Parece que algunos no se dan cuenta de que sacando el Hispanismo Americano fuera de su sitio y contexto, España no sería el único ni el primer caso de una nación absorbida por su Imperio. Aunque en el caso de España esto sería aún más grave si tenemos en cuenta que seríamos absorbidos por un Imperio que no existe desde hace ya bastante tiempo.

Por supuesto que siempre será preferible a acabar absorbidos por la aberrante mundalización multiculturalista y multirracialista, pero no pasará de ser un pseudo-patrioterismo, y nosotros tenemos el deber de aspirar siempre a lo más alto, que es lo que los antepasados llamaron la Recuperatio Hispaniae.

No niego la españolidad de hombres como Pablo Victoria, el autor del libro El día que España venció a Inglaterra, porque ni se la querría negar ni aunque quisiera tendría ningún derecho a hacerlo. A hombres como a él les pertenece por derecho propio como a pocos.

Hoy lo he dicho en otro foro ante una acusación de favorecer a un hispano-americano mientras paso por encima de los anglo-americanos, y lo repito aquí: si existieran diez millones de hombres como Pablo Victoria en Las Américas, les rogaría que viniesen a sustituir a otros diez millones de españoles que no se merecen serlo. Sin dudarlo.

Pero no nos engañemos. Esos españoles de las Américas son uno entre millones.

Al resto, con todos mis respetos, los españoles fueron allí a conquistar y no a ser conquistados.