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Tema: “Había tantas señales de tierra…”

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  1. #1
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    Re: “Había tantas señales de tierra…”

    “Aquí la gente ya no lo podía sufrir”


    Miércoles, 10 de octubre, 1492.




    “Navegó al Oessudoeste. Anduvieron a diez millas por hora y a ratos doce y algún rato a siete, y entre día y noche cincuenta y nueve leguas. Contó a la gente cuarenta y cuatro leguas no más. Aquí la gente ya no lo podía sufrir: quejábase del largo viaje. Pero el Almirante los esforzó lo mejor que pudo, dándoles buena esperanza de los provechos que podrían haber. Y añadía que por demás era quejarse, pues que él había venido a las Indias, y que así lo había de proseguir hasta hallarlas con la ayuda de Nuestro Señor.
    Del Diario de Cristóbal Colón.
    Momento dramático tras 34 días de navegación
    hacia lo desconocido. Su objetivo era Cipango (actual Japón). En septiembre han descubierto la declinación magnética de la Tierra (que el norte magnético es diferente al norte geográfico) mediante sus instrumentos medievales (brújula, astrolabio, sonda…). Han navegado el Mar de los Sargazos, con sus temibles calmas chichas, gigantescos bosques de algas superficiales y apenas vida animal en sus regiones superiores. A partir del 1 de octubre Colón se da cuenta de que algo no va bien; había prometido a la marinería hallar tierra a las 750 leguas, que ya han superado según la contabilidad “oficial” (según la doble contabilidad que llevaba Colón, ya han superado las 1.000 leguas).

    Los 90 hombres de la tripulación de las 3 carabelas no aguantan más.
    Quedan las provisiones justas para el viaje de regreso; es preciso dar la vuelta de inmediato. Durante la noche del 6 al 7 de octubre, se produjo el primer motín entre los marineros vizcaínos de la Santa María, desactivado por los hermanos Pinzón y Colón. Pero la noche del 9 al 10 de octubre el malestar se extendió a todos, incluidos los propios hermanos Pinzón. Entonces, decidieron navegar tres días más y al cabo de este tiempo, si no encontraban tierra, volverían.


    https://www.dolcacatalunya.com/2016/...-podia-sufrir/
    Pious dio el Víctor.

  2. #2
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    Re: “Había tantas señales de tierra…”

    Hoy se cumplen 524 años de aquello


    Así nos lo explica quien lo vivió en directo.





    Del Diario de Colón, en un día para la Historia:

    “Jueves, 11 de octubre



    Navegó al Oessudoeste. Tuvieron mucha mar y más que en todo el viaje habían tenido. Vieron pardelas y un junco verde junto a la nao. Vieron los de la carabela Pinta una caña y un palo y tomaron otro palillo labrado a lo que parecía con hierro, y un pedazo de caña y otra hierba que nace en tierra, y una tablilla. Los de la carabela Niña también vieron otras señales de tierra y un palillo cargado de escaramujos. Con estas señales respiraron y alegráronse todos. Anduvieron en este día, hasta puesto el sol, veintisiete leguas.



    Después del sol puesto, navegó a su primer camino, al Oeste; andarían doce millas cada hora y hasta dos horas después de media noche andarían noventa millas, que son veintidós leguas y media.
    Y porque la carabela Pinta era más velera e iba delante del Almirante, halló tierra e hizo las señas que el Almirante había mandado. Esta tierra vio primero un marinero que se decía Rodrigo de Triana (…) cuando dijeron la Salve, que la acostumbraban decir y cantar a su manera todos los marineros y se hallan todos, rogó y amonestólos el Almirante que hiciesen buena guarda al castillo de proa, y mirasen bien por la tierra, y que al que le dijese primero que veía tierra le daría luego un jubón de seda, sin las otras mercedes que los Reyes habían prometido, que eran diez mil maravedís de juro a quien primero la viese. A las dos horas después de media noche pareció la tierra de la cual estarían dos leguas.


    Amañaron todas las velas, y quedaron con el treo, que es la vela grande sin bonetas, y pusiéronse a la corda, temporizando hasta el día viernes, que llegaron a una islita de los Lucayos, que se llamaba en lengua de indios Guanahaní. Luego vinieron gente desnuda, y el Almirante salió a tierra en la barca armada, y Martín Alonso Pinzón y Vicente Yáñez, su hermano, que era capitán de la Niña. Sacó el Almirante la bandera real y los capitanes con dos banderas de la Cruz Verde, que llevaba el Almirante en todos los navíos por seña, con una F y una Y: encima de cada letra su corona, una de un cabo de la cruz y otra de otro.


    Puestos en tierra vieron árboles muy verdes y aguas muchas y frutas de diversas maneras. El Almirante llamó a los dos capitanes y a los demás que saltaron en tierra, y a Rodrigo de Escobedo, escribano de toda el armada, y a Rodrigo Sánchez de Segovia, y dijo que le diesen por fe y testimonio cómo él por ante todos tomaba, como de hecho tomó, posesión de la dicha isla por el Rey y por la Reina sus señores, haciendo las protestaciones que se requerían, como más largo se contiene en los testimonios que allí se hicieron por escrito. Luego se ajuntó allí mucha gente de la isla.


    Esto que se sigue son palabras formales del Almirante, en su libro de su primera navegación y descubrimiento de estas Indias. «Yo -dice él-, porque nos tuviesen mucha amistad, porque conocí que era gente que mejor se libraría y convertiría a nuestra Santa Fe con amor que no por fuerza, les di a algunos de ellos unos bonetes colorados y unas cuentas de vidrio que se ponían al pescuezo, y otras cosas muchas de poco valor, con que hubieron mucho placer y quedaron tanto nuestros que era maravilla. Los cuales después venían a las barcas de los navíos adonde nos estábamos, nadando, y nos traían papagayos e hilo de algodón en ovillos y azagayas y otras cosas muchas, y nos las trocaban por otras cosas que nos les dábamos, como cuentecillas de vidrio y cascabeles. En fin, todo tomaban y daban de aquello que tenían de buena voluntad. Mas me pareció que era gente muy pobre de todo. Ellos andan todos desnudos como su madre los parió, y también las mujeres, aunque no vi más de una harto moza. Y todos los que yo vi eran todos mancebos, que ninguno vi de edad de más de treinta años: muy bien hechos, de muy hermosos cuerpos y muy buenas caras: los cabellos gruesos casi como sedas de cola de caballo, y cortos: los cabellos traen por encima de las cejas, salvo unos pocos detrás que traen largos, que jamás cortan. De ellos se pintan de prieto, y ellos son de la color de los canarios ni negros ni blancos, y de ellos se pintan de blanco, y de ellos de colorado, y de ellos de lo que hallan, y de ellos se pintan las caras, y de ellos todo el cuerpo, y de ellos solos los ojos, y de ellos sólo el nariz. Ellos no traen armas ni las conocen, porque les mostré espadas y las tomaban por el filo y se cortaban con ignorancia. No tienen algún hierro: sus azagayas son unas varas sin hierro, y algunas de ellas tienen al cabo un diente de pez, y otras de otras cosas. Ellos todos a una mano Son de buena estatura de grandeza y buenos gestos, bien hechos. Yo vi algunos que tenían señales de heridas en sus cuerpos, y les hice señas qué era aquello, y ellos me mostraron cómo allí venían gente de otras islas que estaban cerca y les querían tomar y se defendían. Y yo creí y creo que aquí vienen de tierra firme a tomarlos por cautivos. Ellos deben ser buenos servidores y de buen ingenio, que veo que muy presto dicen todo lo que les decía, y creo que ligeramente se harían cristianos; que me pareció que ninguna secta tenían. Yo, placiendo a Nuestro Señor, llevaré de aquí al tiempo de mi partida seis a Vuestras Altezas para que aprendan a hablar. Ninguna bestia de ninguna manera vi, salvo papagayos, en esta isla.» Todas son palabras del Almirante.”


    Está todo: aventura, riesgo, tenacidad, fe, valentía, legalidad, sorpresa, amistad, comercio, misión… Y sí, también violencia, porque América -malgrat les fantasies de cuperos, nacionalistes i podemites- ya conocía la guerra y la esclavitud antes del Descubrimiento. Es la historia de la Humanidad condensada en un momento mágico, hace 524 años. Val la pena de compartir amb la família i els amics.


    https://www.dolcacatalunya.com/2016/...24-anys-daixo/
    Pious dio el Víctor.

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