(Continuación del post anterior, que no cabía)
CONCLUSIÓN SOBRE LOS 3 ASALTANTES
La conclusión a la que llegamos, enmedio de tanta confusión e inconcreción mediática, es que ha desaparecido un terrorista.
La pregunta es: ¿DONDE ESTÁ EL TERCER ASALTANTE A LA REVISTA CHARLIE HEBDO DEL QUE HABLAN ALGUNOS TESTIGOS?
¿POR QUÉ NADIE HABLA DE ÉL?
¿POR QUÉ LOS MEDIOS LO HAN OLVIDADO?
¿SE HA VOLATILIZADO?
Parece ser que la confusión radica en el siguiente aspecto…
Inicialmente se acusó a 3 personas del ataque a la revista Charlie Hebdo: los dos hermanos Kouachi y el presunto cuñado de uno de ellos, Mourda Hamyd. Algunos testigos corroboran que efectivamente “vieron a 3 personas”.
Ese debía ser el argumento inicial.
Pero al entregarse voluntariamente Mourda Hamyd en una comisaria del norte de Francia y demostrarse que era inocente, desmontando la teoria inicial según la cual formaba parte del grupo de 3 asaltantes, la figura del tercer sospechoso desaparece de la escena, como si nunca hubiera existido, a pesar de que horas antes, algunos testigos y los propios medios de comunicación hablan de él.
Es entonces cuando los medios de comunicación empiezan a hablar de “2 atacantes a Charlie Hebdo”
Posteriormente y tras el oportuno video de reivindicación de Coulibaly, los medios afirman que los hermanos y Coulibaly eran “cómplices” y actuaban “coordinados”, sin especificar en ningún caso cómo ni por qué.
De esa manera, en el imaginario público, queda cubierta “la vacante” del tercer sospechoso visto en el asalto a la sede de Charlie Hebdo, que de forma inconsciente la gente identifica como Coulibaly, a pesar de que los propios medios de comunicación, de forma difusa y nada clara, separan las acciones de Coulibaly de las de los hermanos Kouachi.
Como siempre, un fantástico papel de los medios de comunicación de masas, que como vemos, solo sirven para confundir, vomitar mensajes de propaganda y repetir como loros información procedente de agencia y de los gobiernos sin contrastarla.
Agentes de desinformación en estado puro.
A eso lo llaman “periodismo”.
LA INSISTENTE MENTIRA DEL POLICIA EJECUTADO CON UN TIRO EN LA CABEZA
Un ejemplo claro de la capacidad para confundir y desinformar de los medios de comunicación lo tenemos en la imagen más tristemente célebre e impactante de este atentado, utilizada para destacar la brutalidad de los terroristas: la de la ejecución a sangre fria del policia Ahmed Merabet.
De forma insistente, los medios de comunicación oficiales han insistido en el hecho de que el policia fue ejectuado con un tiro en la cabeza, una afirmación que ha provocado una enorme controversia en algunos medios alternativos, llegando a levantar dudas sobre la posibilidad de que nos encontremos ante una escenificación falseada de una ejecución.
El principal foco de confusión proviene de la afirmación “ejecutado con un tiro en la cabeza”.
Como podemos ver en el siguiente video, esa afirmación no parece demasiado sostenible, pues según numerosos expertos, un tiro en la cabeza con una AK-47, habría provocado que la cabeza de la víctima estallara literalmente.
Un ejemplo de los destrozos provocados por una AK-47 los podemos ver en el siguiente video:
Por otro lado, en el video contenido en la siguiente web, se ofrece la imagen (no apta para almas sensibles) de la ejecución en cámara lenta, que nos mostraría lo que (supuestamente y según algunos medios alternativos) sería un tiro premeditadamente fallado, algo que podría deducirse por el rebote de la bala sobre la acera:
LiveLeak.com - Charlie Hebdo police officer shooting zoomed in & slow motion
Sin embargo, tampoco se puede sostener de forma categórica que todo ello se trate de un montaje.
Existe la posibilidad de que la víctima fuera ejecutada realmente, pero sin recibir un tiro en la cabeza, tal y como afirma el medio Daily Sheeple:
(Fuente)“¡Eso no es un tiro de cabeza! La bala se ha introducido en el chaleco antibalas por la parte superior del hombro, para salir por la parte delantera. La pequeña explosión de polvo que vemos es de la munición de núcleo de acero golpeando la acera. Las salpicaduras de sangre provocadas por la herida, serían contenidas por el chaleco antibalas en su parte delantera. Lo que es indiscutible es que no ha sido un tiro en la cabeza. Una bala de 126 gramos a 700 metros por segundo, si impactara en la cabeza, la habría hecho explotar como un melón”
Evidentemente, no somos expertos en balística ni en armas (ni esperamos tener que serlo), pero a estas alturas no hace falta tener demasiados conocimientos del tema para ver, de forma bastante clara, que la víctima no recibió un tiro en la cabeza; de lo contrario, las imágenes serían muchísimo más duras.
La gran pregunta es: si gran cantidad de gente ha sido capaz de deducir algo tan obvio como esto, ¿por qué los medios de comunicación siguen insistiendo en que fue ejecutado con un tiro en la cabeza? ¿Acaso los periodistas no pueden investigar mínimamente antes de realizar afirmaciones tan inexactas? ¿Por qué debemos creer en ellos si ni tan solo se preocupan de decir la verdad sobre algo tan obvio?
EL NUEVO PAPEL DE LOS MEDIOS EN LOS ACTOS DE TERRORISMO
Uno de los asuntos que llama más la atención respecto al atentado de Paris, es el nuevo papel de los medios de comunicación.
No solo nos ofrecen en vivo los atentados terroristas como si de un espectáculo más se tratara, sino que ahora son capaces de entrevistar a los propios terroristas mientras realizan los atentados, contribuyendo aún más en convertir los atentados en un gran espectáculo televisivo.
Tal y como afirma El Mundo:
UN EJEMPLO DE CONDICIONAMIENTO SOCIAL SUTIL“Sincronizamos las operaciones”. Así de rotundo se manifestó el secuestrador Amedy Coulibaly mientras retenía a varios rehenes hoy en Hyper Cacher, un supermercado judío de París. Antes de ser abatido por la policía durante el asalto a la tienda de comida kosher donde se atrincheraba, Coulibaly llamó a la cadena de televisión francesa BFMTV para dejar claras sus intenciones.Éste hecho abre una nueva vía en el campo de las retransmisiones televisivas.
BFMTV también ha hablado esta mañana con uno de los atacantes de ‘Charlie Hebdo’, Cherif Kouachi, que permanecía resguardado en un edificio industrial en Dammartin-en-Goële. Éste declaró que él y su hermano “eran los defensores del profeta” y que estaba “a las órdenes de Al Qaeda en Yemen”, a donde había viajado a recibir adiestramiento.
Según explican desde este medio, ha sido Cherif Kouachi el que ha respondido al teléfono cuando un redactor de la cadena ha llamado directamente a la imprenta en la que permanecían atrincherados los yihadistas. “Intentábamos encontrar a algún testigo”, ha explicado un redactor de BFMTV. Al parecer hubo dos llamadas, la segunda de ellas fue grabada por la televisión y enviada a la policía
Es probable que a partir de ahora, podamos “disfrutar” de dramáticas llamadas en directo durante los atentados, aumentando con ello el nivel de espectáculo y morbosidad de los hechos narrados.
Se abre pues, una nueva vía para los medios con la que ofrecer dosis de propaganda a la población y aumentar la dosis de impacto emocional, espectáculo y morbosidad de cualquier tragedia o acto violento de cara al futuro.
Y con ello, la capacidad para manipular las emociones de la población al antojo de los guionistas del sistema.
Antes de terminar, queremos añadir un detalle más, que nos habla bien a las claras, del nivel de manipulación al que estamos sometidos, especialmente por parte de los medios de comunicación.
Todo gira alrededor del uso de los móviles y de un detalle que puede parecer meramente anecdótico.
Y es que, por lo visto, Amedy Coulibaly, de 32 años de edad, no sabía como se apaga un teléfono móvil.
Parece ser que Coulibaly es la única persona de su edad que no sabe apagar el móvil. Los medios nos han contado que tras llamar a la cadena de televisión, Coulibaly “colgó mal el teléfono móvil” y aún se pudo escuchar lo que estaba sucediendo en el interior del supermercado.
Así fue como la policia pudo conocer los movimientos de Coulibaly y encontró el mejor momento para asaltar el supermercado.
De manera similar, un trabajador oculto en una caja de cartón pudo narrar a la policia los movimientos de los hermanos Kouachi en la imprenta en la que se habían atrincherado, dando información valiosa a las fuerzas de seguridad para realizar el asalto.
En ambos casos, la tecnología se alía del lado de “los buenos” y el hecho nos ofrece dos imágenes subliminales de “gran valor”.
El primero mensaje subliminal es: la vigilancia policial, escuchando lo que acontece al otro lado del teléfono, salva vidas, como en el caso de Coulibaly y el asalto al supermercado judío.
El segundo mensaje subliminal es: alguien que chiva a escondidas los movimientos de los “malvados”, contribuye a detenerlos, como en el caso del trabajador escondido en la caja en la imprenta.
Dicho de otra manera, de forma muy sutil inoculan dos conceptos en el imaginario popular aprovechando un momento de gran carga emotiva:
1-El control policial de las comunicaciones es positivo
2-La delación y la denuncia ciudadana son positivas
¿Y qué ha sucedido al día siguiente?
El gobierno español ha empezado a considerar la posibilidad de potenciar los mecanismos que permitan que maestros, médicos o trabajadores sociales delaten cualquier atisbo de actividad que pueda considerarse como “radical y violenta”.
(Fuente)“Poner a la sociedad civil a trabajar, echar mano de sus profesores, de los trabajadores sociales y hasta de los médicos para detectar los síntomas de radicalismo entre los musulmanes -entre 1,2 y 1,5 millones, según las estimaciones- que residen en España. Después habrá que intentar desactivarlos y cerrar las fuentes de las que se nutren los jóvenes que aspiran a ser yihadistas.
Los atentados de París han incitado al Ministerio del Interior español a desempolvar el Plan Nacional de Lucha contra la Radicalización Violenta, en el fondo islamista, que empezó a elaborar hace dos años y cuya próxima aprobación anunció hace ya siete meses, en Bruselas, el secretario de Estado de Seguridad, Francisco Martínez. Ahora sí, será adoptado en breve por el Consejo de Ministros, según vaticinó el ministro Jorge Fernández Díaz. “Es la hora de la acción”, declaró ayer en París”
Esto, de momento, solo afecta a los radicales islamistas, pero una vez instaurado el concepto y creados los mecanismos, ya podemos imaginarnos que con el paso del tiempo podrá ser extendido a otros colectivos molestos y “potencialmente violentos”, como por ejemplo, anarquistas o personas anti-sistema en general…una definición que al final podría resultar muy amplia y difusa.
Lo curioso es que la principal capacidad para denunciar este tipo de actividades recaerá principalmente en funcionarios públicos cuyo puesto de trabajo y por lo tanto su modo de subsistencia, dependerá directamente de las propias autoridades.
¿Qué sucederá si alguno de estos funcionarios se niega a ejercer de delator?
Si algun dia un joven yihadista que acude al colegio, por poner un ejemplo, realiza un atentado y sus profesores o los servicios sociales no detectaron sus actividades, ¿podrán recaer sospechas sobre ellos de que no cumplieron con su obligación o que directamente colaboraron con él por omisión?
¿Acaso a la larga eso no puede representar una gran presión para estos colectivos, que los condicione a sobreactuar, denunciando más actividades sospechosas de las reales?
¿Empezáis a ver al nivel de paranoia ciudadana al que puede conducirnos todo esto y de las graves consecuencias que puede tener para nuestras libertades?
CONCLUSIÓN
Tras todo este espectáculo de confusión, noticias contradictorias, medias verdades, olvidos oportunos y manipulación generalizada, se hace realmente difícil tener algún tipo de confianza en la información ofrecida por los medios de comunicación de masas.
Es posible que con el paso de las horas o los días, algunas de las contradicciones de los medios mostradas en este artículo queden aclaradas.
Es una posibilidad.
Pero lo que nadie podrá discutir ya es la flagrante incapacidad de los grandes medios de comunicación a la hora de contar la verdad de forma clara y fiable.
La única forma de seguir confiando en ellos, es cerrar los ojos a las evidencias e ignorar sus constantes incoherencias y falsedades…
¿Por qué la mayoría de la población sigue negándose a ver algo tan obvio?
¿Vais a seguir creyendo las mentiras que os cuentan en los medios de comunicación de masas, en las televisiones, en los periódicos o en las grandes emisoras de radio?
Las consecuencias que pueden tener estos atentados sobre la vida de miles, por no decir millones de personas pueden ser extremadamente graves y todo parece fundamentarse en una gran mentira y una inmensa manipulación.
No podemos permitir que jueguen con nosotros como si fuéramos simples títeres…
https://eccechristianus.wordpress.co...ados-de-paris/
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