Uno más, en este caso Jaime del Burgo Torres:

Como gran parte del arco político navarro de la época, Jaime del Burgo y sus compañeros de la AET de Pamplona asumían la identidad vasca de Navarra, que no encontraban contradictoria con su entusiasta españolismo, como consta en sus escritos. Igualmente desconfiaban de la obsesión antivasquista de Víctor Pradera, político tradicionalista que en 1919 había seguido la escisión mellista y que por entonces presidía el Consejo de Cultura de la Comunión Tradicionalista, ya que como señalaba el propio Del Burgo en una carta de octubre de 1932: «¿no será ese exceso de antinacionalismo… producto de algo… demasiado centralista?… Aquello de Por Navarra, para España se me hace un poco sospechoso».[3]​ No obstante, Jaime del Burgo se oponía a la integración tanto de Navarra como de Álava en lo que desde la revista a.e.t. llamaba «engendro nacionalista de Euzkadi».

https://es.m.wikipedia.org/wiki/Jaime_del_Burgo

Saludos en Xto.