Valencia, 9 octubre 2008. Un joven socio del Círculo Cultural Aparisi y Guijarro nos hace llegar la siguiente crónica. El PPSOE, como siempre.
EL PP Y LOS PANCATALANISTAS HUMILLAN AL PUEBLO VALENCIANO
El nueve de octubre, día de la liberación de Valencia por el Rey Don Jaime, en lo que fue el acto más trascendente para la fundación del Reino de Valencia, el pueblo valenciano conmemora desde siglos dicha fecha, que signa su identidad católica e hispánica. En el ceremonial, dotado de un enorme contenido simbólico, tiene un papel destacado la bandera del Reino de Valencia, la Reial Senyera, que desciende del Ayuntamiento de Valencia en horizontal pues por su carácter real no se inclina ante nada ni ante nadie, a excepción del Santísimo Sacramento.
El nacionalismo catalán ha tenido siempre un particular odio a todo cuanto representa esta fecha y año tras año no cesa en sus provocaciones. En la década de 1970 la Comunión Tradicionalista fue el germen del movimiento valencianista que se enfrentó en las calles al nacionalismo y aplastó a sus escasos apoyos en el Reino de Valencia. En el día de hoy los separatistas han vuelto a irrumpir en el acto del nueve de octubre, desplegando una enorme bandera "estrellada" desde la sede la llamada "Intersindical Valenciana" sindicato ultrapolitizado que nuevamente recibe todas las subvenciones de todos los gobiernos del PP. Los políticos del PP y del PSOE pretendían que la Reial Senyera (que no se inclina ante nada ni ante nadie, si no es ante el Santísimo) procesionase por debajo de esa bandera separatista masónica y antiespañola. La policía impedía que los valencianos descargasen su ira contra los provocadores, protegiendo con un enorme control de antidisturbios el edificio desde el que se insultaba al Reino de Valencia y a España. Sin embargo la rápida actuación de los jóvenes valencianistas, entre los que había varios carlistas, cortando la calle con vallas y realizando una sentada ha permitido que la marcha se interrumpiese, forzando a los políticos a hacer intervenir a la policía a su servicio, que pactó con los provocadores nacionalistas el replegar la bandera así como su protección. Un episodio más de vergonzosa claudicación del PP ante el nacionalismo pancatalanista y antivalenciano, al que regala la Universidad de Valencia y la total impunidad de sus actuaciones.
_____________________________________________________
Agencia FARO
Marcadores