El Renacimiento, con su vuelta al paganismo, comenzó a renegar de la Edad Media. Giorgio Vasari, el primer historiador del arte creó la expresión arte gótico para referirse peyorativamente a una forma de arte que él consideraba propia de godos, de bárbaros. También fue el primero que habló de Renacimiento, aunque no el primer renacentista, porque vivió en el siglo XVI. El historiador Christof Keller (o Cellerius en su forma latinizada) dividió sus tres tomos de historia en Historia Antiqua, Historia Media Aevi e Historia Nova. A partir de entonces se divide la historia en estos periodos (al que habría que añadir la Edad Contemporánea desde la Revolución Francesa). La Edad Media quedaría así como una larga noche de mil años de oscuridad entre dos épocas luminosas: la antigüedad y el Edad Moderna. Es indudable que la Reforma también contribuyó muchísimo a la valoración negativa de la época medieval para justificar su rebelión. Y por supuesto, los filósofos ilustrados del siglo XVIII también hicieron su parte para difamar esta gran época de la Cristiandad. En el siglo XIX, el romanticismo, con su gusto por las épocas pretéritas, volvió a tener en estima la Edad Media, si bien presentándola de una forma que tampoco se ajusta totalmente a la realidad. Parte de ese gusto por la Edad Media sigue presente hoy en día, pero mezclado en muchos casos con una imagen negativa (por ejemplo, El Código da Vinci). También se podría añadir que la deprimente moda mal llamada gótica presenta una imagen deformada con su estética seudomedieval. En todo caso, de una forma u otra, yo creo que es una época que no deja indiferente a nadie. Se la ama o se la odia. Prueba de que no fue una época vacía y oscura.
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