Primero, jamás hay que ser tolerantes con el mal ni con la mentira (y Vd., con sus argumentos y sus ideas, los representa a ambos...). Luego, no nos hable de "falta de tolerancia", que tal cosa, en su caso, no sería otra cosa que mera complacencia... Y tal cosa es pecado, y yo ya tengo bastantes en mi lista para permitirme el lujo de sumar uno nuevo. Y creo que, por el estilo inconfundible de sus palabras, yo soy aquí, también, para Vd. uno de esos "foristas" que, por haber calificado sus palabras tantas veces de lo que verdadermente son, vulgares y zafias herejías, Vd. nos ha obsequiado con el epíteto ese, tan apropiado a su persona, de "fariseos", por lo que yo, solamente puedo decirle que, si realmente aquí no tuviéramos verdadero y puro amor por nuestro prójimo (incluídos ustedes, hermanos protestantes, apartados por vuestras herejías...) jamás hubiéramos empleado con caridad cristiana todos nuestros mejores esfuerzos y argumentos para haceros retornar a la verdadera fe, que no es otra que la fe de la Única y Verdadera Iglesia, es decir, la Iglesia que fundó Nuestro Señor Jesucristo, o dicho de otra forma, como Vd. ya debería saber, la de la Iglesia Católica Apostólica y Romana, una fe y una Iglesia que jamás debísteis abandonar.... pero ese ya es otro tema (o dicho de otra forma, ese es el tema que siempre terminamos hablamos con Vd., y Vd. con nosotros, que para eso supongo que es para lo que entra... así como, también supongo que, será principalmente por su conciencia dolorida...).
Y solo en una cosa voy a darle la razón a lo que Vd. ha dicho en su mensaje... y lo voy a hacer, aún a riesgo de equivocarme al hacerlo, y a riesgo de cometer el error de ponerme a hablar con alguien, como Vd., de esto. Ya que a Vd. los problemas de la Verdadera Iglesia debería importarle un pito (o dos pitos, con sus serenos incluídos), ya que tanto nos parece odiar. Pero, sí...... es verdad que a partir del último concilio, el enemigo se ha metido en el interior de nuestra querida Iglesia, y ha entrado tanto que hasta el S.S. el Papa Pablo VI ya lo dijo en el final de sus días; “el humo de Satanás ha entrado por alguna fisura en el templo de Dios". Pero estas cuestiones no son asunto suyo, ni de ninguno de los que formáis parte de vuestra secta herética, primero, porque habéis abandonado a la Única Verdadera Iglesia, y segundo... o mejor dicho... entre otras cosas, porque ese humo al que se refería S.S. no era otra cosa que la pérfida influencia vuestra... es decir, ese humo de Satanás no era (y es) otra cosa que la influencia de vuestra herejía protestante que se va colando lentamente en el seno de nuestra querida Iglesia de la mano, perdón... de la zarpa afilada y callosa, de las tesis "modernistas"; unas tesis heréticas a las que tanto atacó S.S. Pío X en su magnífica Encíclica "Pascendi", allá por 1907 (si mi memoria no me falla en este momento); es decir, hace ya mas de 100 años.... con lo que no venga Vd. aquí a enseñarnos el mar mediterráneo a estas alturas de la película.
Así que, de nuevo, una vez mas, y con la misma caridad cristiana con la que se lo he pedido encarecidamente siempre, le vuelvo a repetir, por activa y por pasiva, que ABANDONE LA HEREJÍA PROTESTANTE EN LA QUE S HAYA Vd. PRESO Y RETORNE A LA ÚNICA Y VERDADERA IGLESIA, porque solo la Verdad le podrá hacer a Vd. libre (y Vd. dice amar la libertad, y apela a ella demasiadas veces).
P.D.: ¡ahhh...! y solo una cosa mas... y dicho sea de paso, y siempre con todos mis respetos: ¡fariseo lo será Vd.!, si me permite el moderador decírselo..).
Un saludo y buenas tardes.
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