Los vecinos que sustentan lo que conocemos como " el Kiosko de Rosarito ", allá por el Prado, por la Carretera de Bormujos, que actualmente se llama " Avenida de la Constitución ", han decorado su fachada con Reyes Magos grandes. Se ve a Papá Noel subiendo y de fondo un tiburón que se lo va a comer. Parece que va a ser atizado. Suscribo totalmente este tipo de iniciativas. Y que conste que el marido de la señora en cuestión ( De la hija de Rosarito ) es camionero alemán. Ya me habían hablado en Sevilla de iniciativas similares de comerciantes austriacos. ¡ Hurra ! Y qué viva este pueblo que aún celebra por todo lo alto la Festividad de los Reyes Magos.
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