A mí que la gente fume cerca mío, mientras no me eche el humo, me da igual. Ahora bien, realmente hay sitios donde yo me ahogo y me pican los ojos. Por no mencionar la mala educación de llenarle a alguien la comida de humo. Seguro que si el de la mesa de al lado fuma y me viene toda la humareda, y yo me levanto y suelto uno de esos pedos silenciosos y tremendamente malolientes en su comida, no le hace ninguna gracia. Y tampoco es plan de llenarle los pulmones de mierda a los demás, dicho sea de paso.
Y no, no estoy por prohibir, sólo estoy por el sentido común, por tenernos entre todos un poco de respeto; sí, se lo que estáis pensando: eso es pedir demasiado.