Tema: El rector de Comillas (jesuitas) entrega la universidad al lobby LGTB

por Gabriel Ariza | 11 abril, 2018

La Universidad Pontificia Comillas, de la compañía de Jesús, ha organizado unas conferencias, bendecidas por el rectorado, en las que se ha ridiculizado la doctrina de la Iglesia sobre el ser humano y el matrimonio y se han promovido los dogmas del lobby LGTB.

La Universidad Pontificia Comillas de Madrid ha dejado de ser católica. Es la conclusión a la que se llega tras leer la carta abierta que un antiguo alumno ha querido enviar al rectorado de la universidad a la que ha tenido acceso InfoVaticana. En la misiva, el alumno denuncia lo que ha venido ocurriendo en las últimas semanas en la universidad:

Hace unas semanas, una asociación perteneciente al colectivo LGTB intentó organizar, con el apoyo de la Vicerrectora de Servicios a la Comunidad Universitaria y Estudiantes Ana García-Mina, una charla para “visibilizar y normalizar el colectivo LGTB en ambientes conservadores y tradicionales como ICADE”. Gracias a la movilización de los alumnos, que trabajaron para preservar el buen nombre de la universidad, la charla se canceló y la vicerrectora fue desautorizada.

Sin embargo, la Pascua comenzó en Comillas con una desagradable sorpresa. La posición de García Mina ganó fuerza en el rectorado, a cuyo frente se encuentra José Julio Martínez, y la universidad convocó, en el aula de opinión, un ciclo de conferencias sobre “superación, desarrollo profesional e integración de la diversidad sexual”, incluyendo como guinda final la charla de una antigua alumna de la universidad que, víctima de la colonización ideológica de las multinacionales del género, se hace llamar Miguel Nieto.


Isabel Lázaro, profesora de Comillas y activista LGTB, saluda al Papa.

La charla, bendecida, con su presencia en la mesa de oradores, por la profesora Isabel Lázaro y el director de la cátedra de bioética Javier de la Torre, y con la presencia de la vicerrectora, ha tenido lugar esta mañana en la sala de conferencias del histórico edificio de Alberto Aguilera. Durante la misma han tenido que ser los estudiantes de la universidad, muchos de ellos de los primeros cursos, quienes han tenido que recordar a las conferenciantes conceptos básicos de la biología como el sexo o la edad.

Algunas de las frases pronunciadas en la conferencia, como muestra del nivel en el que se ha movido la charla, han sido:

• “Yo he sido una lesbiana machorra”
• “Como chico he adoptado un rol de chico bastante afeminado”
• “No voy a dejar que nadie ni nada me diga qué es lo que no puedo hacer”
• “No se nos asigna un género desde el momento del nacimiento”
• “La identidad de género se empieza a formar a los cuatro años, pero aunque adquiere una cierta estabilidad, no se define. Va cristalizando según avanza la primera adolescencia.”
• “Hacemos la vida imposible a los niños: ¿Por qué no tenemos baños únicos?” (pronunciado por la profesora, Isabel Lázaro)
• Nadie nos debe imponer que sentir o como sentir: es una vivencia personal que no puede imponer un tercero.
• Desajuste sexo asignado y sexo sentido -así se suele llamar-.
• Los padres no representan a los hijos en cuestiones de salud.

InfoVaticana lleva cerca de un mes intentando contactar con alguien en el departamento de comunicación de la Universidad, un equipo al frente del cual se encuentra Juan Manuel Daganzo, que no ha atendido, en un mes, a las reiteradas peticiones de información de este medio.

Juan Manuel Daganzo, responsable de comunicación de la universidad, desaparecido en combate.

A continuación el texto de la carta:

Buenas tardes:
Soy un antiguo alumno de la Universidad Pontificia Comillas. Le escribo a usted y al resto de la que creo que es la jerarquía universitaria para manifestar ciertas cuestiones, que sé que caerán en saco roto, que no tendrán ningún efecto pero mi conciencia no me permite estar callado, manteniendo la esperanza en que lean el correo hasta el final.

En primer lugar, como ustedes saben el próximo miércoles se celebra en Icade la conferencia «Charla Transexualidad a través del género», «con el fin de normalizar y visibilizar el colectivo LGTB en un ambiente tradicionalista como Icade», así reza la convocatoria. Soy consciente de que la Universidad es un centro de debate y de ideas, donde la libertad de expresión es un valor esencial. Ahora bien, si se tratara de un debate sobre el tema con distintas posturas lo comprendería pues como tema de actualidad merece un estudio al respecto. Sin embargo no se trata de eso. Se trata de una conferencia propagandística ideogilizadora de una de las más absolutas perversiones que existen hoy en día. Anticatolica, amoral y que ya se puede prever su mensaje sectario contra Nuestra Iglesia. No pequemos de ingenuidad.

Por ello con el mas absoluto respeto a todas las personas a las que me dirijo, creo que en una universidad, que se dice Pontificia y que tiene como valores la Verdad Católica y sus principios es absolutamente incoherente que se celebra dicha conferencia. Teniendo además como gobernante supremo a Su Santidad, al General y al Provincial en España de los jesuitas. Pero no es solo una falta de respeto a la Iglesia, a la Cruz que preside nuestras aulas y el mundo, sino a la Compañía de Jesús antaño baluarte de la defensa de Cristo y ahora con gestos como este, plegado al mundo moderno y sus perversiones. ¿Es esta la voluntad de Dios que tiene que impulsar todos nuestros actos?

Tampoco digo q esa persona (Él o Ella), no tenga derecho a hablar ni a ser tratado con el respeto que merece, pues la explicación de un trastorno como el suyo siempre es útil para comprender mejor a este número reducido de personas. Pero no creo que este sea el lugar y aun siendolo no lo es para hablar de la enfermedad que afecta a poquisimas personas en realidad, sino para normalizar lo que no es normal. Este ha sido el objetivo de este grupo todos estos años, que lo asumamos como algo normal y no contrario al Derecho Natural, o a la Verdad.

Que se permita esto basándose en el apoyo del aula de cultura o del alumnado es ridiculo, miserable y cobarde. No escribo este correo con el fin de evitar esa charla pues conozco el tipo de personas que rigen esta institución y huirán de cualquier enfrentamiento o polémica en este sentido. Renunciando a sus valores una y otra vez por un aplauso de un sector que nunca tendrán por mucho que se esfuercen. Pero si conseguirán que gente como yo, católica y coherente acabe perdiendo la fe en los jesuitas, los sacerdotes, algunos obispos y los laicos cobardes. Aunque tras aquella tercera en ABC de nuestro rector, apelando al voto a Hillary Clinton y diciendo que la defensa del aborto debe quedar en un segundo lugar me hago a la idea de todo. Y mucho más ahora cuando Trump se ha reafirmado como el presidente más provida del mundo occidental.

Solo espero que este texto les haga recordar algo de lo que dicen ser y sirva para hacer visible a una persona que no esta de acuerdo con esta corriente. Que por lo menos no vivan en la impunidad de hacer lo que quieran sin ninguna consecuencia aunque esta sea un misero correo electrónico.
Con la esperanza puesta en Nuestro Señor orando para que les ilumine en esta tarea. Reciban un saludo.

Pd: En la encuesta de final de curso solo puse como mejora que el aula solidaria y cultural estuviera un poco mas influida del pensamiento católico que creia que regia en esta universidad. Veo por donde se pasan las recomendaciones de los alumnos y para lo que sirven estas encuestas. No se preocupen, seguirán ganando dinero y teniendo centenares de solicitudes por plaza el próximo año y los siguientes. Pero honestamente hay algo mucho mas importante y es defender a Cristo y su Iglesia en público. Responderán por ello.

https://infovaticana.com/2018/04/11/...al-lobby-lgtb/

AY! Jesús, que Compañía!
Aquí si que cabe el antiguo adagio: Más vale solo que mal acompañado!
Bergloglio es un típico autodemoledor de la Iglesia, y estos pérfidos jesuitas de la Universidad Pontificia de Comillas, Mamma Mia!
Que el buen Dios nos pille confesados de semejantes aberraciones jusuíticas.
Su ultima "hazaña" será la beatificación de Mons. Angelelli, un obispo modernista de la "teología de la liberación", que protegía y apoyaba a los guerrilleros, y que murió en un accidente automovilístico y ahora nos quieren hacer creer que lo mataron, lo cual es totalmente falso y me consta porque he visto todo el expediente judicial.
Además aun en el caso que lo hubiesen matado -lo que es mentira- en modo alguno sería mártir, como lo pretenden declarar, pues en ese caso lo habrían matado por estar con la guerrilla y no por la fe, ni por ser católico o obispo.
Pero ya nada puede extrañarnos de Bergoglio y su compañía, o compañeros de ruta, que consiente o inconscientemente (para el caso da lo mismo), fungen para los enemigos de la Iglesia.
Ya sabemos lo que hizo N.S. Jesucristo con los "marcadores del templo"...