En mi opinión, Fra Angelico es tal vez el mejor pintor del Renacimiento. Supo aprovechar los aportes de la época, como la perspectiva, creando unas pinturas luminosas y sin caer en temas paganos. De su discípulo Gozzoli (esta es la verdadera grafía) no te sabría decir gran cosa, aunque no me parece tan buen pintor como el primero.

¿Qué si la Iglesia Católica acepta la representación pictórica de Jesús, María y los santos? Tantos siglos de cuadros, frescos y dibujos ¿y preguntas eso? Nada más te digo que Fra Angelico es beato, así que ya ves, para la Iglesia hasta es posible ser pintor y santo.

Los ortodoxoos no se atrevían a hacer representaciones en tres dimensiones, es decir, esculturas, y se quedaron con meras pinturas. Aunque el arte bizantino tiene su belleza, los iconos son figuras carentes de perspectiva que resultan bastante planas. Pero en realidad la prohibición de tallar imágenes es del Antiguo Testamento, y no nos afecta a los cristianos. Esta prohibición tenía su origen en la idolatría que estaba muy extendida en la antigüedad, y a la que a veces eran proclives los judíos (el Antiguo Testamento está lleno de ejemplos, y los profetas se la pasaban amonestándolos por ese mismo motivo). Aun así, hubo excepciones como la serpiente de bronce que mandó construir Moisés y los querubines del Arca de la Alianza. En realidad el problema de los ídolos está en creer que la estatua es el dios o está habitada por el dios, como creían los paganos y creen muchos pueblos animistas. Los cristianos sabemos que Cristo solo hay uno y que solo tuvo una Madre, aunque la llamemos por numerosísimas advocaciones según el lugar o la imagen, pero no son sino representaciones que facilitan la devoción. Algunos tienen preferencia por una imagen o advocación determinada, pero saben que no es el original y que tampoco es imprescindible tener delante una estatua del Señor o de la Virgen, o de tal o cual santo para rezarle. Te podría comparar lo de la devoción a las imágenes con tener una foto de tu mamá. No es ella pero te hace pensar en ella, te la recuerda, y la guardas con cariño.

Los canutos y otros protestantes son muy estrictos con esto de las imágenes aunque aceptan los cuadros porque a pesar de tanto insistir en la gracia en la práctica se apegan mucho a la letra de la ley, incluso de la caduca Ley Mosaica, y afirman que nosotros adoramos a las imágenes, lo cual es falso (si alguno adora una imagen, o adora a la Virgen o un santo comete pecado de idolatría, pero no creo que haya muchos que lo hagan. El catecismo lo explica todo muy bien y pocos son tan ignorantes).