Hombre, don Avellaneda, sus objeciones me sorprenden un poco. En primer lugar, el artículo de J.A. Gallego es forzosamente breve, para un medio electrónico; no pretende ser exhaustivo. Proporciona, en cambio, una buena introducción a la figura del Cura Mariscal don Jerónimo Merino.
En segundo lugar, la completa continuidad de la llamada Guerra de la Independencia, las guerras realistas y las guerras carlistas ya ha sido destacada en otros hilos de este mismo foro:
Homenaje a Vicent Doménech “El Palleter”
Bicentenario del 2 de mayo
Por razones cronológicas, y por el nombre mismo del Rey, sería inexacto decir que la guerra contra Napoleón fue una guerra carlista. Sí puede decirse que los españoles se alzaron en 1808 por los mismos principios y los mismos motivos que en 1833. Y que supervivientes del primer alzamiento (y muchos también de los llamados Cien Mil Hijos de San Luis, como usted apunta) fueron luego destacados carlistas: el Cura Merino, Agustina de Aragón, el propio Tomás de Zumalacárregui... La presencia de liberales entre los patriotas de 1808 era insignificante, y su labor fue más la conspiratoria que la guerrera.
Si se entiende lo que es el Carlismo, que no es sino la resistencia de la España tradicional, se ve bien esa continuidad de los alzamientos por Dios y por el Rey de los españoles del siglo XIX.
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