Dado que es una materia “non grata” y “para enterrar y olvidar”, ningún especialista católico-vaticanista al uso, se molestaría ya no en intentar hacerla metódicamente sino ni siquiera en aportar datos de dicha época. La historia de la trastienda de la subversión clerical española, desde un punto de vista tradicionalista y sin maquillaje embellecedor, que sería lo interesante, nunca se hará.
Mi intención, aparte de consignar los datos históricos, es resaltar la antítesis que vino a suponer la Hermandad Sacerdotal Española, que apareció en 1969, en las antípodas de todo ese caos, y precisamente motivada por él: simpatizando y apoyando, en sus posibilidades, al Régimen del 18 de Julio, ensalzado especialmente por Pío XII y apuñalado sin contemplaciones desde Roma (Pablo VI) y el aparato de poder al servicio del post-Concilio, potenciando la disidencia episcopal y sacerdotal española interna.
La reacción contra ese caos constituyó la Hermandad Sacerdotal Española.
En una primera parte, aporto datos de 1963 a 1969 inclusive; posteriormente, los datos de 1970 a 1975.
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