Si, muchos soliloquios para no decir más que lugares comunes, mucha retórica hueca. Mucho hablar de lo que no se conoce, y muchas referencias veladas hacia quienes no comparten ideas, creencias -más bien esto último-, y tienen otra forma de entender las cosas. Luego se dice que no hay forma de hablar de política en España, por qué será que no me sorprende nada.