No se me ponga así, hermano el cura y el barbero: al decir "esos" días, solo hice una broma acerca de los momentos en que el hermano Lizcano de la Rosa se impacienta ante la ignorancia de algunos (entre los que me incluyo). Solo fue una inocente broma hacia el hermano Lizcano, que de seguro no lo entenderá como usted lo entiende.
Como entenderá, no puedo recurrir a la sapiencia de una persona, si antes la estoy denostando.
Calma, hombre, calma. Imagínese en un templo.
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