Esta es una pregunta filosófica a la que no es fácil encontrar una respuesta. ¿Qué determina nacer en una época, raza, país, región, familia, nivel social, etc., y no en otra? Quienes somos católicos tenemos el recurso de afirmar que Dios otorga el alma, cada una de las cuales es asignada a un cuerpo, pero esto no responde al contenido general de la pregunta. Sólo la hecho en el sentido de que somos espíritu y materia, pero qué nos da la conciencia de quién y qué somos. Todo ser humano lo mismo podría nacer en condiciones de extrema pobreza que ser miembro de la familia real británica. A eso se suele decir que es como una lotería, ¿de verdad?

Si nazco en la edad contemporánea, bien podría haberlo hecho en cualquiera de las pretéritas. He nacido blanco y español, pero podría haber sido chino, o haberlo hecho bereber y marroquí. Cualquier creyente en la metempsicosis afirmará que la transmigración de las almas lleva de un cuerpo a otro, argumento que no parece responder a la cuestión de porqué en el mundo de hoy existen unos 7.500 millones de seres humanos y hace tres siglos había mil millones, así que ¿de dónde han surgido los otros 6500 millones? Es decir, no es una respuesta, a algunos les valdrá, a otros para nada.

El pensador español Ortega y Gasset afirmó "yo soy yo, y mi circunstancia", oración recurrente, muy adecuada para ser repetida por millones de veces, que sirve para justificar que no se tiene respuesta, y que no responde a nada tampoco. Es decir, al mismo tiempo que la Cosmología se plantea entre otras grandes cuestiones sin respuesta posible, salvo recurriendo a la obra creadora de Dios, ¿por qué y para qué estamos aquí?, es perfectamente posible añadir ¿por qué y para qué he nacido en el tiempo que me ha tocado, la raza (o etnia para algunos) a la que pertenezco, el continente, país, región y situación familiar y socioeconómica, en lugar de otras circunstancias muy diferentes?