Cronista catalán del siglo XIV sobre los reinos españoles: «Els reys d’Espanya son una carn e una sang»

20 de agosto de 2023 • ( 2 )


Sí, els catalans sempre hem sabut que Espanya és una unitat.

El padre Santiago Cantera es prior del monasterio benedictino del Valle de los Caídos, en Cuelgamuros, al norte de Madrid, por cuya fundación tanto se interesó el abad Escarré de Montserrat abans de caure en el catalanisme. De fet, la pedra de l’altar és un disseny fet a Montserrat, y en el mosaico de la cúpula se puede ver el escudo del monasterio catalán, hoy furiosamente nacionalista.

Cantera, siguiendo la tradición cultural de su orden, es un pensador de primera y ha publicado numerosas investigaciones académicas y estudios divulgativos. El último se llama Luces de la Hispanidad, y está escrito para «enamorarse de la verdadera tradición hispánica y católica de Hispanoamérica».



En su primera parte, el dr. Cantera amigaja uno de los tópicos de los historiadores nacionalistas y algunos liberales, según los cuales España no habría existido hasta las Cortes de Cádiz:

«Regnum Hispaniae, Reges Hispanici, Reges Hispaniae (…) En la Edad Media se habla de España, y este vocablo no se reduce a un simple valor geográfico (…) la idea medieval de España hace referencia a una comunidad de identidad histórica, religiosa y cultural que en un pasado (la época visigótica) había estado unida también políticamente, pero que luego perdió este último aspecto y no se aspira a recuperarlo de una manera plenamente intencionada. Es decir, los distintos reyes hispanos o españoles y sus reinos son legítimos y no se piensa en acabar con ellos, pero sí existe entre ellos una solidaridad asentada sobre esa unidad histórico-religioso-cultural que hemos señalado (…) la ‘divisio regnorum’ es un sistema, si no querido, por lo menos aceptado (…) con la conservación de una conciencia de unidad del que concomitantemente se llama Regnum Hispaniae (…) Durante siglos nadie piensa, o tal vez muy pocos, en reunir los reinos hispánicos, en restablecer efectivamente la ‘Monarquía hispánica’; pero esta situación de división de reinos no resulta incompatible con el sentimiento de comunidad de los hispanos y con el concepto de Hispania (…)


Así, por lo tanto, estos reyes forman un grupo claramente definido y fijo: los reyes de España (…) Maravall indica cómo la expresión aparece en diplomas reales, crónicas y textos literarios, tanto pontificios y del extranjero, como de toda España: Castilla, Cataluña, Navarra… y es conocida por los mismos reyes».


El dr. Cantera recorda llavors l’expressió del cronista català Muntaner, referint-se als reis d’Espanya:

«Si aquests quatre reis que ell nomenà, d’Espanya, qui son una carn e una sang, se tenguessen ensems, poc dubtaren e prearen tot l’altre poder del mon».



Y después cita la exhortación de los embajadores del rey Alfonso V de Aragón, Juan de Híjar y mosén Berenguer Mercader dirigida al rey Juan II de Castilla para que trabajara por la unidad de la Iglesia junto al rey de Aragón y los monarcas de Navarra y Portugal, de modo que «així unida tota Spanya o pur la major part», otros príncipes cristianos se adhieran y les sigan, y de esta concordia obtendrán «gran merit davant Deu, gran gloria en tot lo mon, e seria gran honor de tota la naçió de Spanya«.

Efectivamente, los españoles tenían conciencia de ser una sola nación. En el concilio de Constanza de 1414, por ejemplo, los 4 reinos españoles habían actuado on un voto único como «nación», con la «conciencia de ser una entidad que, en su comunidad, era distinta de las otras cuatro ‘naciones’ con voto, a saber, Italia, Alemania, Francia e Inglaterra». En 1493 el mismo gobierno municipal de Barcelona se refirió a Fernando el Católico como «el rey de Spanya, nostre senyor».



I així va ser com la idea de la unió política, que ja era una aspiració clara al segle XIV, es fa fer realitat. Y se cumplió entonces la profecía de Muntaner, con la expansión hispánica en el Mediterráneo y en América: la restauración de la España que en su día estuvo unida bajo los reyes godos y que se perdió por la invasión islámica, alcanzó «tot l’altre poder del mon».

O sea, que el primer pensamiento imperial de España lo divulgó un catalán. Y que España era una nación mucho antes de que nadie hablara de Cataluña.

Dolça i espanyolíssima Catalunya…






https://www.dolcacatalunya.com/2023/...rn-e-una-sang/