Ciero, cierto, amigo Madera. Desde Muza y Tarik hasta Boabdil estarán riéndose desde sus tumbas. Que sean los propios españoles, muchos de ellos sedicentes cristianos, los que estén no solo permitiendo sino alentando la nueva invasión, es para reirse por parte de los musulmanes y para llorar por nuestra parte. ¿Nos dirán algún día nuestras madres lo que la madre del último sultán nazarí le dijo a su hijo: "Llora como mujer lo que no has sabido defender como hombre"? Dios no lo permita. Pero vamos por ese camino.