Y lo mismo que a San Agustín y a San Francisco Javier no se les puede acusar de ceder ante los herejes y los paganos, tampoco San Pablo se postró ante Zeus. Por supuesto que siendo un hombre culto conocía la filosofía griega y se sirvió de lo que había en ella de rescatable para evangelizar a los griegos. ¿Acaso San Agustín no tomó lo que había de bueno en Platón o Santo Tomás de Aquino lo bueno de Aristóteles? Estamos hablando de filosofía, no de paganismo, claro. Es muy loable la labor de la Madre Teresa en cuanto a caridad y amor al prójimo. Verdaderamente admirable y todo un ejemplo. Pero eso no quita que junto con sus luces también tuviera sus sombras. Y es cierto que descuidó la parte espiritual para atender la física. Como les dijo Jesús a los fariseos, "hay que practicar esto sin descuidar aquello". (Mt 23,23).