Lo más patético de todo esto es que dentro de muy poco, nuestros hijos vendrán de clase y nos dirán:
-¡Papá: hoy he sacado un cinco en lengua y un diez en que me den por culo! (con el respeto y perdón de la expresión) pero es que no sé como decir o como calificar a esa asignatura de educación sexual en la que se les enseña el sexo anal (¿?) entre otras lindezas.
Asco de políticos que tenemos por gobernantes..., y muhco más asco la caterva de educadores que tenemos en los colegios e institutos y que en muchos casos padecen nuestros hijos, pues "flojos" ellos y sin capacidad de reacción, consienten todo con pasividad y sin manifestarse en contra..., mientras que sus homólogos de izquierdas o revolucionarios de ultra-izquierda, utilizan las aulas para experimentos sociológicos y políticos de toda clase y condición. Mucha culpa es de ellos y su pasmosa pasividad; y es que parece que una vez conseguidas las oposciones han dejdo de luchar por la más mínima decencia escolar..., sólo se conforman con la nómina de por vida..., lo demás, como si no les afectara...
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