Weishaupt se hacía llamar, en su caverna satanista, con el alias "Spartakus"... En la fase de entreguerras (en la "tregua" que medió entre la I Guerra Mundial y la II Guerra Mundial), el movimiento comunista alemán se llamó "spartakista" por este pajarraco que tenía que haber ardido en una hoguera de la Inquisición.
Espeluznantes son los datos que arrojan sus actuales seguidores: entre ellos López de Rojas, un luciferino que ha montado un chollo con este rollo. Y que es instigador de muchos atentados contra iglesias en Cataluña.
El tal "heredero" iluminati se hace llamar López de Rojas (un psicópata poseído) iluminati y "rojista". Y vive en Carcasona (Francia), sin que nadie le moleste. Entre sus discípulos hay muchos cantantes de grupos españoles (gente del antiguo Duncan Dhu, no el cantante, creo que un instrumentalista), y hasta atletas olímpicas de cierto renombre.
Waishaupt, López de Rojas, Rojos, Rojistas...
Por algo será que nuestros abuelos nos decían que los rojos tenían rabo y cuernos. Cuernos se los ponen sus mujeres, y rabo lo traen del infierno al que pertenecen.
Hogueras es lo que hace falta!
Viva la INQUISICIÓN!
Y el Angel Exterminador, que también existe.
La masonería se encontrará un día como los padres del faraónico Egipto: se levantarán, verán a sus lobeznos degollados, y no sabrán quién degolló a sus primogénitos. Fue el Ángel Exterminador de Dios.
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