Aires muy franceses
Se están esparciendo amplias referencias respecto de la situación económica/social de Francia, que señalan como la deuda francesa ha pasado del 20% del PIB (1980) a cerca del 68% (2006), además de situar su tasa de crecimiento (¿estancamiento?) en el 1,5 % y con un paro del 10%, y claro, esto que sucede al otro lado de los Pirineos, resulta que puede tener amplias incidencias en España y no sólo por el hecho de pertenecer ambas Naciones a la Unión Europea, si no porque tenemos toda una serie de empresas subsidiarias instaladas en este sur de Europa, pero cuya casa matriz sigue ubicada en la antigua Galia.
La situación económica/social (¿y política?) de nuestro entorno de convivencia cercanos (pensemos que estamos en SA-ZA-LE), ya sabemos, ¡lo sabemos todos!, que esta pendiente de cualquier cocido y/o fonda de Valladolid, y que aquí, en el Oeste y/o Reino Leonés de la aún España, no se mueve nada si no tercia por medio una directriz pucelana, y no hace falta ser muy sagaces para darse cuenta que ahora, ¡precisamente ahora!, (en los momentos en que estamos revitalizando los legitímos anhelos constitucionales por autonómicos en las tres provincias leonesas), todo lo de Valladolid (¡y el Todo Valladolid!) esta pendiente del despido de 1.500 trabajadores (directos y otra posible cifra similar de inducidos) de la empresa (de capital francés) conocida como la FASA.
Ante estas circunstancias próximas y remotas, nos parece atisbar la llegada de una amplia ola de frío económico sobre SA-ZA-LE, ya que para tapar el agujero, amplio agujero, de Francia parece indudable, y hasta lógico, que sus propias empresas acudan en su auxilio, y que "la tos económica de Valladolid" se convierta en un catarro grave o incluso en una pulmonía, que acentúe aún más si cabe, su afán centralista acaparador. Y, por ende, aumente la desprotección del Oeste (Reino Leonés) y con ello su marginación y subdesarrollo.
La equivocación de quienes, ¡en el 1981 de la vacilante UCD!, nos amarraron al yugo político (¡y económico!) de Valladolid, no pensaron que el monocultivo empresarial que representaba la Fasa podría dar al traste con el desarrollo de SA-ZA-LE, y ser un elemento inductor del despoblamiento y desertización de una Región Histórica de España como es el Reino Leonés.
El Reino Leonés (en las cuarenta y una comarcas naturales de las tres provincias leonesas) no puede ser la moneda de pago por la crisis que, a través de Valladolid, nos esta llegando de Francia.
Los que aún alberguen dudas que hablen con nuestro emigrantes (los de SA-ZA-LE) en Valladolid y se darán perfecta cuenta de la situación económica, social y política que se avecina.
Si antes el conseguir la autonomía del Reino Leonés era el caminar en pos de la vigencia plena de los derechos constitucionales de su habitantes, ahora se hace necesario, ¡urgentemente necesario!, redoblar los esfuerzos para conseguir, antes de la anulación total, tan preciada meta.
Francisco Iglesias Carreño
(Zamora)
http://www.laopiniondezamora.es/serv...?pIdCarta=1653
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