Re: El Gobierno propone penas de cárcel para quienes ensalcen a Franco
Si, en efecto, con Franco hubo unos cuantos que terminaron en la cárcel ¿y dónde si no habían de estar quienes procuraron el asesinato de miles de españoles en las checas, en los conventos convertidos en cárceles, en los paseíllos al amanecer después de pasar por eso que llamaban "tribunales populares", o después de asesinar a hombres de Estado como José Antonio Primo de Rivera o Calvo Sotelo?
Además, fueron los nacionales los que bajo el mando de Franco ganaron la guerra que éstos de hoy, muchos descendientes de los propios vencedores, pretenden cambiar los hechos. Fueron sus antepasados ideológicos los que con su barbarie y criminalidad provocaron esa guerra. Si no llega a ser por semejante exhibición de crueldad y del horror genocida que procuraron, hoy seguiríamos viviendo esa II República, por más que algunos jamás la aceptásemos.
Por tanto, ni las circunstancias actuales de hoy son las mismas, ni los protagonistas tampoco. Además, guste o no, se quiera o no, se supone que vivimos en un presunto Estado de derecho en el que no hay más límites a la libertad de expresión que la incitación a la violencia, algo que si se está haciendo abiertamente en Cataluña. No se tapan los agujeros de los coladores, no se ponen puertas al campo, y menos ante la realidad que suponen los actuales medios de comunicación. No se puede encarcelar el alma humana, ni se pueden destruir las ideas. Pero si se pueden enconar las cosas hasta volver a repetir la historia y cuando vuelvan a correr ríos de sangre, los culpables serán los mismos que entonces, sólo habrán cambiado sus nombres y sus caras, pero su alma será la misma, la del esclavo de Satán.
Última edición por Valmadian; 26/10/2018 a las 17:56
"He ahí la tragedia. Europa hechura de Cristo, está desenfocada con relación a Cristo. Su problema es específicamente teológico, por más que queramos disimularlo. La llamada interna y milenaria del alma europea choca con una realidad artificial anticristiana. El europeo se siente a disgusto, se siente angustiado. Adivina y presiente en esa angustia el problema del ser o no ser.
<<He ahí la tragedia. España hechura de Cristo, está desenfocada con relación a Cristo. Su problema es específicamente teológico, por más que queramos disimularlo. La llamada interna y milenaria del alma española choca con una realidad artificial anticristiana. El español se siente a disgusto, se siente angustiado. Adivina y presiente en esa angustia el problema del ser o no ser.>>
Hemos superado el racionalismo, frío y estéril, por el tormentoso irracionalismo y han caído por tierra los tres grandes dogmas de un insobornable europeísmo: las eternas verdades del cristianismo, los valores morales del humanismo y la potencialidad histórica de la cultura europea, es decir, de la cultura, pues hoy por hoy no existe más cultura que la nuestra.
Ante tamaña destrucción quedan libres las fuerzas irracionales del instinto y del bruto deseo. El terreno está preparado para que germinen los misticismos comunitarios, los colectivismos de cualquier signo, irrefrenable tentación para el desilusionado europeo."
En la hora crepuscular de Europa José Mª Alejandro, S.J. Colec. "Historia y Filosofía de la Ciencia". ESPASA CALPE, Madrid 1958, pág., 47
Nada sin Dios
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