Respuesta: El nuevo discipulo de Chavez: Oliver Stone
No es que la gente de este Foro no entienda lo que escribe, es que igual quien necesita ser más claro respecto a qué se está refiriendo sea usted. Primero, el hilo versa sobre Oliver Stone; segundo, es peculiar que sus mensajes provoquen una reacción similar de rechazo hacia lo que afirma sobre Hugo Chávez en todos los intervinientes; tercero, es evidente que las interpretaciones que hace usted sobre presuntas unidades hispánicas no son las mismas que se hacen por aquí; cuarto, aquí nadie le ha ofendido, insultado, ni intención de ello ¿o es que no se puede discrepar de sus afirmaciones?; y quinto, los fines del Foro son más que evidentes y están muy, pero que muy, relacionados con las actividades de estos rufianes, incluida la referencia a la visita de ese indeseable individuo boliviano.
"He ahí la tragedia. Europa hechura de Cristo, está desenfocada con relación a Cristo. Su problema es específicamente teológico, por más que queramos disimularlo. La llamada interna y milenaria del alma europea choca con una realidad artificial anticristiana. El europeo se siente a disgusto, se siente angustiado. Adivina y presiente en esa angustia el problema del ser o no ser.
<<He ahí la tragedia. España hechura de Cristo, está desenfocada con relación a Cristo. Su problema es específicamente teológico, por más que queramos disimularlo. La llamada interna y milenaria del alma española choca con una realidad artificial anticristiana. El español se siente a disgusto, se siente angustiado. Adivina y presiente en esa angustia el problema del ser o no ser.>>
Hemos superado el racionalismo, frío y estéril, por el tormentoso irracionalismo y han caído por tierra los tres grandes dogmas de un insobornable europeísmo: las eternas verdades del cristianismo, los valores morales del humanismo y la potencialidad histórica de la cultura europea, es decir, de la cultura, pues hoy por hoy no existe más cultura que la nuestra.
Ante tamaña destrucción quedan libres las fuerzas irracionales del instinto y del bruto deseo. El terreno está preparado para que germinen los misticismos comunitarios, los colectivismos de cualquier signo, irrefrenable tentación para el desilusionado europeo."
En la hora crepuscular de Europa José Mª Alejandro, S.J. Colec. "Historia y Filosofía de la Ciencia". ESPASA CALPE, Madrid 1958, pág., 47
Nada sin Dios
Marcadores