro modo hubiera sido imposible construir las catedrales (y no olvidemos que la maquina de maquinas, antes de la aparicion del ordenador y los relojes atomicos (quarzo), es decir, el reloj mecanico, fue "inventado" por monjes en algun lugar de la Selva Negra).

ME refería mas específicamente al trabajo maquinal, fabril - o casi habria que decir, "febril". No tengo idea de ninguna actividad mas anti-tradicional, mas anti-española que ese trabajo repetitivo, inhumano, sin alma, en el que el trabajador no es mas que una ruedecita de un engranaje misterioso cuya finalidad desconoce y en el que no puede "realizarse" en modo alguno. Si a eso le sumamos las condiciones pauperrimas, el hacinamiento urbano, la falta - en todos los sentidos - de luz... no es de extrañar, me parece, que el hombre se revolviese de manera violenta - en las diversas y sangrientas explosiones proletarias que todos conocemos - ante esa "violacion" de su espiritu (y con esto, naturalmente, no las defiendo ni justifico, pero trato de explicarlas).

saludos

Pd:
Empezado por Breogan
No encuentro ninguna contradicción; es como si los soldados de Zumalakárregi usasen arcos y flechas en lugar de fusiles, porque éstos implicasen aceptar la modernidad. Ni lo hicieron ellos, ni lo vamos a hacer nosotros.
De acuerdo Breogan, pero no te olvides que el guerrero tradicional siempre ha sido reaccio a todas estas innovaciones, pues no para él no son más que rodeos que a la postre desvirtuan el sentido de la guerra. Piensa que ya la primera guerra mundial difcilmente se puede ya calificar de guerra tradicional sino mas bien de matanza - no hablemos entonces de las bombas teledirigidas, el bombardeo desde la alturas, etc. Alli donde los hombres no se pueden enfrentar entre si en lucha directa y franca hay que sospechar la presencia del diablo - al menos eso lo que pienso.