
Iniciado por
fonch
Gracias Erasmus es verdad, que se me quedaron muchas cosas en el tintero, pero quise hacer un análisis deportivo diferente no dominado por la corrección política hemos ganado, que buenos somos. El mundial es sólo una gota de agua en un desierto tan abrasador como el Sahara, el Gobi, o el de la Muerte. Está bien esta victoria, pero es necesario una reforma y un cambio en esta crisis, que no es sólo económica, también es moral. Está bien la fiesta, pero es necesario celebrar macrobotellanos, es decir le negamos trabajo a los jovenes, pero les abrimos más bares, les ofrecemos más droga, los embrutecemos, les decimos que pueden fornicar, ni copular todo lo que quieran sin temor a las consecuencias (hay mucho más interes por supuesto en que no haya embarazos, que en prevenir, la sifilis, la gonorrea, la hepatitis, el papiloma este ni con preservativo se evita, y el SIDA). El resultado es una generació de esclavos y analfabetos dociles al poder y víctimas del matadero.
Por cierto, que nadie se engañe, esto de la españolidad un engaño, los catalanes han apoyado a la selección, porque había catalanes, sino creanme sin apoyos. A parte algo restremecedor, aquí solo está la gente cuando se gana, nadie recuerda a los perdedores y muchos se han subido al carro de los éxitos. Por cierto alguien se acuerda de las críticas imnfames, que se lanzaron contra la selección cuando estuvo un tris de no clasificarse. En este país, sólo nos gusta hacer leña del árbol caído y cuando las cosas van mal enzarzarnos con el vecino, porque las catastrofes necesitan de chivos expiatorios y así nos va. En lugar de progresar cada día más encanallados, siendo para mí el mayor problema la eliminación de nuestros hijos y el invierno demográfico, que atravesamos. Por cierto que escribí este artículo, porqarzaue sabía que aquí sería apreciado, y porque la gente no lo iba a aceptar. Es mucho más fácil oir lisonjas, halagos y cosas agradables, que la cruda realidad. Si este país en lugar de a estos cantamañanas escuchara a los auténticos profetas Juan Manuel de Prada, Enrique de Diego, José Javier Esparza, Agapito García Maestre y si señores digo Arturo Pérez Reverte (un hombre anticlerical, pero que dice verdades como puños y que ama mucho a este país. Uno que no se ha afiliado a la España de la mamandurria y los privilegios y un hombre, que por lo menos sabe lo que es la guerra porque la ha vivido, un hombre honesto y cuanto bien está haciendo). Les prometo, que mis próximas intervenciones serán más alegreshablaré de Sneijder y del mercado de fichajes. Nos vemos
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