EN EL DÉDALO DE LAS TRES CULTURAS: ROGER GARAUDY
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<DIV>ALCALDES COMUNISTAS QUE CEDEN LO QUE NO LES PERTENECE
Dedicado a ti, con quien hablé de todo esto en el curso de tu visita inolvidable.
La mayor parte de los españoles –reducidos al papel de consumidores pasivos- reciben consignas a diario. Una de ellas es esa mentira llamada “Tres Culturas”, un mito falsario que amenaza con imponerse como versión oficial de la Historia medieval de España. En el laberinto ideológico que alrededor de ese mito triculturalista se ha levantado, es clave un personaje poco conocido: Roger Garaudy.
Roger Garaudy nació en 1913. Muy joven militó en Acción Católica. En 1933 ingresó en el Partido Comunista Francés. Estudió en la Sorbona de París y se doctoró en Filosofía. Se doctoró también por la Universidad de Moscú en 1953 y formó parte de los comités Central y Ejecutivo del Partido Comunista Francés, desde 1945 y 1956 hasta 1970 en que, por divergencias surgidas por su posición ante el Mayo del 68, el Partido lo expulsa. Sin las contribuciones ideológicas de Garaudy no puede entenderse la Teología de la Liberación: él fue, junto a Helder Cámara, Ignacio Ellacuría, Jon Sobrino y otros pseudoteólogos, el artífice de esa gran infiltración de la Iglesia católica. Entre los términos que acuñó Garaudy figura el vocablo "constantinismo", con el que se refiere a la Iglesia católica tradicional (se supone, por parte de estos enemigos de la Iglesia, que desde el Edicto de Milán la Iglesia Católica pactó con el poder imperial, perdiendo toda autoridad divina). Para subvertir el edificio jerárquico de la Iglesia, los marxistas infiltrados crearon términos como “comunidades de base” que, opuestos antitéticamente a jerarquía eclesiástica, servían a sus intereses revolucionarios. Los diálogos de Roger Garaudy con Helder Cámara iniciaron esa engañifa que se llamó el diálogo cristiano-marxista, diálogo que ha sido más provechoso para los marxistas que para los cristianos; pues a cuenta de ello muchos sacerdotes católicos colgaron la sotana, mientras que pocos han sido los marxistas que han abandonado a Marx para abrazar el Evangelio -como bien apunta D. Ricardo de la Cierva.
Garaudy se convirtió al Islam en 1982, tras casarse con la palestina Salma Farouqui. En 1998, Garaudy fue condenado por el Tribunal Correccional de París por un delito de "negación de crimen contra la humanidad" y "difamación racial", incluso fue motejado de "revisionista" por su libro "Los mitos fundadores del Estado de Israel", un libro por lo demás muy recomendable.
Cuando las cosas se le pusieron feas en Francia, Garaudy se viene a España. Por ese entonces, Julio Anguita es alcalde de Córdoba, y es éste el que le abre las puertas de par en par. Así nos lo cuenta Garaudy en su autobiografía, "Mi vuelta al siglo en solitario":
"Su alcalde [de Córdoba], Julio Anguita, un convencido de mi proyecto de hacer revivir este pasado para iluminar el porvenir, me ofrece instalar nuestro centro en la torre Calahorra, fortaleza al borde del Guadalquivir" (Mi vuelta al siglo en solitario)
"El sucesor en la alcaldía nos cede -prosigue Garaudy- la torre por 49 años a cambio de exponer en ella la evocación del apogeo de Córdoba." (op. cit.)
PROMETEO Y GARAUDY
Desde joven, confiesa Garaudy, Prometeo es una figura que le ha cautivado siempre. Desde su mocedad Garaudy ha sentido afición por la pintura, nos cuenta en su autobiografía que, en plena realización del boceto de un "Cristo", pasó algo: "Es entonces –escribe él- cuando empieza la metamorfosis: para recordar la técnica de trabajo de los músculos busco en mis carpetas un estudio que hice antes de conocer a Milaine sobre el tema de Prometeo: el Heracles de Bourdelle"; Garaudy entiende que Cristo tiene que bajar de la Cruz y convertirse en Prometeo, lo cual, además de ser una blasfemia, es una peculiar "iluminación" -no descartemos la comunicación con las fuerzas infernales. Garaudy llegará a hablar incluso de un "partido prometeico". En el epígrafe "Fines últimos y penúltimos: ¿Prometeo o Jesús?", perteneciente a su libro "¿Hacia una guerra de religión? El debate del siglo", Garaudy le llega a escribir a su amigo Helder Cámara: "Sí, querido Dom Helder Cámara, nuestro pacto será mantenido por ootros y después de nosotros: la fecundación recíproca de un marxismo vivo, es decir, sin dogmatismos, y de una fe viva, es decir, sin credulidad, sigue siendo, gracias a las teologías de la liberación, la gran esperanza de la humanidad."
Garaudy aseguraba haber entrado en el Islam "con El Capital debajo de un brazo y la Biblia debajo del otro". Es cierto, no engaña a nadie: si salió del marxismo no fue por otro motivo que por la inflexibilidad del Partido Comunista Francés, apegado y aferrado a sus dogmas marxistas soviéticos. Pero como Lenin, como Gramsci... Garaudy es un marxista de pies a cabeza.
Al ser un error filosófico, el marxismo sólo puede avanzar gracias a sus heterodoxos, a sus propios herejes como fueron los que cito arriba: Lenin y Gramsci, o éste francés de Marsella. El gran descubrimiento de Garaudy se cifra en la ocurrencia de convertir las religiones en poderosos motores revolucionarios marxistas: así lo hizo con Helder Cámara y la Teología de la Liberación, así lo está haciendo ahora con el Islam. Por sus estudios de la filosofía y la pseudo-mística islámica, Garaudy tampoco es ajeno a la gnosis musulmana.
"El sucesor en la alcaldía nos cede -escribe Garaudy- la torre por 49 años a cambio de exponer en ella la evocación del apogeo de Córdoba".
La cesión de la Torre de la Calahorra cordobesa es una burla a todos los cordobeses. Nuestros antepasados murieron derramando su sangre en las murallas de Córdoba, para reconquistarla. Políticos traidores a España, votados por españoles inconscientes, ceden lo que nuestros ancestros reconquistaron con tanto esfuerzo y sacrificio.
Esperemos que una juventud cordobesa, fuerte y patriótica, reclame al Ayuntamiento de ocupación lo que es nuestro pasado, y no estamos dispuestos a que deje de ser nuestro futuro. Pues la Torre de la Calahorra no es de Julio Anguita ni de Garaudy... Es de los cordobeses, los descendientes de los reconquistadores.
¡CÓRDOBA, DESPIERTA!
DESPIERTA, CÓRDOBA ROMANA Y CATÓLICA, Y COMBATE POR DIOS, LA PATRIA Y EL REY
Maestro Gelimer
http://librodehorasyhoradelibros.blogspot.com/
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