Cita Iniciado por JESEG
Creo que si, es una oportunidad que las fuerzas separatistas no van a desaprovechar. Aunque CiU juegue a la carta maximalista del todo o nada, no es mas que fachada de carta a los electores nacionalistas, a quienes va dirigida ésta actitud para hacerles ver que son mas nacionalistas que los de ERC; pero a la hora de la verdad apoyaran con su voto al Estatut, no sin haber hecho antes un poco mas de teatro y dicho que es un Estatut que les desagrada, pero que lo apoyan por "patriotismo".
De sobra saben que otra oportunida historica como ésta es dificil que se les vuelva a presentar, con un Gobierno de España en minoria, con una total carencia de sentido de Estado, y un nulo patriotismo español, lo que les lleva a apoyar "todo lo que salga del Parlament", Zp dixit.
Es por ello que yo si creo que habra nuevo Estatut, de la misma forma creo que saldra adelante en las Cortes, con la suma de los votos catalanistas y del PSOE, aunque de cara a la galeria habrá algun socialista que votara en contra. La duda está en lo que ocurrirá en el Tribunal Constitucional, aunque dada mi falta de confianza en la "Justicia Española" me temo lo peor...


De entrada concuerdo contigo, JESEG.

Sin embargo, parece ser que el Estatut es de sobra inconstitucional, como han adelantado aquellos comentaristas críticos con el Balcanismo (p.ej. Aleix Vidal-Quadras, en MinutoDigital la semana pasada).

Esto significa que aunque lo apruebe el Parlament, el Estatut no será aceptado por, al menos, el Tribunal Constitucional, único dique de contención una vez que ZP y su mayoría parlamentaria hagan la vista gorda, como parece que están dispuesto a hacer.

Si el TC paraliza el Estatut, pueden pasar dos cosas: o bien se hace una pinza retocando el Estatut y metiendo mano al TC; o bien se reforma la Constitución de 1978.

Mientras que lo primero suena más fácil, hoy en día se está dando una situación propicia para lo segundo: ZP, Maragall, Touriño, IU apuestan por un federalismo asimétrico a la yugoslava de 1980; el PP se encuentra débil y dividido, y tiene en sus filas a partidarios de reformas constitucionales como Fraga, que tenía su ppropio modelo de federalismo, aunque más simétrico que el de las izquierdas. Por si fuera poco, se negocia con ETA, se dan señales de esperanza a Ibarretxe, en Galicia existe un pacto similar al catalán y a los nacionalismos centrífugos sólo les falta saltar todos a una.

Es decir, el Consenso de 1978 ya no existe de facto; falta que se abra el debate y se admita la posibilildad de reforma constitucional para que todo empiece a cambiar.

El problema de la inconstitucionalidad del Estatut puede derivar en una especie de casus belli, utilizando otra terminología, para modificar la Constitución de 1978.

Si el PP se niega a consensuar una “reforma” en los términos que placen al resto de fuerzas frentepopulistas y centrífugas, incluso se puede dar la “segunda transición” que muchos persiguen con tanto ainco.

resumen críptico: Estamos en 1930.