Sí, el artículo no está mal, pero le falta eso que dice Alacrán.
Pero además yo quiero indicar que si bien el artículo trata de forma genérica al género ficticio de terror, hay que aclarar bien que también hay películas y libros de terror, que no llevan al nihilismo ni mucho menos al satanismo, sino todo lo contrario. Yo reivindico un terror cristiano, en el cual el mal sea aplastado y en donde se le tenga miedo a Dios, al pecado y al infierno; los demonios deben ser mostrados como entidades reales, que los lectores (o espectadores) los entiendan como lo que son: seres reales, NO ficticios. Reivindico un terror donde sea la Iglesia, con sus sacerdotes, sus exorcistas que derrote al mal y no toda clase de hechiceros y farsantes como hay por ahí.
Lo menciono porque yo escribo ciencia ficción y aventuras, también con terror y de modo alguno es la intención de mis novelas y cuentos que el lector caiga en el nihilismo ni el satanismo, sino que crea en Dios y en su Santa Iglesia.