El edificio del Punt de Gantxo mostrará restos del circo romano de Valencia

La concejalía de Cultura va a reabrir la sala de muestras temporales del edificio del Punt de Gantxo, situada junto a la Basílica y el Palacio Arzobispal, con una exposición con restos y varias propuestas inéditas del circo romano de Valencia, datado en la primera mitad del siglo II a. C.
Este proyecto ambicioso se comenzará a montar en breve y a finales de este mes o principios de diciembre abrirá sus puertas al público. En principio, según explicaron fuentes de Cultura, el objetivo es que el acceso del público visitante al recinto se realice por la misma instalación museística de la Almoina, no por la puerta principal del emblemático edificio del Punt de Gantxo, como sí sucedió en la última muestra expuesta, que no duró mucho tiempo por la falta de personal y presupuesto.
Entonces, la exposición temporal con los hallazgos rescatados de un solar de la calle Ruaya, concretamente un santuario de época púnica (siglos III y IV) y, por tanto, anterior a la fundación romana de Valencia en el 138 a.d.C., duró menos de un mes, aunque se diseñó para ser visitable hasta julio.
Ahora el consistorio prevé que con la entrada por la Almoina se pueda atender la nueva muestra de los orígenes de Valencia con el personal propio del lugar y algunos empleados más de refuerzo.
Cabe recordar que la concejala de Cultura, Mayrén Beneyto, indicó hace meses que pretendían convertir esta sala del Punt de Gantxo en una prolongación del museo de la Almoina. A partir de ahora se irán montando exposiciones relacionadas con arqueología.
La importante apuesta municipal por mostrar las raíces romanas en el Punt de Gantxo tendrá como consecuencia inevitable el cambio de ubicación del tradicional Nacimiento que la Asociación de Belenistas de Valencia realizaba en esta misma sala expositiva. Según su presidenta, Carmen Cháfer, «veníamos exponiendo el belén en el Punt de Gantxo desde hace siete años y la verdad es que era un punto muy bueno, porque está muy céntrico y la gente se había acostumbrado a visitarlo. Cada año pasaban por aquí más de 20.000 personas». Cháfer comenta que ya en verano le advirtieron que este año no podrían continuar allí porque se iba a montar un espacio arqueológico.
La entidad de belenistas comentó que es una pena, «porque hemos estado allí muy a gusto y ahora invitamos a la gente a que venga a visitarnos a la nueva ubicación, que será el precioso claustro de la Universidad Católica, en la calle Quevedo, donde hace años ya estuvimos», añaden.
En la exposición que los arqueólogos municipales están preparando se podrán conocer los restos del circo romano que existía en la actual plaza de Nápoles y Sicilia «y que llegaba hasta lo que hoy es la Escuela del Patriarca. Era tan grande que, haciendo una comparativa, equivaldría a tres campos de fútbol», detalla Albert Ribera, jefe del Servicio de Investigación Arqueológica Municipal de Valencia (SIAM).
Reconstrucción virtual
En esta muestra se podrán contemplar planos, paneles «y por primera vez unas reconstrucciones virtuales que hemos preparado. Todo esto es el fruto de 20 años de investigación y de divulgación científica», añade Ribera.
La exposición incluirá fotografías de los restos que hoy día todavía persisten en edificios, la mayoría de ellos de tipo hostelero y que han respetado la construcción, como un muro situado entre la calle del Mar y Comedias, otro que se encuentra debajo de la cripta de San Juan del Hospital o las tres piezas que coronaban la vuelta del circo, que están en el hotel Marqués de Caro.

También se pondrán en valor restos como arquitrabes de antiguas columnas del circo, cerámicas bizantinas encontradas en épocas posteriores o piezas metálicas de uno de los carros que compitió en el circo.

La túnica de Neso | Departamento de Latín IES La Senda Quart de Poblet