El caso es que no soy muy dado a bajar nada, quizás sea que alguien conocido sin querer me haya enviado al correo este problema , y digo que tiene que ser conocido porque sino los correos que no sé de dónde proceden van directamente a la papelera de reciclaje. Esa es mi primera reflexión, lo siguiente es que no me atrevo a revisar mis programas porque la mayoría para mi son "chino" y no quiero meter la pata. Tengo que esperar hasta que un pariente --informático de profesión--, haga la limpieza según me prometió el pasado domingo.