Debería felicitarle por su exposición si no fuera por dos razones: primera, por que es un argumento circular basado en una serie proposiciones lógicas producto de experimentos que más o menos unificados según qué criterios opinativos, de los cuales algunos, sólo los interesantes, ya trataré y, en segundo lugar, por que usted no es el autor de estas líneas. Y es que de pronto, usted en pocos días se ha convertido en un consumado astrofísico, por cierto, bastante demagogo y con una sola intención, mantener a machamartillo lo que todo el planeta sabe perfectamente: que la Tierra no es geocéntrica.
Mire, el número de investigadores científicos que hay en el mundo es de millones. Luego, NO EXISTE, un "establisment" científico salvo en la mente de personas como usted, y en las de los aficionados a los OVNI y las conspiraciones. Hay científicos que trabajan como tales y cobran por ello, como otros no científicos trabajan para cualquier administración en el país que sea. Y eso no quita para que haya muchos millones de científicos que no cobran de ningún "establisment" que ya se habrían dado cuenta perfectamente de que si lo que usted y su "enanito" oculto afirman, fuera falso, ya lo habrían denunciado por activa y por pasiva en todos los medios y ámbitos de discusión. Curiosamente no es así.
Luego, Airy lo único que hace es estudiar un fenómeno que no afecta a la Tierra, sino a la luz que llega a ella a través de los instrumentos ópticos. Es un problema de esfericidad, es decir, que las frecuencias de la luz no llegan al punto focal al mismo tiempo y eso provoca principalmente, que no únicamente, dos aberraciones ópticas y particularmente con mucha mayor intensidad en la óptica que se manejaba en su tiempo que era bastante deficitaria, por no decir que demasiado deficitaria, y él era un astrónomo real inglés, ¡por favor! eso era admisible en el continente, pero jamás en la isla. Así que se puso manos a la obra para saber a qué se debía tal circunstancia. El problema, obviamente, no podía provenir nada más que del tallaje de los vidrios usados en la construcción de las lentes de los telescopios (entonces sólo acromáticos, pues los apocromáticos o los construidos con cristales exóticos, como la fluorita, eran totalmente desconocidos), o en el pulido de los espejos con sistemas muy inferiores a los actuales, provocaban aquellas aberraciones que impedían la observación correctas de lo objetos celestes, particularmente las estrellas, a grandes aumentos. Lo que sucedía es que en tales observaciones usando también oculares basados en los mismos principios que las lentes de los objetivos, no llegaban a lo que se denomina como "frente de onda" aceptable y cuyo mínimo es 1/4 o lambda 4, y que sólo empiezan a ser realmente útiles cuando dicho frente de onda alcanza un lambda 6 ó 7, siendo el más idóneo el frente de lambda 8. Naturalmente tales el logro en la construcción de tales sistemas es que encarecen extraordinariamente los instrumentos. Y, en cualquier caso, los mejores logros se suelen obtener en instrumentos con abertura de objetivos pequeños y medianos. A esos estudios de Airy sobre la difracción óptica se les dió después el nombre de "disco de Airy", expresión que suele ser sustituida por la de "anillos de difracción". ¿Y en qué consiste esto?, pues en lo siguiente:
Es un doblamiento leve de la luz alrededor del borde de un obstáculo situado en su camino. Es una consecuencia de la naturaleza ondulatoria de la luz. Debido a la difracción, una imagen estelar está constituida por un disco de Airy rodeado de varios anillos de difracción, producidos por la difracción en el borde la lente oi espejo del telescopio. En un telescopio reflector que tiene un espejo secundario sujetado por dos o más brazos (se llama "araña"), la difracción alrededor de los brazos hacen que las imágenes de las estrellas tengan picos (se llaman "espículas). La difracción también ocurre a otras frecuencias de onda, como en el radio. Una fuente de radio puntual ocultada por la Luna, por ejemplo, desaparece o aparece con oscilaciones de brillo, en lugar de abruptamente, al barrer el patrón de difracción el observatorio. El tamaño del patrón de difracción aumenta con la longitud de onda de la radiación implicada.
Luego, el experimento de Boscovich sobre el radiante de la lluvia, tiene una perfecta aplicación hoy en día para determinar cuál es el radiante correspondiente de las llamadas lluvias de estrellas, que suelen llevar el nombre de la constelación de la que provienen aparentemente: "gemínidas", "acuáridas", etc. Y Ya nos dirá, según usted, qué tiene que ver todo esto con la rotación terrestre. La cual, aparte de haber sido observada, determinada y aplicada a todos los sistemas de comunicación actuales, desde el propio espacio por un número impreciso (no tengo el dato, eso es todo) de varios miles de satélites puestos en órbita, desde los de uso civil a los de uso militar. Además, es la propia Tierra la que nos lo muestra a diario con la variabilidad de las horas de insolación y oscuridad a lo largo del año en cada latitud y su correspondiente longitud; ni por qué la noche es más larga en invierno y en verano mucho más corta; ni la causa por la cual el Sol aparece y se pone por lugares diferentes sobre el horizonte y ello causado por las variaciones orbitales terrestres; así como de la existencia de las estaciones, dos en los polos y en el ecuador y cuatro en las latitudes medias; y también nos lo indica con la formación de los vientos y las corrientes de aire atmosféricas provocadas por la rotación; algo que es manifiesto en la existencia del magnetismo terrestre el cual desaparecería matando toda forma de vida a causa de la entrada masiva de partículas de rayos gamma procedentes del Sol que son desviadas por los Cinturones Van Allen generados en el núcleo terrestre gracias a la rotación...
No hay nada peor que la persistencia porque si en el error. Ya le indiqué que puede poner un ojo en un telescopio de aficionado para comprobar sus errores, el error de los planteamientos que usted y su "enanito" escondido que redacta por usted o le dicta al oído qué escribir. Con esa simple experiencia es más que suficiente. Es totalmente absurdo, va contra toda la Física elemental alegar que las que se desplazan son las estrellas del fondo en lugar de que la Tierra gire sobre sí misma. Pregúntele a su "enanito" la razón por la cual todos los astros describen círculos cuyos planos son paralelos al plano del ecuador celeste. Pregúntele por qué, y según la latitud geográfica (se define como la letra griega Fi) las declinaciones delta de los astros, los paralelos diurnos de ellos o bien cortan el horizonte matemático en dos puntos disponiéndose sobre éste, o se sitúan debajo de él. Dicho punto de intersección del astro con la sección oriental del horizonte verdadero se llama punto de salida del astro, y el punto de intersección del astro con la parte occidental del horizonte verdadero se llama punto de puesta del astro. Es decir, el astro que sea sale y se pone en una declinación menor que 90º menos la latitud, o sea, el valor absoluto de su declinación. Cuando en lugar de hablar de latitudes medias, que se establecen todas mediante una progresión del mismo método antes expuesto, se habla de las posiciones de los astros en los polos, se ve que el horizonte paralelo no corta el horizonte matemático y a este astro se le denominará inocciduo que se desplazará íntegramente sobre el horizonte, o será inortivo si se desplaza íntegramente por debajo de la línea del horizonte.
Y del mismo modo, podemos hablar de la variación de las coordenadas de los astros durante el movimiento diurno. Podemos tratar de explicar qué es la eclíptica y su sistema de coordenadas con las correspondientes variaciones en las coordenadas ecuatoriales solares, algo que ya indiqué más arriba, pero bueno. Realmente esto no es más que un diálogo de sordos. Resulta absolutamente imposible que usted y su "enanito" me puedan convencer de lo que dicen, máxime con la tergiversación de teorías y experimentos sobradamente archiconocidos, a veces superados y otras aplicados a diferentes campos a modo de paradigmas mientras tienen vigencia, es decir, según el común y normal procedimiento del establisment científico. Y da igual cuando usted y su "enanito" intentan rebajar la importancia de la singularidad matemática llamada irónicamente por un ateo, Big Bang, cuando es la prueba física de que todo tuvo un comienzo, es decir, la teoría que más se ajusta al primer instante de la Creación y que está resistiendo todos los ataques de los "anti-Dios" y que usted rebaja a categoría de algo "forzado" para así afirmqar que la Tierra es el único planeta del Universo que no tiene rotación. ¡De traca! Dígamde ¿quién es su "enanito"? lo digo porque sería interesante poder charlar sobre él con el decano de la institución en la que trabaje. Y si es un "independiente" su opinión no vale más que la de cualquier aficionadillo.
Mire, si usted quiere que este foro lo sea de Astronomía me lo dice claramente, aunque le anticipo que no va de ello, y si no, deje de dar la tabarra con su mantra geocentrista. Desde aquí invito a todos los lectores a que lleven por si mismos las observaciones necesarias para comprobar como, en efecto, uno de los movimientos de la Tierra es el de la rotación.
Marcadores