Bueno, hombre, el dinero no tiene patria. Además, se llevan sueldos, pero a cambio dan una prestación: su trabajo. Nadie pierde. El empresario paga sueldos a cambio de trabajo. Y, en cualquier caso, mientras están aquí comen, visten y duermen. Dejan dinero.
En Europa, tenemos muy anclada una visión mercantilista de la economía. Parece que la economía nacional es un todo que, además, descansa sobre el dinero. Se confunde dinero con riqueza.
Me estoy refiriendo sólo al aspecto económico de la inmigración. Conste.
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