Tema: Los Gritos del Fracaso

Los Gritos del Fracaso


Por: Vasco da Costa
Pensador Político
Presidente del Foro de Caracas


He afirmado en diversas oportunidades que el tirano de Venezuela es un psicópata criminal, afirmación que ha dado la sensación a “algunos” que mi intención es la de ofender a Hugo Chávez, cuando en realidad mi costumbre no es ofender a nadie, a diferencia de los encumbrados usos del opresor revolucionario, con esa afirmación simplemente pretendo definirlo. Siendo que el desenvolver de los acontecimientos me ha dado la razón.
Asevero esto no solo por haber sido torturado en el Helicoide por la policía política el 10 de mayo de 2004 y ser precipitado en las mazmorras de la DISIP por el simple hecho de pensar diferente al régimen, decir lo que pienso, escribir lo que digo y firmar lo que escribo, además de sufrir un proceso injusto, sin el respeto al debido proceso a que tengo derecho y siendo confinado en una cárcel militar para ser procesado por una Corte Marcial, siendo civil. La verdad es que los sucesos ocurridos a través del desenvolver del proceso revolucionario nos muestran de forma clara y contundente que estamos en presencia de delincuentes enquistados en el poder en Venezuela y que ellos están absolutamente desequilibrados.
La revolución bolivariana pretende simplemente ejecutar los viejos planes del Chacal del Caribe, Fidel Castro, que sistematizados por el Foro de Sao Paulo se pueden vislumbrar a través de la edificación de uno o mas Vietnam en América, antiguo sueño para la aplicación de la “lucha de clases” entre naciones hermanas, para dividirlas primero y crear los conflictos subversivos regionales después y así poder llegar a su tan anhelada unión socialista sudamericana, dentro de la doctrina de “los cuatro polos” mundiales, para después enfrentar al “Imperio”.
Estos planes macabros, edificados por lo más perverso de la izquierda internacional, serían la salvación del socialismo que llamado ahora del siglo XXI no es otra cosa sino la aplicación del viejo y perverso marxismo en toda su esencia. Entendemos, pues, lo desquiciado de las reacciones de los actores que llevan adelante la revolución bolivariana, porque como van están transformando a esta revolución en el sarcófago del socialismo. Es tal vez por esto que comenzamos a oír desde lo más profundo de las cavernas de la izquierda, sea cual sea la máscara con que escondan su pensamiento comunista, los ecos de los gritos de su fracaso, gritos que en el caso de las FARC y del propio Hugo Chávez son verdaderos chillidos, estruendosos chillidos de quien naufragando no acepta la reacción de unos pueblos que nunca van a someterse al comunismo.

Vamos algunos hechos y sus reacciones:

1. La ejemplar callada de boca que le mandó el Rey de España al tirano de Venezuela, por la impertinencia de la prepotencia revolucionaria, en Chile. La reacción fue el desquiciamiento psíquico, físico y hasta motor del pseudo líder y el entrar a la deriva en las relaciones internacionales.
2. La pérdida del plebiscito con forma de referéndum el 2 de diciembre de 2007. La reacción fue presentarse en cadena nacional de TV, después de que fueron dados los resultados por el ente electoral, totalmente desencajado, mostrándose a la nación con la cara hinchada, las manos destrozadas, mirada vaga y esquiva, confesando sus crímenes frente a toda la nación, como por ejemplo que solo dejó que se dieran los resultados “después de arreglar su dilema personal”. Al día siguiente apareció el tirano de improviso frente a las cámaras de TV, durante una rueda de prensa que daba el Alto Mando Militar a la nación para desmentir los rumores de que los militares le habían dado una paliza, a Chávez, para que aceptase los resultados populares y que hasta lo habían amarrado y que le había dado un ataque que destrozó una cantidad de cosas con las manos, etc., Chávez comenzó a decir sandeces en TV, parecía un pobre loquito, insultó a toda la nación con palabras soeces e irrepetibles y después se fue.
3. El rescate de rehenes colombianos de las manos de las FARC. La reacción a esto fue una verdadera novela, queriendo darse ínfulas de grandeza, se trajo a unos pobres señores, que prefiero no nombrar por respeto al ser ellos renombrados en sus lugares, dejándolos en el ridículo de ser falderos de un tirano disfrazado de militar y haciendo una ceremonia para no concretar nada, a no ser la angustia de los pueblos. Después se tuvo que ir todo el mundo y arremetió como demente contra el gobierno de Colombia y contra no se bien que conspiración internacional, Mintió al mundo al no tener en manos de sus socios de las FARC al niño Enmanuel, por fin días después entregan la parte de rehenes prometidos que tenían y continúa con los improperios y descalificaciones por no haber conseguido su deseada zona de despeje. Por fin, se lanza contra el gobierno de Colombia para ver si logra la zona de despeje y respiro para las FARC, las cuales sin un mando unificado y acorraladas por el ejercito colombiano están a punto de ser aniquiladas, lo que desbarataría el pretendido plan del Vietnam bolivariano en Colombia y le quitaría a Chávez una parte sustancial de la milicia que ha pretendido hacer en el continente para defenderse de las Fuerzas Armadas institucionales de nuestros países y hacer ese tal macabro circo de la espada de Bolívar dando vueltas por América Latina
4. Hace un llamado al mundo para que le den estatus de beligerancia a las FARC y las saquen de las listas de terroristas. La reacción a esto es el desequilibrio mental total, llama criminales a los gobiernos legítimos de Colombia y USA, dice que las FARC no son terroristas sino bolivarianos en lucha legítima, muestra la identidad entre él y su revolución con las FARC y en un acto esquizofrénico de auto destrucción, confiesa sus intenciones criminales subversivas.
5. Hace una amnistía que no saca a casi nadie. La reacción frente este hecho que el mismo creo toca en lo absurdo, es para que se asusten hasta los locos del manicomio, afirma que los presos políticos venezolanos son “terrorista” por el simple hecho que están contra él, a los procesados los juzga él, sumariamente, desde el ejecutivo, afirmando que sí cometieron delitos contra los Derechos Humanos y por eso la ley no les toca, se ensaña contra aquellos que no cometiendo ningún tipo de delito, por el contrario, los persigue por haber cumplido su deber de forma eximia cuando la revolución bolivariana atacó al pueblo que protestaba haciendo un baño de sangre, casos como los de el General Felipe Rodríguez y los comisarios Simonovis, Vivas o Forero, son relevantes. Afirma que todos los presos políticos son terroristas cuando el sigue utilizando sistemáticamente el terror, el asesinato selectivo, la tortura y la implementació n de mazmorras inhumanas para tratar de callar a quien no piensa como él.

De todo esto nos queda que la revolución bolivariana necesita, para poder subsistir, continuar con la represión y crear una zona de despeje en Colombia para junto a las FARC comenzar la toma violenta del continente, esto por haber fallado el plan de poder crear la “zona de despeje” en Venezuela, a través del intento de golpe constitucional que hubo, el cual le hubiese dado al tirano esa capacidad, por medio de lo que él llamó “la nueva geometría del poder”, que no era otra cosa que la capacidad de poder crear zonas subversivas en nuestro país sin ningún tipo de ley o control. Por otro lado, con todo esto, ha quedado evidente que las FARC están acorraladas militarmente y que Chávez está desesperado por el futuro de sus aliados terroristas. Si el ejército colombiano aplastase al narco terror, entonces a la revolución bolivariana no le quedaría otro camino que intentar hacer su Vietnam en Bolivia o Ecuador.
Mientras tanto dentro de Venezuela el tirano sigue con su “dilema”, ahora ha nombrado como ministro de interior y justicia a una de sus piezas claves en las FARC, grita por todos lados sus fracasos maldiciendo y culpando a los que le sirven, además insulta a la Santa Iglesia Católica, se pone como desaforado contra nuestros vecinos, exige que no se llame terroristas a los criminales de las FARC, denigra del pueblo y sus instituciones, hostiga nuestras costumbres, violenta la ley y pretende imponer un sistema socialista que nadie quiere y que le produce asco a la nación.

Chávez y sus aliados de las FARC y de Cuba chillan de rabia y dolor por sus fracasos.
El pueblo de Venezuela nunca se dejará destruir por la bota del tirano.
Y bajo la protección de Nuestra Señora de Coromoto, Reina y Patrona de Venezuela, nunca seremos comunistas.

Cumplo con informar a los usuarios de este prestigioso foro, que el autor del artículo de arriba, Vasco Da Costa, es ahorita prisionero del regimen narco-bolivariano de Venezuela, se encuentra detenido bajo falsas acusaciones de terrorismo.